sábado, 16 de octubre de 2021

PALABRA COMENTADA

 

SÁBADO 28 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Romanos 4,13.16-18



REFLEXIÓN

Hermanos: No fue la observancia de la Ley, sino la justificación obtenida por la fe, la que obtuvo para Abrahán y su descendencia la promesa de heredar el mundo. Por eso, como todo depende de la fe, todo es gracia; así, la promesa está asegurada para toda la descendencia, no solamente para la descendencia legal, sino también para la que nace de la fe de Abrahán, que es padre de todos nosotros. Así, dice la Escritura: "Te hago padre de muchos pueblos."

Parece decir por tanto, que en el supuesto de que Abraham fuera la cuna de una cultura, antes de ella se dio la fe a una promesa gratuita.

La observancia de la ley en una cultura es un acto segundo, que no remonta sino que sucede a la fe.

Como fe conecta con la promesa gratuita dondequiera se dé la fe de Abraham.

La exclusividad de la descendencia legal no tiene fundamento para cerrar el paso a la promesa gratuita correspondida por una fe como la de Abraham.

Todo ser humano puede ser hijo de Abraham si accede a la promesa por esa calidad de fe.

Cómo es la fe de Abraham, llave para toda la humanidad?

Al encontrarse con el Dios que da vida a los muertos y llama a la existencia lo que no existe, Abrahán creyó. Apoyado en la esperanza, creyó, contra toda esperanza, que llegaría a ser padre de muchas naciones, según lo que se le había dicho: "Así será tu descendencia."

El encuentro con Dios permite a Abraham el acceso a una fe cuya calidad consiste en esperar contra toda esperanza.

Esta es la fe que practica el justo de Habacuc: el justo por fe vivirá.

En Abraham esa fe se manifestó en creer y esperar numerosa descendencia a pesar de sus escasas posibilidades individuales.

La fe de Abraham consiste, ya como vida plena en Jesús de Nazareth, en desconcentrar la esperanza única en las probabilidades propias y transferirla, en creciente énfasis, a las posibilidades que laten en Dios.

A esta luz es comprensible con asaz claridad la expresión en boca de Jesús en cuanto a que para Dios no hay nada imposible.

La negación de la imposibilidad como atributo de Dios es la clave de la fe al estilo de Abraham, y está disponible para todo pueblo, raza o nación.

Salmo responsorial: 104



REFLEXIÓN

Se acuerda de su alianza eternamente, / de la palabra dada, por mil generaciones;

El sistema de la palabra empeñada, una sola, clara, transparente, firme es el sistema de una persona cuyo principal analogado es el Señor.

Ser persona es tener y mantener la palabra dada sin oscurecerla para siempre.

Ella es la trascendencia y la totalmente otra palabra, que contrasta y relativiza toda otra palabra de cualquiera.

Relativiza todo otro sistema que no se funda en la palabra que requiere y justifica una fe esperanzada.

Lucas 12,8-12



REFLEXIÓN

Al que hable contra el Hijo del hombre se le podrá perdonar, pero al que blasfeme contra el Espíritu Santo no se le perdonará.

el Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir

Como en todo lo demás la comunidad seguidora de Jesús lo tiene como modelo que los inspira en el seguimiento.

Y así capta desde la fe pascual que el don otorgado por Jesús, pero vivido por él, es la obediencia al Espíritu, y dejarse enseñar por Él.

Es imperdonable desacreditar la acción del Espíritu de Dios. Nada lo justifica.

En esto consiste una existencia que aprende puntualmente, en cada coyuntura.

Y volverse contra esta enseñanza es una blasfemia (lenguaje difamatorio) que por si mismo excluye del influjo del Espíritu.

Un lenguaje que expresa falta de fe en su enseñanza.

no os preocupéis de lo que vais a decir, o de cómo os vais a defender. Porque el Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir

Lo propio es creer y esperar que interviene y seguirá anteviniendo el Espíritu Santo en nuestra defensa decisiva.

Confiar en la intervención oportuna, esperar su auxilio pertinente, es la fe que nos transmite la tradición de la Palabra desde los relatos de Abraham.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1449341358708244481?s=20

BEATO CARLO



 De la Constitución pastoral Gaudium et spes, sobre la Iglesia en el mundo actual, del
Concilio Vaticano segundo
(Núms. 40. 45)

YO SOY EL ALFA Y LA OMEGA, EL PRIMERO Y EL ÚLTIMO

La compenetración de la ciudad terrestre con la ciudad celeste sólo es perceptible por la
fe: más aún, es el misterio permanente de la historia humana, que, hasta el día de la
plena revelación de la gloria de los hijos de Dios, seguirá perturbada por el pecado.
La Iglesia, persiguiendo la finalidad salvífica que es propia de ella, no sólo comunica al
hombre la participación en la vida divina, sino que también difunde, de alguna manera,

sobre el mundo entero la luz que irradia esta vida divina, principalmente sanando y
elevando la dignidad de la persona humana, afianzando la cohesión de la sociedad y
procurando a la actividad cotidiana del hombre un sentido más profundo, al impregnarla
de una significación más elevada. Así la Iglesia, por cada uno de sus miembros y por toda
su comunidad, cree poder contribuir ampliamente a humanizar cada vez más la familia
humana y toda su historia.
Tanto si ayuda al mundo como si recibe ayuda de él, la Iglesia no tiene más que una
sola finalidad: que venga el reino de Dios y que se establezca la salvación de todo el
género humano. Por otra parte, todo el bien que el pueblo de Dios, durante su
peregrinación terrena, puede procurar a la familia humana procede del hecho de que la
Iglesia es el sacramento universal de la salvación, manifestando y actualizando, al mismo
tiempo, el misterio del amor de Dios hacia el hombre.
Pues el Verbo de Dios, por quien todo fue hecho, se encarnó, a fin de salvar, siendo él
mismo hombre perfecto, a todos los hombres y para hacer que todas las cosas tuviesen a
él por cabeza. El Señor es el término de la historia humana, el punto hacia el cual
convergen los deseos de la historia y de la civilización, el centro del género humano, elgozo de todos los corazones y la plena satisfacción de todos sus deseos. Él es aquel a
quien el Padre resucitó de entre los muertos, ensalzó e hizo sentar a su derecha,
constituyéndolo juez de los vivos y de los muertos. Vivificados y congregados en su
Espíritu, peregrinamos hacia la consumación de la historia humana, que corresponde
plenamente a su designio de amor: Recapitular en Cristo todas las cosas del cielo y de la
tierra.
El mismo Señor ha dicho: Mira, llego en seguida y traigo conmigo mi salario, para pagar
a cada uno su propio trabajo. Yo soy el alfa y la omega, el primero y el último, el principio
y el fin.

viernes, 15 de octubre de 2021

PALABRA COMENTADA

 

VIERNES 28 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Romanos 4,1-8



REFLEXIÓN

"Abrahán creyó a Dios, y esto le valió la justificación."

La cima de la amistad. La muestra de nobleza por excelencia: creer, fiarse, dejarse llevar por la palabra de otro. La palabra como garantía, la persona como fiador. Un sistema de lealtad totalmente otro respecto a la garantía de un valor material: una mercancía. Y como tal la palabra confiada genera una cultura, un universo, un todo coherente de lealtades en los que la persona es el centro de confianza y respaldo.

Hay crisis manifiesta en el sistema de lealtades cuya garantía es la mercancía, el valor material: la moneda, la tierra, la información, la acumulación de poder. Surgen los indignados, es decir, los que sienten que la dignidad de la persona ha dejado de ser el respaldo, y hay una degradación de esa dignidad: desempleados, vagos, relegados, excluidos en la flor de la edad productiva.

Claman por la restitución del sistema de la palabra en el que la garantía sea la persona y la lealtad no termine en engaño y frustración.

a éste que no hace ningún tabajo, pero tiene fe en que Dios hace justo al impío, esa fe se le cuenta en su haber

Sólo que el camino de la indignidad a la dignificación es mucho más largo y arduo porque entraña una conversión: intelectual y moral. La protesta, las caminatas, las huelgas no están mal, pero no son suficientes sin gestos de un sistema de lealtades desde la palabra de la persona.

Salmo responsorial: 31



REFLEXIÓN

Había pecado, lo reconocí, / no te encubrí mi delito; / propuse: "Confesaré al Señor mi culpa", / y tú perdonaste mi culpa y mi pecado

La culpa irracional, el escrúpulo, siempre rondará como secuela y estrategia del adversario, para desalentar la salvación. Pero la confesión y el perdón dan fuerza para neutralizarlos y salirse de ellos, cada vez más.

Lucas 12,1-7



REFLEXIÓN

miles y miles de personas se agolpaban hasta pisarse unos a otros.

Probablemente no fue tanto. No hay esas cantidades en las aldeas de Galilea. Pero es el recurso que muestra un fundamento histórico: Jesús atraía por lo que hacía y por lo que decía. Era el sistema de lealtades centrado en la palabra, en escena.

Porque en ese momento también había muchos indignados con un sistema que los excluía hasta hacerlos pecadores. Era una etiqueta clasista puesta por la élite.

Cuidado con la levadura de los fariseos, o sea, con su hipocresía

Los detentores del sistema de hipocresía usaban la palabra en doble sentido: un sentido para los demás, otro para ellos. No era transparente, sincero, único. Generaba desconfianza, malestar. Disolvía una sociedad que quisiera centrarse en la dignidad de la palabra de la persona.

Nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, nada hay escondido que no llegue a saberse. Por eso, lo que digáis de noche se repetirá a pleno día, y lo que digáis al oído en el sótano se pregonará desde la azotea.

Lo corrupto y lo bendito se saben porque son los fragores de la lucha por el reino de Dios.

Deben saberse para que no idolicemos este mundo en lugar del reino. Y para que no perdamos esperanza de heredar el reino.

Una actitud de coraje que permite ser transparente sin tener miedo. Sin ocultar, sin doblez. Como Jesús.

Los suyos que le seguían estaban llamados a la palabra única, transparente, confiable.

Ese sistema de palabra única tiene sus consecuencias y riesgos. Pero el temor que cause puede disiparse con una sencilla conclusión: aparte de quitar la vida, no pueden hacer más.

no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden hacer más

Lo corrupto tiene un límite del cual no puede pasar: la vida terrenal. Su dominio es la muerte. Hemos de vigorizar nuestra esperanza asumiendo que la herencia del reino vence la muerte terrenal.

Es algo intimidante si nos afincamos en la creencia de que sólo tenemos la vida que conocemos. Es la maravilla de la fe que se origina desde Abraham y culmina en Jesús: creer en Aquel que da la vida, la vida plena.

Claro ese sistema de palabra única tiene sus consecuencias y riesgos. Pero el temor que cause puede disiparse con una sencilla conclusión: aparte de quitar la vida, no pueden hacer más. Claro que es algo intimidante si nos afincamos en la creencia de que sólo tenemos la vida que conocemos.

¿No se venden cinco gorriones por dos cuartos? Pues ni de uno solo se olvida Dios. Hasta los pelos de vuestra cabeza están contados. Por lo tanto, no tengáis miedo: no hay comparación entre vosotros y los gorriones."

El santo o santa que expresó: Yo sé de quién me he fiado, lo dijo muy bien. Fiarse. No se necesita más.

 

DOCTORES DE LA IGLESIA

 


UN NIÑO SACRIFICIO HACIENDO LO PROPIO:JUGAR CON SUS AMIGOS, COMO UNO MÁS

Viernes, XXVIII semana

San Agustín Ciudad de Dios 10,6

Verdadero sacrificio es toda obra que se hace con el fin de unirnos a Dios en santa sociedad, es decir, toda obra relacionada con aquel supremo bien, mediante el cual llegamos a la verdadera felicidad. Por ello, incluso la misma misericordia que nos mueve a socorrer al hermano, si no se hace por Dios, no puede llamarse sacrificio. Porque, aun siendo el hombre quien hace o quien ofrece el Sacrificio éste, sin embargo, es una acción divina, como nos lo indica la misma palabra con la cual llamaban los antiguos latinos a esta acción. Por ello, puede afirmarse que incluso el hombre es verdadero sacrificio cuando está consagrado a Dios por el bautismo y está dedicado al Señor, ya que entonces muere al mundo y vive para Dios. Esto, en efecto, forma parte de aquella misericordia que cada cual debe tener para consigo mismo, según está escrito: Ten compasión de tu alma agradando a Dios.

REFLEXIÓN

Llamar sacrificio al que exclusivamente se hace por Dios, parece hoy en dia una herejía contra el valor del ser humano, quien se dice merecer necesariamente la pena del denodado esfuerzo de todo humano, para ser amado por sí mismo. Se dice que Ireneo propone la gloria de Dios en el hombre que puede vivir. Es decir, no dicotomiza entre uno y otro, porque parece que quien dice hombre o mujer, dice Dios. Sin embargo,  hemos de hacer un énfasis sin descansar: el humano o humana endiosado es el que participa de la vida nueva en Jesús muerto y resucitado. La humanidad nueva que amaneció en Cristo Jesús. Si el sacrificio por el hombre y amarlo es por él como hijos del Dios viviente, no habría que dividirse. Mas sabemos que en el nombre de Dios se exorciza todo mal e impura motivación, y se ama mejor.

jueves, 14 de octubre de 2021

PALABRA COMENTADA

 

JUEVES 28 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Romanos 3,21-30ª



REFLEXIÓN

Ahora, la justicia de Dios, atestiguada por la Ley y los profetas, se ha manifestado independientemente (χωρίς: aparte)  de la Ley

Nos parece lejano ese ahora. Que está distante de lo que pasa en nuestro entorno, si se justifica nuestra percepción .

Esperar de la ley ya no es viable. Tu justicia se manifestó y esperamos se siga manifestando independiente y autónoma. Cómo disponerse a ella, cómo procurarla?

Por la fe en Jesucristo viene la justicia de Dios en todos los que creen, sin distinción alguna

todos pecaron y todos están privados de la gloria de Dios, y son justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención de Cristo Jesús, a quien Dios constituyó sacrificio de propiciación (λαστήριον:expiación) mediante la fe en su sangre

En un sistema pagano de divinidades, como el que se vive entre los gentiles en Roma, meca de religiones durante el Imperio, se busca la salvación material y de todo tipo, mediante el apaciguamiento de la divinidad, quien castiga a los mortales por sus culpas, conocidas o no.

Este sistema aparece también en etnias indoamericanas y posiblemente en muchas otras culturas.

La categorización de la muerte de Jesús como propiciación-expiación nos puede llevar a una comprensión errónea de la naturaleza de la divinidad que revela Jesús, como si en vez de Padre tuviéramos un insaciable Señor que requiere satisfacción, venganza y castigo.

Habría que hacer varias distinciones: este mecanismo de concepción de lo divino como ser vengativo no está desterrado de nuestra mentalidad. Yace en lo más profundo y alienta nuestras culpas y miedos. Las pesadillas son sus voceros.

La entrega de Jesús puede transformar su sacrificio de propiciación, en muestra de amor al designio del Padre.

No es una víctima de Él, sino una de nosotros y nuestra ceguera. Es una víctima que lo conmueve a intervenir radicalmente: resucitándolo y justificándolo.

De parte de Jesús es la colaboración de un Hijo en la obra de persuadir a la humanidad que su revelación, su designio, su proyecto es amoroso, desinteresado, salvífico, propicio.

Por lo tanto se trata de una propiciación hacia nosotros de la buena voluntad del Padre de Jesús y de su don como Espíritu.

se proponía mostrar en nuestros días su justicia salvadora, demostrándose a sí mismo justo y justificando al que apela a la fe en Jesús

el hombre es justificado por la fe, sin las obras de la Ley

El énfasis de Lutero en la fe en Jesucristo, nos ha ayudado mucho a la Iglesia universal a profundizar en el misterio: realidad perteneciente a la trascendencia de Dios, de la relación fe-gracia-obras. La gracia, la gratuidad, ni se vende ni se compra. Se dona.

Salmo responsorial: 129



REFLEXIÓN

Si llevas cuenta de los delitos, Señor, / ¿quién podrá resistir? / Pero de ti procede el perdón, / y así infundes respeto

No se trata del Dios vengativo, sediento de sangre.

Infunde respeto porque su proceder no se parece al de nosotros, que tasamos el buen o mal comportamiento en crecientemente sofisticados sistemas de premios y castigos, no tanto para que resplandezca la verdad y el bien, cuanto para sacar nuestro provecho e interés adelante.

Cantidades industriales de acciones con las que las diferentes autoridades y superiores premian, incentivan o castigan y desestiman, han perdido el respeto en nuestros días por la sombra que proyectan de intereses mezquinos y egoístas detrás.

Aun los que hacen votos de obediencia en comunidades religiosas sienten flaquear su entrega por la suspicacia sobre las verdaderas intenciones tras la orden del superior, decretada en nombre de la voluntad de Dios.

Lucas 11,47-54



REFLEXIÓN

edificáis mausoleos a los profetas

vosotros les edificáis sepulcros

Dat tertium: levantar monumentos puede tener la intención de desagravio del crimen del pasado.

Pero no parece ser el sentido de la recriminación, sino el de complicidad.

Porque si nos demarcamos de algo, poner ciertas medidas y quedarnos en ello, no es propiamente una conversión sino complicidad.

Así no cualquier conversión lo es en sinceridad.

No cualquier limosna es amor a los pobres y lucha por la justicia.

No cualquier activismo lo es tampoco.

Hay que escrutar.

La respuesta esperada era la conversión, no la construcción de sepulcros de los profetas asesinados.

a esta generación se le pedirá cuenta de la sangre de los profetas derramada desde la creación del mundo; desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías, que pereció entre el altar y el santuario

Pedir cuentas puede entenderse para la venganza.

O para la conversión sincera y emprender otro camino más justo.

Profeta por lo tanto quiere decir: todo aquél que en nombre de la justicia se opuso a la iniquidad, desde el principio del mundo.

¡Ay de vosotros, maestros de la Ley, que os habéis quedado con la llave del saber; vosotros, que no habéis entrado y habéis cerrado el paso a los que intentaban entrar!"

Porque educar es un compromiso a la transferencia de un saber, que se puede obstaculizar paradójicamente, cerrando lo que se tenía que abrir: la sabiduría.

los escribas y fariseos empezaron a acosarlo y a tirarle de la lengua con muchas preguntas capciosas, para cogerlo con sus propias palabras

Sigue sin provocar conversión la intervención de Jesús. Mala estrategia? O con esta cerrazón no cabe ninguna otra que la denuncia del mal uso del poder?

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1448618858449866756?s=20

DOCTORES DE LA IGLESIA

 


Su modo de proceder por sí solo convenció al no creyente a parecerse a él compartiendo su fe

Jueves, XXVIII semana

San Agustín Tratados sobre el evangelio de san Juan 26,4-6

Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre. No vayas a creer que eres atraído contra tu voluntad; el alma es atraída también por el amor. Ni debemos temer el reproche que, en razón de estas palabras evangélicas de la Escritura, pudieran hacernos algunos hombres, los cuales, fijándose sólo en la materialidad de las palabras, están muy ajenos al verdadero sentido de las cosas divinas. En efecto, tal vez nos dirán: «¿Cómo puedo creer libremente si soy atraído?» Y yo les respondo: «Me parece poco decir que somos atraídos libremente; hay que decir que somos atraídos incluso con placer». ¿Qué significa ser atraídos con placer? Sea el Señor tu delicia, y él te dará lo que pide tu corazón. Existe un apetito en el alma al que este pan del cielo le sabe dulcísimo. Por otra parte, si el poeta pudo decir: «Cada cual va en pos de su apetito», no por necesidad, sino por placer, no por obligación, sino por gusto, ¿no podremos decir nosotros, con mayor razón, que el hombre se siente atraído por Cristo, si sabemos que el deleite del hombre es la verdad, la justicia, la vida sin fin, y todo esto es Cristo? ¿Acaso tendrán los sentidos su deleite y dejará de tenerlos el alma? Si el alma no tuviera sus deleites, ¿cómo podría decirse: Los humanos se acogen a la sombra de tus alas; se nutren de lo sabroso de tu casa, les das a beber del torrente de tus delicias, porque en ti está la fuente viva, y tu luz nos hace ver la luz?

REFLEXIÓN

El tránsito de la materialidad y la realidad inmediata, hoy como ayer, hacia la saciedad del espíritu en el tiempo, y fuera de él, es un desafío permanente al peregrino de fe y esperanza que madura en el amor. Desafío es un obstáculo, un dilema, un conflicto que se interpone para nuestro crecimiento, hasta el final de la misión en el mundo. Incluso hoy, con la gravitación hacia los cambios sociales y estructurales, que generan infelicidad a las víctimas, nos encontramos con el desafío al que somos persuadidos a superar, y esta superación repercute en  un sentido positivo, en una realización del bien común, que llega a su final en la plenitud de Dios.

miércoles, 13 de octubre de 2021

PALABRA COMENTADA

 

MIÉRCOLES 28 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Romanos 2,1-11



REFLEXIÓN

al dar sentencia contra el otro te condenas tú mismo, porque tú, el juez, te portas igual

Israel como elegido, Pablo lo puede decir, pretende no ser como los gentiles.

Más que don para compartir, su elección es vivida como sentencia de perdición para otros.

Una actitud que no está lejos de cada uno de los que por experiencia de fe, nos engañamos al sentirnos superiores o distintos.

No hay honor humano, ni méritos propios en este orden de la gracia.

Por eso los acontecimientos, con frecuencia nos bajan del pedestal que nos hemos hecho como oportunidades de recobrar la perspectiva del don.

al no reconocer que esa bondad es para empujarte a la conversión?

Es frecuente en este tiempo escuchar opiniones en contra de cualquier rasgo penalizador en el Señor. Él es todo bueno y misericordioso.

Sin embargo no hacemos igual énfasis que la misericordia abona la conversión, que sin embargo depende de nuestra voluntad.

A los que han perseverado en hacer el bien, porque buscaban contemplar su gloria y superar la muerte, les dará vida eterna

Es la intención que nos mueve y no la podemos esconder. Querer la vida es quererlo a Él, fuente de vida.

gloria, honor y paz a todo el que obre el bien, primero al judío, pero también al griego; porque Dios no tiene favoritismos

Todo el que obre el bien, en cualquier trinchera-representadas en el judío y en el griego- tiene gloria, honor y paz ante un Dios que no procede por favoritismos, sin sombra de corrupción, justo juez.

Esta sencilla expresión pulverizaría radicalmente las causas de las guerras de religión, que más parecen tiendas de un mercado de divinidades, que caminos de realización de la buena nueva.

Todos y todas, enfundados en sus mil colores de diversidad, estarían amparados por una única religión y culto: obrar, hacer el bien.

Sólo que nuestro enemigo, el envidioso del reino preparado para quienes aman al Señor, mete cizaña y confusión sobre la naturaleza del bien a obrar.

De ahí se desprende nuestra única obligación posible: vigilar, escrutar, discernir como vírgenes prudentes, con la lámpara de la fe debidamente alimentada para encenderla cuando sea menester.

Salmo responsorial: 61



REFLEXIÓN

Sólo en Dios descansa mi alma, / porque de él viene mi salvación

Una vez se reconoce esta realidad de fe, que es el fundamento de toda paz y el principio de todo desapego, las fuerzas humanas se liberan para el servicio del ágape fraterno.

Lucas 11,42-46



REFLEXIÓN

que pagáis el diezmo de la hierbabuena, de la ruda y de toda clase de legumbres, mientras pasáis por alto el derecho y el amor de Dios!

La Palabra encarnada va más a fondo aún. Porque desenmascara aparentes conductas según el Espíritu que excluyen un compromiso más profundo.

Como sí se contrastara la exterioridad y formalidad de ciertas obras buenas, que sirven a propósitos carnales y egoístas, pero dejan de lado una opción fundamental por el reino.

Por lo que mucho hemos de interrogarnos sobre la relación con el reino de nuestras obras y conductas aparentemente buenas y espirituales.

Es posible ser buen ciudadano y cumplir las leyes pero sin derecho y amor de Dios, que es ágape

Esto habría que practicar, sin descuidar aquello

No es procurar lo mejor a costa de lo bueno, sino poner en orden los énfasis, de acuerdo al mayor bien, a lo más importante: derecho y amor de Dios.

Tampoco lo contrario es positivo para el reino.

Porque el conocimiento de que hay obras espirituales incorrectamente planteadas, no es para abstenerse de ellas, como gusta cierta corriente anti-tradicional.

abrumáis a la gente con cargas insoportables, mientras vosotros no las tocáis ni con un dedo

Padres, maestros, sacerdotes e incluso pelagatos con un décimo de poder, que gustamos de criticar lo que nosotros no hubiéramos hecho en su lugar.

Lo correcto es no hacernos a un lado como si la Palabra no nos concerniera.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1448251432243695621?s=20

BEATO CARLO

BRILLO COMO LUZ SIN ESTAR POR ENCIMA
 
De las Cuestiones de san Máximo Confesor, abad, a Talasio
(Cuestión 63: PG 90, 667-670)

LA LUZ QUE ALUMBRA A TODO HOMBRE

La lámpara colocada sobre el candelero, de la que habla la Escritura, es nuestro Señor
Jesucristo, luz verdadera del Padre, que, viniendo a este mundo, alumbra a todo hombre;
al tomar nuestra carne, el Señor se ha convertido en lámpara y por esto es llamado "luz",
es decir, Sabiduría y Palabra del Padre y de su misma naturaleza. Como tal es proclamado
en la Iglesia por la fe y por la piedad de los fieles. Glorificado y manifestado ante las
naciones por su vida santa y por la observancia de los mandamientos, alumbra a todos los
que están en la casa (es decir, en este mundo), tal como lo afirma en cierto lugar esta
misma Palabra de Dios: No se enciende una lámpara para meterla debajo el celemín, sino
para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Se llama a sí mismo
claramente lámpara, como quiera que, siendo Dios por naturaleza, quiso hacerse hombre
por una dignación de su amor.
Según mi parecer, también el gran David se refiere a esto cuando, hablando del Señor,
dice: Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero. Con razón, pues, la
Escritura llama lámpara a nuestro Dios y Salvador, ya que él nos libra de las tinieblas de la
ignorancia y del mal.
Él, en efecto, al disipar, a semejanza de una lámpara, la oscuridad de nuestra
ignorancia y las tinieblas de nuestro pecado, ha venido a ser como un camino de salvación
para todos los hombres: con la fuerza que comunica y con el conocimiento que otorga, el
Señor conduce hacia el Padre a quienes con él quieren avanzar por el camino de la justicia
y seguir la senda de los mandatos divinos. En cuanto al candelero, hay que decir que
significa la santa Iglesia, la cual, con su predicación, hace que la palabra luminosa de Dios

brille e ilumine a los hombres del mundo entero, como si fueran los moradores de la casa,
y sean llevados de este modo al conocimiento de Dios con los fulgores de la verdad.
La palabra de Dios no puede, en modo alguno, quedar oculta bajo el celemín; al
contrario, debe ser colocada en lo más alto de la Iglesia, como el mejor de sus adornos. Si
la palabra quedara disimulada bajo la letra de la ley, como bajo un celemín, dejaría de
iluminar con su luz eterna a los hombres. Escondida bajo el celemín, la palabra ya no sería
fuente de contemplación espiritual para los que desean librarse de la seducción de los
sentidos, que, con su engaño, nos inclinan a captar solamente las cosas pasajeras y
materiales; puesta, en cambio, sobre el candelero de la Iglesia, es decir, interpretada por
el culto en espíritu y verdad, la palabra de Dios ilumina a todos los hombres.
La letra, en efecto, si no se interpreta según su sentido espiritual, no tiene más valor
que el sensible y está limitada a lo que significan materialmente sus palabras, sin que el
alma llegue a comprender el sentido de lo que está escrito.
No coloquemos, pues, bajo el celemín, con nuestros pensamientos racionales, la
lámpara encendida (es decir, la palabra que ilumina la inteligencia), a fin de que no se nos
pueda culpar de haber colocado bajo la materialidad de la letra la fuerza incomprensible
de la sabiduría; coloquémosla, más bien, sobre el candelero (es decir, sobre la
interpretación que le da la Iglesia), en lo más elevado de la genuina contemplación; así
iluminará a todos los hombres con los fulgores de la revelación divina.

martes, 12 de octubre de 2021

PALABRA COMENTADA

 

MARTES 28 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Romanos 1,16-25



REFLEXIÓN

es fuerza de salvación de Dios para todo el que cree

Ο γρ παισχύνομαι τ εαγγέλιον, δύναμις γρ θεο στιν ες σωτηρίαν παντ τ πιστεύοντι

Fuerza o energía de Dios hacia la salvación para todo creyente

En el griego la partícula seis es denotativa de un fin: salvación.

Es un término desgastado como muchos, que no alcanza a conmovernos, siendo así que alude aquella realidad suspirada hacia la que se moviliza toda nuestra existencia.

En ese desgaste propio de nuestra efímera existencia individual y aun social, se han visto desfilar muchos sinónimos: felicidad, liberación, realización, plenitud… Pero el clásico y tradicional término salvación sigue siendo el referente.

Así según Pablo el evangelio es fuerza de Dios.

Entenderemos mejor esta fuerza si vemos cómo nos dice la Palabra y la Historia de su intervención salvífica, sobremodo en Jesucristo, su predilecto.

Y entenderemos mejor en compañía de los evangelios la fuerza que desata el creyente del evangelio, si escuchamos las parábolas del Reino de Dios y los milagros que lo significan de parte de Jesús y sus seguidores.

en él se revela la justicia salvadora de Dios para los que creen en virtud de su fe, como dice la Escritura: "El justo vivirá por su fe

δικαιοσύνη γρ θεο ν ατ ποκαλύπτεται κ πίστεως ες πίστιν, καθς γέγραπται· δ δίκαιος κ πίστεως ζήσεται

 La justicia de Dios en él se revela desde la fe hacia la fe.

Como está escrito: el justo desde la fe vivirá.

(Hab 2,4: Escribe que los malvados son orgullosos,g pero los justos vivirán por su fidelidad a Dios)

Gálatas 3.11 Por lo tanto, está claro que nadie es reconocido como justo por cumplir la ley; pues la Escritura dice: “El justo por la fe vivirá.”

Hebreos 10.38 Mi justo por la fe vivirá;

pero si se vuelve atrás,

dejará de agradarme.”)

El evangelio como fuerza de Dios es una revelación de la justicia de Dios en el creyente, que la acciona de fe en fe, sin volverse atrás, y así logrará vivir: hará su existencia justa y alcanzará la vida definitiva.

 

Esta fe vivida y que da vida, permite salirse del círculo mortecino de la ley-cultura-estructura de hombres y mujeres, injusta y soberbia, en su autonomía y autosuficiencia.

 

los hombres que tienen la verdad prisionera de la injusticia

Son aquellos que no revelan la justicia de Dios desde su fe, de fe en fe.

Siempre superando su fe anterior, en un proceso de revelación constante.

Esta fe procesual es como el ideal de la pedagogía actual por la que los aprendices deberán aprender a: siempre aprender siempre, porque aprender permanentemente es un ideal de ser humano: tanto de hombre como de mujer.

son visibles para la mente que penetra en sus obras.

Realmente no tienen disculpa,

su razonar acabó en vaciedades, y su mente insensata se sumergió en tinieblas

Alardeando de sabios, resultaron unos necios que cambiaron lo gloria del Dios inmortal por imágenes del hombre mortal, de pájaros, cuadrúpedos y reptiles.

Por esa razón, abandonándolos a los deseos de su corazón, los ha entregado Dios a la inmoralidad, con la que degradan ellos mismos sus propios cuerpos

Es importante tomar en cuenta el testimonio de Pablo, para quien el desconocimiento de Dios por parte de algunos hombres y mujeres, si bien es negar una evidencia, no es motivo de condenación absoluta como si de masa damnata se tratara.

La evidencia de Pablo y del creyente es provista por la energía de la fe en el evangelio, que tiene que ver con salvación.

 

Pero no se descarta, y aun se puede discutir, si esa evidencia se mantiene fuera de la lógica de la fe.

 

Por eso la concepción de la fe en este texto se plantea como procesual.

Es posible un inicio de fe que no prosigue, y no se llega a la lógica de la salvación que reconoce a Dios.

Negarse a entrar en el proceso de la fe es como negarse al amor, porque tener fe y amar son lo mismo y su compromiso creciente nos acobarda, porque duele creer y duele amar.

Es una exigencia creciente de despojo y liberación, hacia una salvación-libertad, salvación-realización.

Salmo responsorial: 18



REFLEXIÓN

sin que resuene su voz, / a toda la tierra alcanza su pregón

El silente Señor, el Jesús de hace dos mil años es una realidad viable si accedemos a la fe procesual: de fe en fe.

Lucas 11,37-41



REFLEXIÓN

limpiáis por fuera la copa y el plato, mientras por dentro rebosáis de robos y maldades

Dad limosna de lo de dentro, y lo tendréis limpio todo

Jesús no guarda las formas con quien lo ha invitado. No se inhibe, ni se siente deudor, sino de la libertad de conciencia y la verdad, no para sí y su afirmación, sino para la deconstrucción de un estilo de vida hipócrita.

Dar caridad desde lo profundo. Buscar un orden más equitativo y justo para los más pobres.

Una forma actual de cumplir con la limosna, término también degradado.

Desde dentro, implica con más coherencia y sinceridad.

Si puedo cambiar las cosas no me puedo conformar con una limosna, en sentido peyorativo.

Es lo mismo que preocuparse por lo de fuera pero no por lo profundo.

El fariseísmo así retratado es el que recoge Pablo más arriba en su ansia de circuncidar a los gentiles.

Trata una conducta universal, no meramente étnica, ni de una cultura particular.

Trata sobre el imponer, con sentido de liberar: como si por el lavado prescrito con minucia, o la circuncisión de los inscritos en el régimen de ley, fueran a adquirir su libertad. Solo y exclusivamente a través de esa normativa.

Puesto en esta forma tendríamos que revisar nuestro propio faiseísmo cultural e ideológico, mediante el que pretendemos aportar liberad a otros mediante la imposición de nuestra perspectiva.

Compartamos desde lo profundo, desde nuestro núcleo menos contaminado, para liberarnos de verdad.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1447888058972573697?s=20