Viernes 9 de tiempo
ordinario
Año Impar
Tobías 11,5-17
REFLEXIÓN
"Estoy seguro de que tu padre recuperará la vista.
Úntale los ojos con la hiel del pez; el remedio hará que las nubes de los ojos
se contraigan y se le desprendan. Tu padre recobrará la vista y verá la
luz."
La
Palabra nos ubica en un momento y coyuntura en la que se muestra la sabiduría
popular como sabiduría providencial del Dios Altísimo.
Nuestros
pueblos, carentes de los servicios de salud del primer mundo, cada vez más
especializados, tecnificados y costosos, buscan sus propios medios y remedios,
para con fe y superstición, hacer frente a sus enfermedades y dolencias.
Que
resulte o no, queda a discusión para convencer a nadie, porque las facultades
de medicina, los cuerpos médicos, las transnacionales farmacéuticas y demás, se
ubican del lado de la investigación que invierte cuantiosos recursos para
lograr químicos que resuelvan las enfermedades. Mientras que los brujos,
curanderos y médicos alternativos miran con aprecio las yerbas, emplastos y pócimas
como la oportunidad de recobrar la salud al alcance de las mayorías.
Asunto
de mercado? Asunto de la verdad salvífica integral? No se debe despreciar lo
que viene de un origen humilde, como las plantas medicinales, porque pueden
aportar la salud esperada. De lo pequeño viene la gloria de Dios.
"Bendito sea Dios, bendito su gran nombre, benditos
todos sus santos ángeles. Que su nombre glorioso nos proteja, porque si antes
me castigó, ahora veo a mi hijo Tobías."
Porque
al Señor de los Cielos, y a su enviado Jesús de Nazareth se les hacía el cielo
en la tierra con la salud recobrada, la alegría y el agradecimiento de los
humildes salvados de su miseria.
El
regocijo del Señor es ver que su gloria resplandece desde lo más pequeño,
porque así se evidencia la desproporción del don gratuito de la salud. Salud y
agradecimiento no se pueden comprar.
Salmo responsorial: 145
REFLEXIÓN
El Señor liberta a los cautivos
La
cautividad de la falta de salud de algún tipo, física o mental, es una dura
cruz en la existencia de muchos, por los dolores y limitaciones que acarrea, y
la dependencia en la que postra a las víctimas enfermas.
El Señor abre los ojos al ciego, / el Señor endereza a los
que ya se doblan, / el Señor ama a los justos. / El Señor guarda a los
peregrinos
Todos
son ejemplos y prototipos de personas con algún grado de vulnerabilidad y
dependencia, de quienes se presume una esperanza acuciante y viva por lograr la
plenitud del bien, que aún no llega.
Marcos 12,35-37
REFLEXIÓN
Si el mismo David lo llama Señor, ¿cómo puede ser hijo suyo?
Jesús
despejaba los sentidos de ciertos textos de la Escritura. Así el hijo de David
no podía ser entendido en sentido literal porque David lo consideraba su Señor.
Había que entenderlo en otro sentido, como el del mismo Jesús, que podía ser
llamado Hijo de David no en sentido
genealógico y de sangre, sino en una función que se reformulaba para su tiempo.
En esto
Jesús es mostrado por el evangelista como una clave de la historia de salvación
y cómo redunda en su misión y servicio la elección en él por parte del Padre
como hijo suyo.
Quién
fue David en Israel para su historia de salvación? Que es lo que Jesús rescata
para su tiempo de ese aporte? Y hoy qué nos dice a gentiles y judíos Jesús como
clave del Mesianismo davídico.
Una
captación hermenéutica irreverente la de Jesús de Nazareth, releyendo las
Escrituras. Que muestra la libertad del mismo al hacerlo, sin obligarse a la
lectura trillada tradicional.
Son
muchos los que han caído ante el juicio condenatorio de algún censor, autoridad
o no, por esgrimir su propia iniciativa en la interpretación y aplicación de la
Palabra.
Toda la
Escritura muestra el constante aprendizaje del Designio del Señor, en nuevas
coyunturas y necesidades. Y Jesús es el máximo exponente de tal libertad.
Un hijo
del rey David no debiera ser el título de un mesías, es lo que dice Jesús,
porque el mismo rey David al mesías le dice Señor. El mesías no puede
etiquetarse con un título menor.
Con esto
Jesús afecta la creencia popular fomentada desde los círculos de poder, sobre
el linaje regio de un redivivo David, el rey super estrella de los tiempos
antiguos, elevado a la categoría de mito.
Y de
paso afecta la posible aplicación que a él se le pueda hacer como un mesías
“hijo de David”.
Jesús es
mucho más…
https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1667135590955986944?s=20
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Tobías 11,5-17
La subjetividad cada vez más aislada de los ancianos, confundida dolorosamente por la
pérdida de sus facultades y su autonomía, agradece comoe en Tobit las
intervenciones piadosas de los que alivian sus padecimientos, y bendice esas
vidas, para que llegado el momento de la rueda del tiempo, padezcan
semejantemente y encuentren a su vez misericordia. Ellos son un ayuda memoria para
que la evolución sabia en su crueldad, cuente con el complemento del amor que
hace justicia.
Salmo responsorial: 145
En nuestra aspiración de vulnerables construimos una
esperanza que debe resistir hasta el límite final. Por eso recordamos cómo en
otros casos, en algún momento Él ha actuado a favor del ciego, del huérfano, de
la viuda, del que peregrina. Pero los seguimos viendo, lo que nos recuerda no
dejar de esperar.
Marcos 12,35-37
Jesús sin
destruir re-edifica, remodela, en base a su propia presentación. La captación
del desafío que representó su persona, es lo que se esfuerzan en transmitir los
evangelios canónicos. Porque los no canónicos se exceden en sus proyecciones,
que pretenden reconocer su grandeza pero se desbordan y desfiguran. Lo que nos
traen los canónicos es un enfoque que sí hace de Jesús un centro personal, pero
que se desvive en equilibrar cualquier sombra de prepotencia y jactancia, con
la docilidad a la voluntad de un Padre.