sábado, 30 de abril de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Sábado 2 de Pascua

Hechos 6,1-7



REFLEXIÓN

No nos parece bien descuidar la palabra de Dios para ocuparnos de la administración.

Hay Papas de la Iglesia Católica Romana que han captado esta distinción con más claridad que otros.

Pero además, han tenido el buen juicio de emprender reformas, a lo largo de la historia de la Iglesia, para asegurar que el carisma de la Palabra no se sofoque bajo el peso de la administración.

Incluso las revoluciones mejor inspiradas han perdido velocidad de marcha y contaminado sus objetivos por la incapacidad o insuficiencia en la administración del cambio.

Moisés lideró al pueblo elegido por su carisma de portavoz de la liberación de Yavé, pero enfrentó el descontento popular durante la rutina diaria del proceso de liberación.

Esto significa que la Palabra, el carisma, la intervención del Señor en la Historia humana es encarnacionista. Nos asume como somos, con nuestras complejidades, y lleva adelante su designio con nuestra potencialidad que puede oscilar de poco a mucho, según los casos.

La palabra de Dios iba cundiendo, y en Jerusalén crecía mucho el número de discípulos; incluso muchos sacerdotes aceptaban la fe

Estamos acostumbrados a medir el éxito de algo por las encuestas y sondeos. Nos satisfacen como criterios de eficiencia, y realimentación de nuestros aciertos.

Pero el éxito de la palabra de Dios no es sencillo ni fácil de medir, ni de establecer criterios de éxito por las expresiones favorables o no.

Ciertos índices se pueden considerar:la afluencia a actos religiosos, sacramentales y demás. Y los censos de pertenencia a diferentes religiones.

Pero esto puede resultar falaz porque no toma en cuenta y no puede, el grado de compromiso de la conciencia, aunque se hagan actos y obras en nombre de la fe.

Esta aspiración al conocimiento exacto deberá esperar al juicio final del Señor. Y entretanto movernos en medio de la fe y esperanza, confiando en que hacemos lo mejor posible.

Que la administración de la primitiva comunidad se hiciera más compleja no necesariamente significaba una calidad de crecimiento mayor, aunque así lo esperaba el autor de Hechos.

Igualmente la motivación de la comida a los necesitados podía funcionar como un señuelo para atraer y quizás no todos eran comprometidos con el evangelio del Señor Jesús.

Incluso cuando falta o escasea el aspecto material, se enfría la fe y seguimiento de muchos, como la experiencia que tuvo Moisés del reclamo del pueblo airado por el hambre.

Salmo responsorial: 32



REFLEXIÓN

Que la palabra del Señor es sincera, / y todas sus acciones son leales

Es por tanto afincarnos en la Palabra de Pascua del Señor, que promete y muestra signos de liberación y salvación, a pesar de las deficiencias y limitaciones en el proceso de historización de las mismas.

Nuestro propio egoísmo además de nuestros límites de creaturas, tiene mucho que ver con la torpeza aparente con la que avanza el reino de Dios.

Juan 6,16-21

REFLEXIÓN

Al oscurecer

Por qué ese momento del día para cruzar el lago, si en la oscuridad parece más arriesgado hacerlo?

Era ya noche cerrada, y todavía Jesús no los había alcanzado

Si no lo es puede parecer simbólico e intencional: sin Jesús los que le siguen pasan por periodos de oscuridad.

caminando sobre el lago, y se asustaron

Efectivamente el relato tiene características de una visión pascual.

Qué necesidad tiene Jesús de ir caminando sobre las aguas, si pudo originalmente partir con ellos en la barca?

"Soy yo, no temáis."

Este podría ser el mensaje encuadrado en el relato con visos pascuales. Hoy cuando oscurece la fe y la noche parece cerrada, y nos gana el temor, Jesús sigue estando con nosotros, caminando sobre aquello que nos atemoriza.Es posible que no lo reconozcamos fácilmente, y esa es nuestra tarea de fe: reconocerlo, experimentarlo y proclamarlo.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1520363656114020352?s=20&t=ZcdPHMm7yXfL_3OBY0fAvQ

BEATO CARLO

 
De la Constitución Sacrosánctum Concílium, sobre la sagrada liturgia, del Concilio Vaticano segundo(Núms. 5-6)


LA ECONOMÍA DE LA SALVACIÓN

Dios, que quiere que todos los hombres se salven y lleguen al pleno conocimiento de la verdad, a través de muchas etapas y de muchas maneras habló en otro tiempo a nuestros antepasados por ministerio de los profetas y, cuando llegó la plenitud de los tiempos, envió a su Hijo, la Palabra hecha carne, ungido por el Espíritu Santo, para anunciar la Buena Noticia a los pobres y curar a los contritos de corazón, como médico corporal y espiritual, mediador entre Dios y los hombres. En efecto, su humanidad, unida a la persona de la Palabra, fue instrumento de nuestra salvación. Por esto, en Cristo se realizó plenamente nuestra reconciliación y en él se nos dio la plenitud del culto divino.

Esta obra de la redención humana y de la perfecta glorificación de Dios, preparada por las maravillas que Dios obró en el pueblo de la antigua alianza, Cristo la realizó principalmente por el misterio pascual de su bienaventurada pasión, resurrección de entre los muertos y gloriosa ascensión. Por este misterio, con su muerte destruyó nuestra muerte y con su resurrección restauró nuestra vida. Pues del costado de Cristo, dormido en la cruz, nació el sacramento admirable de la Iglesia entera.

Por esta razón, así como Cristo fue enviado por el Padre, él a su vez envió a los apóstoles, llenos del Espíritu Santo. No sólo los envió a predicar la Buena Noticia a toda creatura y a anunciar que el Hijo de Dios, con su muerte y resurrección, nos libró del poder de Satanás y de la muerte y nos condujo al reino del Padre, sino también a realizar la obra de salvación que proclamaban, mediante el sacrificio y los sacramentos, en torno a los cuales gira toda la vida litúrgica.

Y, así, por el bautismo los hombres son injertados en el misterio pascual de Jesucristo: mueren con él, son sepultados con él y resucitan con él, reciben el espíritu de adopción de hijos, por el que clamamos: «¡Padre!», y se convierten así en los verdaderos adoradores que busca el Padre.

Asimismo, cuantas veces comen la Cena del Señor, proclaman su muerte hasta que vuelva. Por eso el día mismo de Pentecostés, en que la Iglesia se manifestó al mundo, los que acogieron favorablemente la palabra de Pedro se hicieron bautizar. Y eran constantes en escuchar la enseñanza de los apóstoles, en la fracción del pan y en las oraciones, y alababan a Dios y gozaban de la simpatía general del pueblo.

Desde entonces, la Iglesia nunca ha dejado de reunirse para celebrar el misterio pascual: leyendo todos los pasajes de la Escritura que a él se refieren, celebrando la eucaristía, en la cual se hace de nuevo presente la victoria y el triunfo de su muerte, y dando gracias al mismo tiempo a Dios por su don inefable que tenemos en Cristo Jesús, para alabanza de su gloria

viernes, 29 de abril de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Viernes 2 de Pascua

Hechos 5,34-42



REFLEXIÓN

un fariseo llamado Gamaliel, doctor de la Ley, respetado por todo el pueblo

Un justo fuera de los cristianos, pero respetuoso del camino.

Se puede convivir en paz con una tolerancia de este tipo. Sería un paso previo global para encontrarnos por fin hermanados en una sola fe.

salió un tal Teudas, dándoselas de hombre importante, y se le juntaron unos cuatrocientos hombres. Fue ejecutado, dispersaron a todos sus secuaces, y todo acabó en nada. Más tarde, cuando el censo, salió Judas el Galileo, arrastrando detrás de sí gente del pueblo; también pereció, y dispersaron a todos sus secuaces.

Que los secuaces de Jesús hayan permanecido fieles a la misión es un indicio valioso para respetar y asumir su testimonio como digno de credibilidad.

Liderazgos hay muchos. Y unos arrastran más que otros a entusiastas e incautos. Pero importa tener en cuenta el criterio del tiempo: lo que persiste contra viento y marea da cierta garantía de un movimiento auténtico de cambio.

Muchos líderes que fanfarronean, no logran superar la barrera del tiempo que discurre y se convierte para ellos en olvido.

Hay algo que parece una marca inicial en el derrotero de la comunidad de Jesús y también en la historia: no hay jactancia, ni triunfalismo, ni prepotencia asociada a su caminar.

Es señal de pobres de Yavé, que confían en el Señor Padre y en su compañero Jesús resucitado  para su caminar.

Si su idea y su actividad son cosa de hombres, se dispersarán; pero, si es cosa de Dios, no lograréis dispersarlos, y os expondríais a luchar contra Dios.

Nuestra fe cristiana puede ayudarse del criterio del tiempo porque su historia de persistencia ha mostrado que no se extingue, y fortalece nuestra identidad de acompañados de Dios.

Un consejo de un sabio no cristiano, que converge en la voluntad de Dios aceptada aunque sea fuera del grupo de referencia.

Si es verdad de Dios, la verdad que llevo se abrirá paso desde el último lugar hasta un lugar de honor.

Los apóstoles salieron del Sanedrín contentos de haber merecido aquel ultraje por el nombre de Jesús

Ignacio de Loyola en sus Ejercicios Espirituales conduce al ejercitante a disponerse a la humillación y la persecución por el seguimiento de Jesús.

Es como una señal que solicitamos como elección a un seguimiento más cerrado de Jesús y su Reino.

Hubo un tiempo atrás en que se enfatizaba la petición de tales humillaciones y persecuciones a título de prueba, como en laboratorio.

Es olvidarse que por sí misma la opción fundamental del cristiano por el evangelio del reino, acarrea eventualmente incomprensión, rechazo o burla, que pueden minar tal opción, hasta que se desiste.

Ningún día dejaban de enseñar, en el templo y por las casas, anunciando el Evangelio de Jesucristo.

Un seguimiento cerrado del camino de Jesús lleva a una rutina cotidiana de anuncio.

Salmo responsorial: 26



REFLEXIÓN

El Señor es mi luz y mi salvación, / ¿a quién temeré? / El Señor es la defensa de mi vida, / ¿quién me hará temblar?

Hay temblores, pánicos y miedos involuntarios, que nos fuerzan y se imponen, pero no en el recinto profundo de la aceptación de la voluntad y designio del Padre.

Es ahí donde hinca su fortaleza el Espíritu que nos asiste, suavemente, desde dentro hacia afuera.

habitar en la casa del Señor / por los días de mi vida

La comunión con el Señor, conviviendo en fraternidad, es la forma más cotidiana de habitar en el Señor.

Espera en el Señor, sé valiente, / ten ánimo, espera en el Señor

Es el ancla que mantiene vinculado y unido el corazón a la promesa hasta el final.

Juan 6,1-15



REFLEXIÓN

Lo decía para tantearlo

Le gusta ver hasta dónde llegamos, sin dejar de ayudarnos.

Jesús tomó los panes, dijo la acción de gracias y los repartió a los que estaban sentados, y lo mismo todo lo que quisieron del pescado.

Repartir con el ánimo de compartir implica algo más: amistad, comunidad, fondo común.

Algo en contravía a nuestra instintiva y territorial actitud individualista privada.

Cuando se saciaron,

Un detalle a favor del realismo de la comida en vez de una ilusión.

Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró otra vez a la montaña él solo

Ser evangelizado es tener claro el objetivo de la fe y el estilo de vida: no es para servirse y montarse en los propios intereses por encima del bien común y de la vida que perdura.

Dicho en otro modo: no se entusiasmen tanto, que todavía falta. Hay cosas que toman tiempo.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1520008679159963648?s=20&t=pCwIiHGtPD0iypXiB39X3Q

DOCTORES DE LA IGLESIA



 Del Diálogo de santa Catalina de Siena, virgen, Sobre la divina providencia
(Cap. 167, Acción de gracias a la Santísima Trinidad: edición latina, Ingolstadt 1583, ff. 290v-291)

 

GUSTÉ Y VÍ

 

¡Oh Divinidad eterna, oh eterna Trinidad, que por la unión con tu divina naturaleza hiciste de tan gran precio la sangre de tu Hijo unigénito! Tú, Trinidad eterna, eres como un mar profundo, en el que cuanto más busco más encuentro, y cuanto más encuentro más te busco. Tú sacias el alma de una manera en cierto modo insaciable, ya que siempre queda con hambre y apetito, deseando con avidez que tu luz nos haga ver la luz, que eres tú misma.

 

Gusté y vi con la luz de mi inteligencia, ilustrada con tu luz, tu profundidad insondable, Trinidad eterna, y la belleza de tus creaturas: por esto, introduciéndome en ti, vi que era imagen tuya, y esto por un don que tú me has hecho, Padre eterno, don que procede de tu poder y de tu sabiduría, sabiduría que es atribuida por apropiación a tu Unigénito y el Espíritu Santo, que procede de ti, Padre, y de tu Hijo, me dio una voluntad capaz de amar.

 

Porque tú, Trinidad eterna, eres el hacedor, y yo la hechura: por esto he conocido con la luz que tú me has dado, al contemplar cómo me has creado de nuevo por la sangre del Hijo único, que estás enamorado de la belleza de tu hechura.

 

¡Oh abismo, oh Trinidad eterna, oh Divinidad, oh mar profundo!: ¿qué don más grande podías otorgarme que el de ti mismo? Tú eres el fuego que arde constantemente sin consumirse; tú eres quien consumes con tu calor todo amor del alma a sí misma. Tú eres, además, el fuego que aleja toda frialdad, e iluminas las mentes con tu luz, esta luz con la que me has dado a conocer tu verdad.

 

En esta luz, como en un espejo, te veo reflejado a ti, sumo bien, bien sobre todo bien, bien dichoso, bien incomprensible, bien inestimable, belleza sobre toda belleza, sabiduría sobre toda sabiduría: porque tú eres la misma sabiduría, tú el manjar de los ángeles, que por tu gran amor te has comunicado a los hombres.

 

Tú eres la vestidura que cubre mi desnudez, tú sacias nuestra hambre con tu dulzura, porque eres dulce sin mezcla de amargor, ¡oh Trinidad eterna!

jueves, 28 de abril de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Jueves 2 de Pascua

Hechos 5,27-33



REFLEXIÓN

queréis hacernos responsables de la sangre de ese hombre

Por más pacífico y lleno de amor cristiano que se proceda, decir una verdad puede resultar un detonante político.

Aunque la intención sea sólo exponer una visión, la misma puede resultar a otros una provocación a su poder.

No se sabe en qué momento algo así emerge, pero hay que estar dispuestos a vivir apegado a lo que se cree con sinceridad y honestidad.

Esta libertad que genera adversidades es un compromiso con la fe que se vivencia y asume en la existencia y tanto más libre es mientras menos ataduras tiene con propios y extraños.

Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres

Seguramente hemos conocido personas con temple para mostrse coherentes con sus convicciones políticas o religiosas.

Nos llama en ellos la atención su energía para defender lo que consideran justo, la que viene de su centro personal, de su consistencia indomable.

Esas posturas recuerdan la fuerza con la que el Señor asiste a sus voceros cuando han optado por su causa.

El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús, a quien vosotros matasteis, colgándolo de un madero

El mismo Padre al intervenir a favor del justo ajusticiado, su hijo, hizo sentir un juicio en el que los acusadores y verdugos resultaban desacreditados.

Esto en el plano histórico tuvo consecuencias políticas porque dejo ver responsabilidades de los poderes terrenales.

Predicar al justo Jesús resucitado implica ponerse del lado de esa intervención, vivir de ella y para ella, integralmente: con sus consecuencias en todos los órdenes.

Y para vivirlo hay que estar dispuestos a proceder con libertad en cuanto a esta verdad incluso contra los propios intereses y prejuicios.

No son los únicos responsables. En el camino a la decisión de esa muerte hubo varios que pudieron oponerse y no lo hicieron, por cobardía.

Y eso nos debe hacer pensar y sentir que en el proceso de tanto mal e injusticia que asuela el mundo, somos co-responsables y cómplices porque no hacemos lo que debemos hacer. Unos más que otros.

Sin embargo hay quienes son más activos en reaccionar contra la injusticia y luchar por impedirla. A ellos debemos mucha de nuestra paz.

para otorgarle a Israel la conversión con el perdón de los pecados.

La diferencia del anuncio evangèlico y la denuncia polìtica es la llamada a la conversión para todos: tirios y troyanos.

que Dios da a los que le obedecen

El Espíritu de Jesús es el que nos despierta de nuestra cómoda cobardía y nos mueve a involucrarnos más y más en la lucha por un amor y su justicia.

 

Esta respuesta los exasperó, y decidieron acabar con ellos

De momento no llegó esa conversión, no entonces, y por lo que vemos tampoco ahora, temporalmente al menos.

La catarata y el torrente de injusticia y crimen parece imparable y omnipotente.

El Espíritu de Jesús exaltado interviene en nosotros para reaccionar contra ese automatismo.

Salmo responsorial: 33



REFLEXIÓN

 

Gustad y ved qué bueno es el Señor,

El esfuerzo por el anuncio coherente del reino de Jesús conlleva una experiencia de gozo y sentido. Sentido de vida y de designio.

El Señor está cerca de los atribulados, / salva a los abatidos

Aunque no sean justos, precisamente para purificarlos de su injusticia.

El Señor sigue siendo el vengador de los suyos immersos en la fatiga del reino, pero ha cambiado la simbología de venganza y violencia por la persuasión del Espíritu.

Juan 3,31-36



REFLEXIÓN

 

El que acepta su testimonio certifica la veracidad de Dios

Nosotros al aceptar por fe el testimonio del Hijo hacemos veraz a Dios.

Somos sus inclusores históricos, sus encarnadores en el tiempo, los prolongadores de la encarnación de su Hijo.

El Señor requiere de nuestra aceptación para ser certificado en este mundo.

Somos como sus validadores históricos.

El Padre ama al Hijo y todo lo ha puesto en su mano

En la misión de Jesús se observa el amor que caracteriza al Señor.

El que cree en el Hijo posee la vida eterna

Desde la fe en Jesús asumida vivencial y existencialmente poseemos una vida nueva que atraviesa la consumación final.

El orgasmo sexual no es un fenómeno solitario y brillante al final de la actividad erótica, sino que se ha ido anunciando en espasmos placenteros que podemos identificar como pequeños o micro orgasmos.

La existencia humana del creyente en el Reino apunta a una brillante consumación final, que se va anticipando en el gozo cotidiano del ágape y la fraternidad.

Son como oasis en nuestro peregrinar por el desierto.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1519649798688804865?s=20&t=ulmZXcjdPkbwJX3AYgxr6A

BEATO CARLO



 De los Tratados de san Gaudencio de Brescia, obispo
                                 (Tratado 2: CSEL 68, 30-32)


EL DON DE LA NUEVA ALIANZA QUE NOS DEJÓ EN HERENCIA

El sacrificio celestial instituido por Cristo es verdaderamente el don de su nueva alianza que nos dejó en herencia, como prenda de su presencia entre nosotros, la misma noche en que iba a ser entregado para ser crucificado. Éste es el viático de nuestro camino, con el cual nos alimentamos y nutrimos durante el peregrinar de nuestra vida presente, hasta que salgamos de este mundo y lleguemos al Señor; por esto decía el mismo Señor: Si no coméis mi carne y no bebéis mi sangre, no tendréis vida en vosotros.

Quiso, en efecto, que sus beneficios permanecieran en nosotros, quiso que las almas redimidas con su sangre preciosa fueran continuamente santificadas por el sacramento de su pasión; por esto mandó a sus fieles discípulos, a los que instituyó también como primeros sacerdotes de su Iglesia, que celebraran incesantemente estos misterios de vida eterna, que todos los sacerdotes deben continuar celebrando en las Iglesias de todo el mundo, hasta que Cristo vuelva desde el cielo, de modo que, tanto los mismos sacerdotes como los fieles todos, teniendo cada día ante nuestros ojos y en nuestras manos el memorial de la pasión de Cristo, recibiéndolo en nuestros labios y en nuestro pecho, conservemos el recuerdo indeleble de nuestra redención.

Además, puesto que el pan, compuesto de muchos granos de trigo reducidos a harina, necesita, para llegar a serlo, de la acción del agua y del fuego, nuestra mente descubre en él una figura del cuerpo de Cristo, el cual, como sabemos, es un solo cuerpo compuesto por la muchedumbre de todo el género humano y unido por el fuego del Espíritu Santo.

Jesús, en efecto, nació por obra del Espíritu Santo y, porque así convenía para cumplir la voluntad salvífica de Dios, penetró en las aguas bautismales para consagrarlas, y volvió del Jordán lleno del Espíritu Santo, que había descendido sobre él en forma de paloma, como atestigua el evangelista san Lucas: Jesús regresó de las orillas del Jordán, lleno del Espíritu Santo.

Asimismo, también el vino que es su sangre, resultante de la unión de muchos granos de uva de la viña por él plantada, fue exprimido en el lagar de la cruz, y fermenta, por su propia virtud, en el espacioso recipiente de los que lo beben con espíritu de fe.

Todos nosotros, los que hemos escapado de la tiranía de Egipto y del diabólico Faraón, debemos recibir, con toda la avidez de que es capaz nuestro religioso corazón, este sacrificio de la Pascua salvadora, para que nuestro Señor Jesucristo, al que creemos presente en sus sacramentos, santifique nuestro interior; él, cuya inestimable eficacia perdura a través de los siglos

miércoles, 27 de abril de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Miércoles 2 de Pascua

Hechos 5,17-26



REFLEXIÓN

llenos de envidia

Esto existe. Es una ingenuidad no contar con ello. Pero es un problema clarificar y calificar algo o alguien en concreto, como una actuación envidiosa o llena de celo.

La envidia es por la popularidad y aceptación  de la gente, agradecida por el bien recibido del mensaje y la sanación.

Mostraban en Jesús resucitado un camino de felicidad posible.

En JesuCristo hay una felicidad definitiva porque la vida transformada en gloria que muestra, puede ser compartida, si morimos al pecado siguiendo sus pasos.

Con esa meta por delante vivimos ahora muriendo y resurgiendo, encontrando pistas de la vida nueva, cuya luz da visos en nuestra historia.

La envidia que señala el texto se origina en la fama del nuevo grupo. Aunque la casta dirigente no tuviera en crisis frente a su pueblo, un grupo querido por la gente porque les hace bien, es un poder emergente, que amenaza su estatuto.

Jesús enseñó a su grupo a no temer la competencia, porque lo que importa es el bien común.

el ángel del Señor les abrió las puertas de la celda y los sacó fuera

Puestos en el camino del Señor, buscando y expresando su voluntad de salvación para comunicarla a otros, suceden cosas negativas, que se convierten en positivas por el acompañamiento que nos hace el Espíritu.

El ángel puede ser toda circunstancia fortuita que favorece el camino de la vida definitiva, emprendido en la historia.

También otro ángel buscará –el de apariencia de luz- impedir, retrasar, sabotear ese caminar hasta que logre desviarlo.

Toca entonces orar y vigilar para no dejarse sorprender ni engañar.

Pero la misión los protege y les abre puertas cuando otras se cierran.

La misión es un modo de vida, una cultura, una ética propia.

“Id, y puestos de pie en el templo contad(laleo:decir,hablar) al pueblo todo lo referente(remata:palabras, mensaje) a esta vida nueva.”

No se les manda a inventar, embaucar, tejer fantasías. Se les manda a dar la cara en lugar público, donde pueden ser confrontados o desmentidos.

Se les da la misión de hablar sobre la vida que llevan, su vida normal, su cambio de vida. A dar testimonio.

se los trajo, sin emplear la fuerza, por miedo a que el pueblo los apedrease

Los de Jesús, el crucificado, andan en medio de la gente dando testimonio.

Y la gente los apoya, si considera su intervención favorable a sus intereses.

Pero también la gente o algunos entre ellos, puede ser manipulados por los poderosos para retirar respaldo a la misión, y dar a entender que tal testimonio no es aceptable.

Porque también la causa de la salvación del pueblo de Dios, puede ser traicionada por elementos del propio pueblo.

El pueblo tiene un sentido para la injusticia a flor de piel. Su respaldo es un indicio del caminar acertado. Pero el pueblo también requiere vigilancia para no dejarse comprar por el ángel de Luz.

Salmo responsorial: 33



REFLEXIÓN

que los humildes lo escuchen y se alegren.

Un pueblo que espera del Señor como única solución verdadera, mira en la dirección correcta.

Los que nos están amparados en el poder ni actúan en su nombre, sino con una ética diferente.

Yo consulté al Señor, y me respondió, / me libró de todas mis ansias

Un efecto de la sintonía con el Señor y su designio es la liberación de ansiedades y temores, la paz que conlleva la paciencia en la espera.

El ángel del Señor acampa / en torno a sus fieles y los protege

La inmunidad que nos concede el Señor en el nombre de su Hijo no nos ahorra el susto y el disgusto, sino más bien nos mantiene en pie, con suficiente energía para dar la pelea y mantener la paz.

Juan 3,16-21



REFLEXIÓN

Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único

Tanto amó, con amor de ágape, Dios al Mundo, dispuesto a la transformación hacia la vida definitiva, que se entregó en su Hijo único.

Porque la entrega del Hijo vino acompañada de la entrega del Padre, ya que juntos estaban en este designio.

Si Él ama y salva, quiénes somos para condenar.

El mundo también es amable, porque en él conviven los que creen con los que no creen.

para que no perezca ninguno de los que creen en él, sino que tengan vida eterna

Tener vida eterna, como no alcanza uno a imaginar, y no es de imaginar, parece de poco impacto en la vida corriente.

Pero si escrutamos en nuestros anhelos constantes, el impulso por un algo o alguien diferente, por una alternativa plena y satisfactoria sin medida ni límite, podría ser-de seguro es- esa semilla que crece en nosotros y va hasta la vida eterna.

Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.

Por lo pronto, trabajar por los que creen o podrán creer hasta el final.

El juicio definitivo está en manos de él.

Jesús es un nombre para salvar, aun hasta la última de las ovejas, que se deje salvar.

Nada se puede si la voluntad del candidato no acepta. En su negativa es respetable y su juicio está en manos del Padre.

Cuando podría esperarse una condenación al mundo por su rebeldía y contumacia frente a los valores del reino, el Padre entrega a su hijo para salvar al empedernido, al endurecido mundo.

Un esfuerzo que debe llegar hasta el final.

El que cree en él no será juzgado; el que no cree ya está juzgado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios

Es que creer consiste en una apuesta arriesgada y valiente a favor de Alguien con quien nos comprometemos hasta el tuétano.

Por sí misma tal situación produce una definición existencial que se puede tomar por un juicio, en el que nos ubicamos en una opción fundamental, que orienta toda la vida hasta su consumación.

Se dirá que esta es teología de Juan en su exclusivismo. Pero más bien es congruencia con el designio.

El juicio se da en la fe, en el creer, que equivale al compromiso personal de fondo.

que la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron la tiniebla a la luz, porque sus obras eran malas

Hay en la mentalidad contemporánea un gran aprecio por el valor de la transparencia y la verdad-escándalo para que todo se sepa y los misterios y secretos se descubran.

Ese valor puede incluir un antivalor, un género de hipocresía refinada, otro modo de falta de compromiso, que se contenta y regocija en que otros caigan para que los propios intereses prosperen.

Porque en todo bien se puede colar el anti-reino.

La obras de la tiniebla son el juicio que se activa cuando se rechaza la luz.

Para no seguir en la tiniebla es necesario reconocer la maldad de nuestras obras.

el que realiza la verdad se acerca a la luz, para que se vea que sus obras están hechas según Dios

Aunque la luz se pretendiera para fines insidiosos, quienes viven en la verdad de Dios la arrostran, porque viven en la verdad diáfana de la salvación, que no es producto de carne y sangre.

La luz no es un escándalo mediático o público. Pueden ser parte de una estrategia maquiavélica de desprestigio.

La luz de las obras se acredita por sí misma, de dentro hacia afuera, como la gestación silenciosa de la semilla en una planta.

Como el amor auténtico, que madura y se va probando, desde las actitudes hasta los pronunciamientos y hechos comunes.

La visión de nuestra miseria nos decepciona de nosotros mismos, y creemos morir.

Hay que pasar por ello para recuperar una autoestima que viene del Señor, e implica su reconocimiento y valoración, de acuerdo a los valores del Reino.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1519291095842267136?s=20&t=HjcOY_cOYIrzzi4mHfN2rg

 

DOCTORES DE LA IGLESIA

 


San León Magno Sermón sobre la Pasión 12,3,6-7

Es indudable, queridos hermanos que la naturaleza humana fue asumida tan íntimamente por el Hijo de Dios, que no sólo en él, que es el primogénito de toda criatura, sino también en todos sus santos, no hay más que un solo Cristo; pues del mismo modo que la cabeza no puede separarse de los miembros, tampoco los miembros de la cabeza.

REFLEXIÓN

La intimidad es una nota que da a la unidad un toque entrañable. Somos entrañables unos a otros miembros entre nosotros con la cabeza. Quién hay que sufra, que yo no sufra; quién alegre , que yo me alegre.  Un circuito de empatía nos invade, más allá de la división.

Aunque no es propio de esta vida, sino de la eterna, el que Dios lo sea todo en todos, no por ello deja de ser ya ahora el Señor huésped inseparable de su templo que es la Iglesia, de acuerdo con lo que él mismo prometió al decir: Sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Por ello, todo cuanto el Hijo de Dios hizo y enseñó para la reconciliación del mundo, no sólo podemos conocerlo por la historia de los acontecimientos pasados, sino también sentirlo en la eficacia de las obras presentes.

La información de la historia puede ser sentida por la espiritualidad. Es la actividad que introyecta en las vivencias profundas todo cuanto tiene que ver con la historia de salvación.

Por obra del Espíritu Santo nació él de una Virgen, y por obra del mismo Espíritu Santo fecunda también su Iglesia pura, a fin de que dé a luz a multitud innumerable de hijos de Dios, de quienes está escrito: éstos no han nacido de sangre, ni de amor carnal, ni de amor humano, sino de Dios. Él es aquel vástago en quien fue bendecida la descendencia de Abrahán y por quien la adopción filial se extendió a todos los pueblos, llegando por ello Abrahán a ser el padre de todos los hijos nacidos, no de la carne, sino de la fe en la promesa. 

REFLEXIÓN

La fe en la promesa es fértil, pues atañe a todo pueblo y nación. Ella tiende a una cristalización que desde la fe en el crucificado glorificado, entendemos como su final feliz, para todos. Por eso unos a otros conferimos promesa y realización, de fe en fe, como verdaderos justos.

Él es también quien, sin excluir a ningún pueblo, ha reunido en una sola grey las santas ovejas de todas las naciones que hay bajo el cielo, realizando cada día lo que prometió cuando dijo: Tengo, además, otras ovejas que no son de este redil; también a ésas las tengo que traer, y escucharán mi voz; y habrá un solo rebaño, un solo pastor. Porque si bien fue a Pedro a quien dijo principalmente, apacienta mis ovejas, sólo el Señor es quien controla el cuidado de todos los pastores, y alienta a los que acuden a la roca de su Iglesia con tan abundantes y regados pastos, que son innumerables las ovejas que, fortalecidas con la suculencia de su amor, no dudan en morir por el nombre del Pastor, como el buen pastor se dignó ofrecer su vida por sus ovejas. Es él también aquél en cuya pasión participa no sólo la gloriosa fortaleza de los mártires, sino también la fe de todos los que renacen en el bautismo. Por este motivo la Pascua del Señor se celebra legítimamente con ácimo de sinceridad y de verdad si, desechado el fermento de la antigua malicia, la nueva criatura se embriaga y nutre del mismo Señor. Porque la participación del cuerpo y de la sangre de Cristo no hace otra cosa sino convertirnos en lo que recibimos: y seamos portadores, en nuestro espíritu y en nuestra carne, de aquel en quien y con quien hemos sido muertos, sepultados y resucitados

martes, 26 de abril de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Martes 2 de Pascua

Hechos 4,32-37



REFLEXIÓN

En el grupo de los creyentes (pisteuo: creer, confiar, entregarse) todos pensaban y sentían lo mismo: lo poseían todo en común y nadie llamaba suyo propio nada de lo que tenía

He aquí la utopía cristiana en la historia mientras se llega al destino final: la gloria.

Algo así entrevieron en Israel cuando legislaron el jubileo: una sociedad capaz de reconciliarse, eliminando las deudas, para volver a comenzar de cero y que todos tuvieran oportunidades de medrar.

La diferencia está entre la Ley y el Espíritu. Los creyentes de la Ley Mosaica, sólo internalizándola, llegaban a la comprensión y consiguiente práctica de la fraternidad, como unión económica y de voluntades.

Los del Espíritu pentecostal inicial practicaban la fraternidad por buena voluntad, buena fe, por entregarse mutuamente en ágape, frente al cual, la entrega por eros es un mero reflejo.

Una utopía difícil y compleja en su proceso histórico, pero asequible.

El mundo no entenderá, que ni eros ni filia lo consiguen, si acaso lo barruntan.

Nos encontramos en una etapa, los creyentes cristianos, del pluralismo y no de uniformidad, como pareciera desprenderse en aquel tiempo, del texto.

Cómo vivir el pluralismo? Con tolerancia de las diferencias.

Dentro del catolicismo y aun del cristianismo son varias las tendencias, unas más agresivas que otras, que deben coexistir, incluso en una misma familia.

los que poseían tierras o casas las vendían, traían el dinero y lo ponían a disposición de los apóstoles

Porque el mundo no termina de entender, ni tiene la capacidad, que sin autodonación y renuncia, no es posible el ágape.

Éste surge del autodespojo, su suelo nutricio.

Porque sin pobreza voluntaria, de corazón, seguimos apegados y poco solidarios.

Pocos entienden que sin la contribución de corazón, toda colecta impuesta será vista como un tipo de opresión. Y como excusa ante la conciencia de culpa se alude a la falta de credibilidad de quienes administran impuestos.

tenía un campo y lo vendió

Los más acaudalados o pudientes, con recursos más allá de los necesarios para la vida, lo vendían y entregaban a la comunidad.

Es decir, se evitaba la acumulación de los bienes ociosos, para destinarlos a la solidaridad.

Porque la acumulación de bienes ociosos, es una idolatría, que consiste en vivir la seguridad a través de los bienes materiales y la riqueza acumulada, más que del señorío del Padre en su providencia, tal como Jesús nos lo mostró.

Salmo responsorial: 92



REFLEXIÓN

tú eres eterno

Su eternidad que es un concepto nuestro, alude a su otreidad con respecto a nuestro tiempo.

Nuestra identidad, que se mantiene a flote a lo largo de los avatares de la historia, es como una huella desproporcionada de esa eterna identidad del Señor cuya Palabra mantiene el Designio imparable de Salvación.

la santidad es el adorno de tu casa

El sentido de la santidad del Dios cristiano no es la separación ni la pureza, que son más bien efecto de algo y alguien más amoroso: la koinonía(comunidad) trinitaria que modela la koinonía terrena.

La comunión de vida y bienes en la comunidad, pugna por ser un reflejo de la comunión en la vida del Padre, el Hijo y el Espíritu.

El amor al prójimo brota como rasgo de comunión y hace efectiva la intervención del Dios comunitario en la existencia humana.

Juan 3,5a.7b-15



REFLEXIÓN

el viento sopla donde quiere y oyes su ruido, pero no sabes de dónde viene ni a dónde va

Se trata de una dimensión o eón de libertad y ligereza, sutil como el aire que respiramos.

Por eso cuando nos despojamos por fe y nos entregamos, elegimos irnos haciendo pobres para que nuestro peso, por aferrarnos, no se oponga al arrebato del Espíritu, y nos dejemos conducir.

Ignacio a sus ejercitantes les recomendaba dejarse llevar por el Espíritu oponiendo el mínimo de resistencia.

Cuándo nos dejaremos hacer de verdad, que el Señor tome el timón de todo?

Así es todo el que ha nacido del Espíritu.

LLevado por el Espíritu como el viento que lleva su propio rumbo.

Es dejarse gobernar e imponer un rumbo.

"Y tú, el maestro de Israel, ¿no lo entiendes? Te lo aseguro, de lo que sabemos hablamos; de lo que hemos visto damos testimonio

Nicodemo sabía del Jubileo de la Ley, pero no del dejarse llevar como Jesús lo practicaba.

Porque si alguien se entregó confiadamente al Padre y fue impulsado por el Espíritu, ese fue Jesús de Nazareth.

Una sabiduría que no está atada a un magisterio, ni erudición, ni abundancia de estudio.

El más humilde puede accederla.

Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna

Una vez elevado en cruz, puede dispensar vida eterna a los que se le entregan y se dejan llevar por su Espíritu.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1518914292954841089?s=20&t=DqP09kK1uie5b7X-lJsFpQ