martes, 31 de agosto de 2021

PALABRA COMENTADA

 

MARTES 22 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

 

1Tesalonicenses 5,1-6.9-11



REFLEXIÓN

 

el día del Señor llegará como un ladrón en la noche


Pablo utiliza la expresión profética pero en su aspecto de inesperada aparición.

 Lo que los profetas anunciaron como juicio del Señor o momento de culminación, Pablo y el evangelio lo previenen, para estar alertas ya que nadie sabe cuándo es.

 Ni Jesús adelantó un momento preciso.

 Es el secreto mejor guardado. Para qué?

 Para vivir alertas, vivir despiertos, vivir en luz.

 Sólo es de temer si no vives preparado para cuando quiera aparecer.

 "Paz y seguridad"

 En ciertas circunstancias esta expresión sólo se puede sentir si el trabajo por el Reino se hace sentir en algunos efectos. Pero no se puede vivir sin una reserva escatológica: no hemos llegado al final aún.

 Toda realización intramundana es provisional; ningún logro político,social o económico es, sin más, “el Reino de Dios

 Somos inclinados a tomar los logros como absolutos, y convertirnos en triunfalistas.

 Es como el vino que en la primera copa anima pero después embriaga, con toda la secuela de distorsiones y posibles maldiciones.

 La sabiduría implica modestia en la celebración de un logro.

 no vivís en tinieblas, para que ese día no os sorprenda como un ladrón, porque todos sois hijos de la luz e hijos del día; no lo sois de la noche ni de las tinieblas

 Lo somos pero en esperanza. Nuestro reloj interno espiritual debe ser mejor que el biológico, que va dejando de funcionar con la edad.

 El Espíritu nos anima a la vigilia permanente.

 animaos mutuamente y ayudaos unos a otros a crecer

 Y la esperanza es comunicable en fraternidad y la alerta también.

 Salmo responsorial: 26



REFLEXIÓN

 El Señor es mi luz y mi salvación, / ¿a quién temeré? / El Señor es la defensa de mi vida, / ¿quién me hará temblar?

 La paz teológica debe ser aprendida por el temor sicológico, terreno de la emoción y la sensibilidad.

 La alerta espiritual debe ser aprendida del Espíritu, que potencia nuestro sistema circadiano biológico en una vigilancia de discernimiento sin descanso.

 Lucas 4,31-37



REFLEXIÓN

 

los sábados enseñaba a la gente

 Jesús trabaja en el día de descanso. Trabaja la solidaridad: enseñar, curar, amar haciendo el bien.

 Se confronta el sentido del descanso en Dios, que no es inactividad ni desconexión.

 Por eso Jesús dirá que su Padre siempre trabaja y que él lo secunda.

 hablaba con autoridad

 Como hacen los líderes de este mundo cuando buscan convencer.

 Sólo que su persuasión se muestra inapelable, contundente e implacable con el adversario del reino.

 en la sinagoga un hombre que tenía un demonio inmundo

 Un poseso requiere una autoridad nueva como la de Jesús, firme y misericordiosa.

 Jesús le intimó: "¡Cierra la boca y sal!"

 Su autoridad se evidencia en el dominio sobre el adversario que atemoriza.

 "¿Qué tiene su palabra? Da órdenes con autoridad y poder a los espíritus inmundos, y salen

 Jesús de Nazareth fue un hombre con dones, carismático. Se pudo jactar y hacer poderoso, pero más bien vivía dando gracias y haciendo el bien. Un estilo y calidad de vida propios del Espíritu, que vivenciaba en la dimensión del Espíritu.

 Noticias de él iban llegando a todos los lugares de la comarca

 Eso somos: colaboradores de su buena nueva y debemos llegar dondequiera, antes que nada con nuestro estilo de vida, en constante discernimiento del reino, en la historia humana.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1432682442528333830?s=20

BEATO CARLO

 BEATO CARLO


No es posible, pues, la santidad en el hombre, Señor, si retiras el apoyo de tu mano. No aprovecha sabiduría alguna, si tú dejas de gobernarlo. No hay fortaleza inquebrantable, capaz de sostenernos, si tú cesas de conservarla.

Del libro de la Imitación de Cristo
(Libro 3, cap. 14)

LA FIDELIDAD DEL SEÑOR DURA POR SIEMPRE


Señor, tus juicios resuenan sobre mí con voz de trueno; el temor y el temblor agitan
con violencia todos mis huesos, y mi alma está sobrecogida de espanto.
Me quedo atónito al considerar que ni el cielo es puro a tus ojos. Y si en los mismos
ángeles descubriste faltas, y no fueron dignos de tu perdón, ¿qué será de mí?
Cayeron las estrellas del cielo, y yo, que soy polvo, ¿qué puedo presumir? Se
precipitaron en la vorágine de los vicios aun aquellos cuyas obras parecían dignas de
elogio; y a los que comían el pan de los ángeles los vi deleitarse con las bellotas de
animales inmundos.
No es posible, pues, la santidad en el hombre, Señor, si retiras el apoyo de tu mano. No
aprovecha sabiduría alguna, si tú dejas de gobernarlo. No hay fortaleza inquebrantable,
capaz de sostenernos, si tú cesas de conservarla.
Porque, abandonados a nuestras propias fuerzas, nos hundimos y perecemos; mas,
visitados por ti, salimos a flote y vivimos.
Y es que somos inestables, pero gracias a ti cobramos firmeza; somos tibios, pero tú
nos inflamas de nuevo.
Toda vanagloria ha sido absorbida en la profundidad de tus juicios sobre mí.
¿Qué es toda carne en tu presencia? ¿Acaso podrá gloriarse el barro contra el que lo
formó? ¿Cómo podrá la vana lisonja hacer que se engría el corazón de aquel que está
verdaderamente sometido a Dios?
No basta el mundo entero para hacer ensoberbecer a quien la verdad hizo que se
humillara, ni la alabanza de todos los hombres juntos hará vacilar a quien puso toda su
confianza en Dios.
Porque los mismos que alaban son nada, y pasarán con el sonido de sus palabras. En
cambio, la fidelidad del Señor dura por siempre.