miércoles, 13 de noviembre de 2024

SAN CARLO DE JESUS ACUTIS DE ASIS


 


San Clemente de Alejandría, Los tapices
(Lib 4, 7: PG 8, 1255.1259.1263.1266.1267)
Dichosos los que derraman su sangre por causa de Dios


Todos cuantos ejecutan los mandatos del Salvador, en cada una de sus acciones son mártires, es decir, testigos, haciendo lo que él quiere, llamándolo consiguientemente Señor, y dando testimonio con los hechos de que están convencidos de que lo es de verdad; éstos han crucificado su carne con sus

pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, marchemos tras el Espíritu. El que siembra para la carne, de ella cosechará corrupción; el que siembra para el espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna. A los hombres débiles les parece violentísima la muerte con que se da testimonio cruento al Señor, ignorando que

esta puerta de la muerte es el principio de la verdadera vida: no quieren comprender ni los honores que se rinden después de la muerte a los que vivieron santamente, ni los suplicios de quienes se condujeron injusta y licenciosamente, y no me refiero tan sólo al testimonio de nuestras Escrituras, pero es que ni siquiera a los discursos de los suyos quieren dar oídos. Pues Pitágoras escribe a Teano:

«En realidad, la vida sería un suculento banquete para los malvados que mueren

después de haber cometido toda clase de fechorías, si el alma no fuese inmortal: la

muerte sería para ellos una ganancia».

Sabemos que Dios hace que todas las cosas contribuyan al bien de los que le aman, de los que han sido llamados según su voluntad. A los que de antemano conoció, a ésos los predestinó a reproducir la imagen de su Hijo, para que sea él el primogénito entre muchos hermanos. A los que predestinó también los

llamó; y a los que llamó, también los justificó; y a los que justificó, también los glorificó. Fíjate cómo el martirio se nos enseña por conducto del amor. Y si quisieras ser mártir para obtener la remuneración de los buenos, nuevamente oirás: Porque en esperanza fuimos salvados. Y una esperanza que se ve ya no es esperanza. ¿Cómo seguirá esperando uno aquello que ve? Cuando esperamos lo que no vemos, esperamos con perseverancia. Y Pedro dice: Dichosos vosotros si tenéis que sufrir por causa de la justicia.

Así pues, el gnóstico jamás considerará la vida material como el fin de la vida, sino que tratará más bien de ser siempre feliz, bienaventurado y amigo regio de Dios, y aun cuando alguien quisiere tildarle de infamia, castigarlo con el destierro o con la confiscación de los bienes o, finalmente, condenarlo a muerte, nunca podrá privarle de la libertad y, sobre todo, nada podrá separarlo del amor de Dios: El amor todo lo aguanta, todo lo soporta, porque está convencido de

que la divina providencia lo gobierna todo con justicia.

Aunque somos hombres y procedemos como tales, no militamos con miras humanas; las armas de nuestro servicio no son humanas, es Dios quien les da potencia para derribar fortalezas: derribamos sofismas y cualquier torreón que se yerga contra el conocimiento de Dios. Pertrechado con estas armas el

gnóstico dice: ¡Oh Señor, bríndame la ocasión y acepta mi actuación; que me suceda cualquier cosa grave y terrible: yo desprecio los peligros porque tengo mi amor puesto en ti!

Como elegidos de Dios, santos y amados, vestíos de la misericordia entrañable, bondad, humildad, dulzura, comprensión. Y, por encima de todo, el amor, que es el ceñidor de la unidad consumada. Que la paz de Cristo actúe de árbitro en vuestro corazón; a ella habéis sido convocados, en un solo cuerpo. Y sed agradecidos vosotros los que todavía moráis en el cuerpo, como los antiguos justos, tomando posesión de la tranquilidad del alma y de la inmunidad de las pasiones.


martes, 12 de noviembre de 2024

PALABRA COMENTADA

PALABRA COMENTADA

 

Martes 32 de tiempo ordinario

Tito 2, 1-8. 11-14




REFLEXIÓN

Habla de lo que es conforme a la sana(hugiaino:saludable, incorrupta, de la raíz de higiene) doctrina(didaskalia:lo que se enseña)

La enseñanza saludable será en adelante lo que custodia el carisma eclesial del magisterio de la Iglesia.

Será saludable en cuanto contribuya a la salvación de las personas en comunidad, para la vida de Dios.

El magisterio actualmente cuestionado por diversos sectores, compromete positiva o negativamente la verdad de la salvación según la revelación de la Palabra.

Por eso más que en otros momentos se requiere escrutar la Palabra y discernir con prudencia los hechos que afectan esa enseñanza del magisterio.

Los miembros de la jerarquía tienen un deber con su carisma magisterial, y se les debe respeto por el ministerio que realizan, como a otros ministerios y carismas. 

Pero esta posición no debe exigir como derecho otros privilegios, canonjías y fueros para provecho personal, sino solo lo pertinente al servicio de la enseñanza saludable para la salvación.

que inspiren buenas ideas a las jóvenes, enseñándoles a amar a los maridos y a sus hijos

En su escala cualquier jerarquía, aun la familiar tiene a su cargo un carisma o ministerio de la enseñanza.

Por más que ésta revista formas culturales diversas y cambiantes, se trata de una enseñanza que conlleva la salvación definitiva.

El sentido de la vida que portamos comienza en el amamantamiento de la madre a sus hijos.

Y si las generaciones posteriores manifiestan conductas díscolas y perversas, la responsabilidad compartida es de la jerarquía familiar.

para que no se desacredite la palabra de Dios

Este es el extremo que hay que huir y evitar: desacreditar la palabra de Dios. Porque si la conducta de los transmisores no es congruente, quién se fiará de su potencialidad. Más bien rebajamos al Señor a la estatura de un charlatán.

A los jóvenes, exhórtalos(parakaleo:estimular, alentar) también a ser prudentes, presentándote en todo como un modelo de buena conducta

Son muchas las disertaciones e investigaciones que plasman nuestro deficiente modelo personal de jerarquía como causante de tantos fracasos educativos escolares y no escolares. 

Y también pastorales.

En la enseñanza sé íntegro y grave, con un hablar sensato e intachable, para que la parte contraria se abochorne, no pudiendo criticarnos en nada

No como hipocresía sino como expresión de plenitud, de adentro hacia fuera.

Porque ha aparecido la gracia de Dios

No obstante hay gracia, hay presencia, hay reino, hay Jesús de Nazareth crucificado y glorificado.

enseñándonos a renunciar a la impiedad y a los deseos mundanos

Todas estas expresiones se pueden reformular para evitar el disgusto y el desgaste de nuestros tiempo. 

Los deseos mundanos pueden considerarse no el odio a lo que por creación es bueno, sino al apego al mundo que sea oclusivo en su horizontalidad de toda dimensión trascendente.

para prepararse un pueblo purificado, dedicado a las buenas obras.

Al servicio de la buena obra, que nace desde dentro por una motivación salvífica.

Esta reflexión induce un aire de simplicidad y sencillez en el estilo de vida, que evita todo cálculo y daño a otros.

Salmo responsorial: 36



REFLEXIÓN

Confía en el Señor y haz el bien

Una conclusión a la que podemos llegar es que sigamos con las manos en el arado del buen obrar, sin mirar atrás, confiando en el Señor, que da el crecimiento y la cosecha.

los justos poseen la tierra, / la habitarán por siempre jamás

Es la antesala de la primera bienaventuranza de Jesús:los justos, los pobres poseerán la tierra.

Y así como los justos no se reducían los que por cultura podían leer o saber de la ley para cumplirla, sino los que guardaban la alianza de Yaveh, también los pobres no podrían reducirse a la mera buena voluntad con Dios, pero aferrados a sus acumuladas riquezas, ni reducirse al pobre en condiciones socioeconómicas de miseria.

En todo esto la bienaventuranza se cifra en una adecuada relación y alianza con el Señor.

Sin poseer poseen: preludio a las bienaventuranzas

Lucas 17, 7-10




REFLEXIÓN

¿quién de vosotros le dice: "En seguida, ven y ponte a la mesa"?

Toda una revolución, que el dueño le sirva al empleado, por amor.

¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado?

"Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer.""

Lo diría Jesús en sí mismo cuando hacía la misión de su Padre: soy un pobre siervo, he hecho lo que tenía que hacer? 

Algo puede colegirse de lo que responde al Bautista cuando lo bautiza. Que hay que hacerlo para cumplir con toda justicia. 

Y lo que responde a Pedro cuando lava sus pies. Lo que hago ahora no lo entiendes pero lo entenderás después. 

El “tengo que” en muchos momentos más que un destino inexorable, implica una dinámica amorosa que deconstruye valores tenidos por únicos y que establecen divisiones, jerarquías, castas, sometimientos, discriminaciones, rechazos y demás, para construir un orden nuevo, una comunidad nueva, un ágape donde unos a otros nos sirvamos, y gocemos con la condescendencia.

Se le puede sugerir a una madre abnegada o un padre providente, que sienta haber hecho lo suficiente y que ya no debe hacer más, o más bien los padres amorosos dejarán de sentir la carga a pesar de los trabajos emprendidos por el bien de los hijos? Lo cual puede prestarse a abuso de ellos. Pero ni eso sienten.

Hay algo en la paternidad y maternidad que implica la siembra de una fraternidad en la dedicación al servicio mutuo.

Con estas palabras Jesús nos echa abajo toda especulación y expectativa sobre un reconocimiento jerárquico o ministerial por lo que hacemos.

Ni padres, ni madres, ni educadores, ni gobernantes, ni eclesiásticos desde el punto de vista del reino de la salvación, tienen fundamento para ninguna exigencia de reconocimiento de gloria.

Porque en esta dimensión todo es servicio y acción de gracias.

Lo interesante es que Jesús lava los pies de los criados y revela a un Padre que recibe jubiloso a los siervos convertidos en amigos de su hijo. 

Otra lógica que rompe con la nuestra basada en jerarquías.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1326124111383425026?s=20

motivaciondehoy


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Martes 32 de tiempo ordinario

Tito 2, 1-8. 11-14

Salmo responsorial: 36

Lucas 17, 7-10