jueves, 12 de octubre de 2023

BEATO CARLO

FRASES DEL BEATO CARLO

1. "La Virgen María es la única mujer en mi vida".

2. "Cuanto más recibamos la Eucaristía, más nos haremos semejantes a Jesús, de modo que en la tierra tendremos un anticipo del Cielo".

3. "Al estar ante Jesús Eucaristía nos hacemos santos".

4. "Hay gente que sufre mucho más que yo". "Ofrezco todo el sufrimiento que tendré que padecer por el Señor, por el Papa y por la Iglesia".

5. "Pide ayuda continuamente a tu ángel de la guarda. Tu ángel de la guarda tiene que volverse tu mejor amigo".

6. "No temas, porque con la Encarnación de Jesús, la muerte se vuelve vida y no hay necesidad de escapar: en la vida eterna nos espera algo extraordinario".

7. "Jerusalén está a la vuelta de la esquina".

8. "Todas las personas nacen como originales, pero muchas mueren como fotocopias".

9. "Estar siempre unido a Jesús, ese es mi proyecto de vida".

10. "La felicidad es mirar hacia Dios, la tristeza es mirar hacia uno mismo".

11. "No yo, sino Dios". "La santificación no es un proceso de suma, sino de resta. Menos yo para dejar espacio a Dios".

12. "¡Criticar a la Iglesia significa criticarnos a nosotros mismos! La Iglesia es dispensadora de tesoros para nuestra salvación".

13. "Lo único que debemos pedirle a Dios en oración es el deseo de ser santo".

14. "Nuestra alma es como un globo aerostático. Si por casualidad hay un pecado mortal, el alma cae al suelo. La Confesión es como el fuego debajo del globo que permite al alma volver a elevarse. Es importante ir a confesarse con frecuencia".

15. "Estoy feliz de morir, porque he vivido mi vida sin desperdiciar un minuto en las cosas que no agradan a Dios".

16. "Nuestra meta debe ser lo infinito, no lo finito. Lo infinito es nuestra patria. El cielo nos ha estado esperando desde siempre".

17. "La Eucaristía es mi autopista hacia el Cielo".

18. "El Rosario es la escalera más corta para subir al Cielo". "Después de la Santa Eucaristía, el Santo Rosario es el arma más poderosa para combatir al demonio".

19. "¿Por qué a los hombres les preocupa tanto la belleza de su cuerpo y no les importa la belleza de su alma?". "Una vida es verdaderamente hermosa sólo si llegamos a amar a Dios por encima de todo y al prójimo como a nosotros mismos".

20. "La conversión no es más que mover la mirada de abajo hacia arriba, un simple movimiento de los ojos es suficiente".

 
San Ignacio de Antioquía
Carta a los Filadelfios 1,1-2,1; 3,2-5

Ignacio, por sobrenombre Teóforo, es decir, Portador de Dios, a la

Iglesia de Dios Padre y del Señor Jesucristo que habita en Filadelfia del

Asia, que ha alcanzado la misericordia y está firmemente asentada en

aquella concordia que proviene de Dios, y tiene su gozo en la pasión

de nuestro Señor y la plena certidumbre de la misericordia que Dios ha

manifestado en la resurrección de Jesucristo: mi saludo en la sangre del

Señor Jesús.

 Tú, Iglesia de Filadelfia, eres mi gozo permanente y durable, sobre

todo cuando te contemplo unida a tu obispo con los presbíteros y

diáconos, designados según la palabra de Cristo, y confirmados establemente por su Santo

 Espíritu, conforme a la propia voluntad del Señor.

 Sé muy bien que vuestro obispo no ha recibido el ministerio de servir

a la comunidad ni por propia arrogancia ni de parte de los hombres ni

por vana ambición, sino por el amor de Dios Padre y del Señor Jesucristo. Su modestia me ha

 maravillado en gran manera: este hombre es mas eficaz con su silencio que otros muchos con

 vanos discursos. Y su vida está tan en consonancia con los preceptos divinos como lo puedan

estar las cuerdas con la lira; por eso, me atrevo a decir que su alma es santa y su espíritu feliz;

 conozco bien sus virtudes y su gran santidad: sus modales, su paz y su mansedumbre son como

 un reflejo de la misma bondad del Dios vivo.

 Vosotros, que sois hijos de la luz y de la verdad, huid de toda división

y de toda doctrina perversa; adonde va el pastor allí deben seguirlo las ovejas.

 Todos los que son de Dios y de Jesucristo viven unidos al obispo;

y los que, arrepentidos, vuelven a la unidad de la Iglesia también serán

porción de Dios y vivirán según Jesucristo. No os engañéis, hermanos

míos. Si alguno de vosotros sigue a alguien que fomenta los cismas no

poseerá el reino de Dios; el que camina con un sentir distinto al de la

Iglesia no tiene parte en la pasión del Señor.

 Procurad, pues, participar de la única eucaristía porque una sola es

la carne de nuestro Señor Jesucristo y uno solo el cáliz que nos une a

su sangre; uno solo el altar y uno solo el obispo con el presbiterio y los

diáconos, consiervos míos; mirad, pues, de hacerlo todo según Dios.

 Hermanos míos, desbordo de amor por vosotros y, lleno de alegría,

intento fortaleceros; pero no soy yo quien fortifica, sino Jesucristo, por

cuya gracia estoy encadenado, pero cada vez temo más porque todavía

no soy perfecto; sin embargo, confío que vuestra oración me ayudará

a perfeccionarme, y así podré obtener aquella herencia que Dios me

tiene preparada en su misericordia; a mí, que me he refugiado en el

Evangelio, como si en él estuviera corporalmente presente el mismo

Cristo, y me he fundamentado en los apóstoles, como si se tratara del

presbiterio de la Iglesia

miércoles, 11 de octubre de 2023

PALABRA COMENTADA

 

MIÉRCOLES 27 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Jonás 4,1-11



REFLEXIÓN

Jonás sintió un disgusto enorme y estaba irritado. Oró al Señor en estos términos

La autenticidad de Jonás, como la de Job, se muestra en la oración.

La autenticidad de Dios, su libertad y su afectación, en su misericordia.

sé que eres compasivo y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad, que te arrepientes de las amenazas

Es un Dios Padre. Descubrirlo puede decepcionar y como Jonás, irritar.

No se conduce como nosotros nos conduciríamos. Se sale del guión.

No es que el guión no se necesite, pero tampoco es camisa de fuerza.

hizo crecer el Señor un ricino, alzándose por encima de Jonás para darle sombra y resguardarle del ardor del sol. Jonás se alegró mucho de aquel ricino.

No hay manera de pelearse con el Señor, porque busca la manera de meternos en su amor, con detalles que enamoran.

"¿Crees que tienes derecho a irritarte por el ricino?"

En la libertad que se nos da, en los detalles de la vida, se nos pide libertad de los apegos. Él da y quita, y nosotros a agradecer, para adquirir libertad.

"Tú te lamentas por el ricino, que no cultivaste con tu trabajo, y que brota una noche y perece la otra. Y yo, ¿no voy ha sentir la suerte de Nínive, la gran ciudad, que habitan más de ciento veinte mil hombres, que no distinguen la derecha de la izquierda, y gran cantidad de ganado?"

Somos todos sus hijos y ves por todos, e incluso en el malestar y el infortunio, se da con amor y siente nuestra suerte.

Mal podemos condenar lo que no conocemos como un tú.

Cuando un formador de personas, de cualquier jerarquía y profesión, complace a los formandos, todo es alegría y complacencia. Es el mejor de los líderes en ese momento.

Pero cuando contraría el sentir común, para preservar otros bienes más universales y urgentes, el disgusto erosiona la credibilidad del formador.

Salmo responsorial: 85



REFLEXIÓN

Porque tú, Señor, eres bueno y clemente, / rico en misericordia con los que te invocan

La única riqueza bendita por todos los ángulos es la del Señor, rico en misericordia.

Lucas 11,1-4



REFLEXIÓN

"Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos,"

Jesús es visto por sus seguidores como alguien que inspira un estilo de vida significativo.

Como él ora, y la oración se ve repercutir en su modo de ser, los discípulos se ven atraídos a ese actividad que tanto bien hace.

Los discípulos ven a Jesús orar y tienen deseos de ser enseñados. Qué los mueve? Qué sabrían de la oración que Juan enseñó a sus seguidores? Cuál es el aprecio y modalidad de la oración de estos grupos religiosos que caminaban por Judea y Galilea?

Al pedírselo a Jesús sus discípulos debieron sentir que era un actividad importante, valiosa para profundizar el seguimiento en el que se encontraban con Jesús.

Pero Jesús no enseñó largas oraciones sino un conversatorio sencillo con el Señor a quien llamaba papito.

decid:

(legete: hablen, digan, procedan a decir, a conversar?)

Porque igual se trata de una fórmula que se puede repetir intacta, porque es venerable, y ha sido guardada como un tesoro: el Padrenuestro.

O puede ser una provocación, una incitación, una propuesta, un tema de conversación para desarrollar un coloquio al estilo ignaciano de contemplación y oración.

"Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan del mañana, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación.""

Un Dios Padre, un misterio que solo un hijo como Jesús nos colabora en desvelar.

Cuyo nombre es sinónimo de prestigio y verdad. Una identidad misteriosa que no se agota y nos produce una admiración sin fin.

Que ejerce un dominio que nos parece retrasado, y nos impacienta que no termine de reinar.

En quien dejamos o intentamos dejar nuestra preocupación por el sustento de vida, con frecuencia amenazado por los órdenes económicos que tergiversamos.

Que nos potencia para la fraternidad y la sororidad a través del perdón, que no se puede otorgar sino somos autocríticos, y captamos nuestra responsabilidad y culpa en relación a otros.

Y a quien pedimos que nos mantenga en la brecha, hasta que todo termine, y nos preserve para la alegría final.

https://x.com/motivaciondehoy/status/1712062949097902092?s=20

COMPARTIR LA PALABRA

Jonás 4,1-11

El humor de Dios contrasta con el mal humor de Jonás, quien no se resigna a ser instrumento rebasable. Porque Dios puede superar en la realización lo que nos figuramos en su mensaje.

Salmo responsorial: 85

La grandeza de Dios, su hesed w emeth, amor y lealtad, misericordia está a disposición en nuestra plegaria, y nos sorprende en su respuesta, que nos trasciende. Hemos de aprender a escuchar su respuesta.

Lucas 11,1-4

Jesús entregó un coloquio personal para hacer de orientación a la oración. La básica y primordial, en la que se prefigura la teología cristiana a desarrollar.