lunes, 25 de abril de 2022

PALABRA COMENTADA

 

San Marcos Evangelista

1Pedro 5,5b-14



REFLEXIÓN

Tened sentimientos de humildad unos con otros, porque Dios resiste a los soberbios, pero da su gracia a los humildes. Inclinaos, pues, bajo la mano poderosa de Dios, para que, a su tiempo, os ensalce

En nuestro tiempo difícilmente se reconoce esta recomendación con simplicidad.

Para acreditarla hay que esforzarse y emplear muchos matices que dejen en pie el casi-sagrado, aunque laico, valor de la libertad y autodeterminación de la persona y de los pueblos.

Sin embargo, el reconocimiento y afirmación que el ejercicio irrestricto de la propia libertad y autodeterminación es manifestación de la voluntad de Dios es la visión de fe que ayudaría a lanzar puentes con los valores del mundo.

En esa forma Dios se ha encarnado e identificado con un hipervalor de la humanidad y éste es un criterio de discernimiento de la voluntad de Dios: porque donde se manifiesta y respeta la autodeterminación libre de la persona allí está Dios.

Según esta perspectiva no hay oposición posible de Dios y su designio frente a la realización plena del ser humano y sus sociedades.

Pero en su desvarío Dios ha venido a ser subordinado del engrandecimiento y soberbia humanos. Se consuma así una idolatría refinada.

Sed sobrios, estad alerta, que vuestro enemigo, el diablo, como león rugiente, ronda buscando a quién devorar

Es sano alejarse del intoxicante efecto del pecado, que es seductor y engaña, porque envuelve en las propias ilusiones.

Por ello un trabajo humano de relevancia es el autoconocimiento, que permite una mejor cautela y vigilancia de las trampas del engaño por la conciencia, adquirida de las propias vulnerabilidades.

Lo que pasa a los individuos se replica en los colectivos humanos y los pueblos, por más ilustrados que sean.

También se pueden engañar a sí mismos los votos de la mayoría.

Resistidle firmes en la fe, sabiendo que vuestros hermanos en el mundo entero pasan por los mismos sufrimientos

La fe se alimenta de la fraternidad y de la paternidad del Señor Dios, Padre nuestro.

Él nos hace sombra con buena voluntad y amor, y persiste aunque nuestra paranoia laica nos impulsa a huir de su abrazo paterno.

Quién sale ganando con el conflicto incesante que plantea el mundo con el Señor? El anti-reino, la decadencia humana, la bandera del tentador.

Salmo responsorial: 88



REFLEXIÓN

"Tu misericordia es un edificio eterno, / más que el cielo has afianzado tu fidelidad."

Su Palabra da cuenta de la fidelidad con la que amorosamente nos acompaña. Creer en Él es vivir con la continua convicción de no estar solos.

Dichoso el pueblo que sabe aclamarte: / caminará, oh Señor, a la luz de tu rostro; / tu nombre es su gozo cada día, / tu justicia es su orgullo

La justicia del Señor es acoger su designio más allá de nuestro más caro interés.

Marcos 16,15-20



REFLEXIÓN

Ellos se fueron a pregonar el Evangelio

Aunque los estudiosos miran estos versículos como de segunda clase, porque se añadieron después, nos comunican el mensaje sobre la evangelización por parte de Jesús de Nazareth.

Este mensaje no está en conflicto con la totalidad del primer evangelio.

En él el evangelista nos enseña que el evangelio es una obra colectiva y personal.

Jesús es su inspiración y fuente, pero los creyentes son su transmisión, porque lo enriquece y contextualiza.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1518567092445974528?s=20&t=HcIVRTXoAClq17BkOT9uJQ

DOCTORES DE LA IGLESIA

 
Del Tratado de san Ireneo, obispo, Contra las herejías
                           (Libro 1, 10, 1-3: PG 7, 550-554)


LA PREDICACIÓN DE LA VERDAD

La Iglesia, esparcida por el orbe hasta los confines de la tierra, ha recibido de los apóstoles y de los discípulos de los mismos aquella fe cuyo objeto es: un solo Dios, Padre todopoderoso, que hizo el cielo y la tierra, el mar y cuanto hay en él; y un solo Hijo de Dios, Jesucristo, que por nuestra salvación se hizo hombre; y el Espíritu Santo, que, por boca de los profetas, anunció de antemano los designios de Dios; y la venida al mundo, la encarnación en el seno de María, la pasión y resurrección de entre los muertos, la ascensión corporal del amado Jesucristo, Señor nuestro, así como su futura venido desde el cielo, en la gloria del Padre, para recapitular todas las cosas y resucitar corporalmente a todo el género humano, para que, según ha dispuesto el Padre invisible, ante Cristo Jesús, nuestro Señor y Dios, salvador y rey, toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo y toda lengua lo proclame, y él juzgue a todos con justicia.

La Iglesia, habiendo recibido, como hemos dicho, esta predicación y esta fe, aunque esparcida por todo el mundo, la guarda con diligencia, como si todos sus hijos habitaran en una misma casa; y toda ella cree estas mismas verdades, como quien tiene una sola alma y un solo corazón, y, en consecuencia, las predica, las enseña y las transmite, como quien tiene una sola boca. Porque, si bien en el mundo hay diversidad de lenguajes, el contenido de la tradición es uno e idéntico para todos.

Y lo mismo creen y transmiten las Iglesias fundadas en Germania, así como las de los iberos, las de los celtas, las del Oriente, las de Egipto, las de Libia y las que se hallan en el centro del mundo; pues, del mismo modo que el sol, creatura de Dios, es uno e idéntico en todo el mundo, así también la predicación de la verdad brilla en todas partes e ilumina a todos los hombres que quieren llegar al conocimiento de la verdad.

Y ni el que posee dotes oratorias, entre los que presiden las Iglesias, enseñará algo diverso a lo que hemos dicho (ya que nadie está por encima de su maestro), ni el que está privado de estas dotes aminorará por ello el contenido de la tradición. En efecto, siendo la fe única e idéntica para todos, ni la amplía el que es capaz de hablar mucho sobre ella, ni la aminora el que no es capaz de tanto.