jueves, 1 de septiembre de 2022

DOCTORES DE LA iGLESIA

 


Jueves, XXII semana

San León Magno Sermón sobre las bienaventuranzas 95,1-2

Amadísimos hermanos: Al predicar nuestro Señor Jesucristo el Evangelio del reino, y al curar por toda Galilea enfermedades de toda especie, la fama de sus milagros se había extendido por toda Siria, y, de toda la Judea, inmensas multitudes acudían al médico celestial. Como a la flaqueza humana le cuesta creer lo que no ve y esperar lo que ignora, hacía falta que la divina sabiduría les concediera gracias corporales y realizara visibles milagros, para animarles y fortalecerles, a fin de que, al palpar su poder bienhechor, pudieran reconocer que su doctrina era salvadora. Queriendo, pues, el Señor convertir las curaciones externas en remedios internos y llegar, después de sanar los cuerpos, a la curación de las almas, apartándose de las turbas que lo rodeaban, y llevándose consigo a los apóstoles, buscó la soledad de un monte próximo. Quería enseñarles lo más sublime de su doctrina, y la mística cátedra y demás circunstancias que de propósito escogió daban a entender que era el mismo que en otro tiempo se dignó hablar a Moisés. Mostrando, entonces, más bien su terrible justicia; ahora, en cambio, su bondadosa clemencia. Y así se cumplía lo prometido, según las palabras de Jeremías: Mirad que llegan días –oráculo del Señor– en que haré con la casa de Israel y la casa de Judá una alianza nueva. Después de aquellos días –oráculo del Señor– meteré mi ley en su pecho, la escribiré en sus corazones. Así, pues, el mismo que habló a Moisés fue el que habló a los apóstoles, y era también la ágil mano del Verbo la que grababa en lo íntimo de los corazones de sus discípulos los decretos del nuevo Testamento; sin que hubiera como en otro tiempo densos nubarrones que lo ocultaran, ni terribles truenos y relámpagos que aterrorizaran al pueblo, impidiéndole acercarse a la montaña, sino una sencilla charla que llegaba tranquilamente a los oídos de los circunstantes.

REFLEXIÓN

Hay oposiciones, manifestadas en los escritos de comentadores patrísticos de los evangelios, que otros enfoques de escritores judaizantes o de otras ideologías no aceptan sino que incluso tachan de falta de entendimiento de la cultura y la lengua hebrea o del ateísmo filosófico. Así chocan con la oposición entre la imagen de la divinidad hebrea, como más cruel, y chocan con la resignación inoculada en los que padecen la pobreza, para esperar un reino que no es de este mundo, pero donde tendrán su desquite. Según estos enfoque adversarios las oposiciones que manifiesta el evangelio han contribuído a propagar la mala imagen de los judíos a lo largo de la historia y  reducir al silencio las protestas de los desheredados de la tierra por la enajenación de bienes más allá de la materia y la historia. Conviene leer la historia de los críticos de estas oposiciones y sus argumentos, para reformular y adecuar las propias observaciones que vamos estableciendo de los evangelios, a la luz de los conocimientos actuales de historia, cultura, sociología, pensamiento y otros para permitir más un díálogo inter-religioso y cultural, que oposiciones.

EJERCICIOS ESPIRITUALES


 

ADICIONES

[73] ADDICIONES PARA MEJOR HACER LOS EXERCICIOS Y PARA MEJOR HALLAR LO QUE DESEA.

1ª addición. La primera addición es, después de acostado, ya que me quiera dormir, por espacio de un Ave María pensar a la hora que me tengo de levantar, y a qué, resumiendo el exercicio que tengo de hacer.

REFLEXIÓN

[73]En la literatura de autoayuda y salud mental, se sugiere un entorno relajado y placentero cuando nos disponemos a dormir. Habida cuenta de la influencia del día vivido, con sus ocurrencias de diferente tipo, viene bien neutralizar lo que puede interferir en nuestro proceso de dormirnos. Tener en la mente aquello que voy a tener en la oración cuando me levante ayuda a ese ambiente de concentración y enfoque propio la actividad espiritual.

 [74] 2ª addición. La 2ª: quando me despertare, no dando lugar a unos pensamientos ni a otros, advertir luego a lo que voy a contemplar en el primer exercicio de la media noche, trayéndome en confusión de mis tantos pecados, poniendo exemplos, así como si un caballero se hallase delante de su rey y de toda su corte, avergonzado y confundido en haberle mucho ofendido, de quien primero rescibió muchos dones y muchas mercedes; asimismo, en el 2º exercicio, haciéndome peccador grande y encadenado, es a saber, que voy atado como en cadenas a parescer delante del sumo Juez eterno, trayendo en exemplo cómo los encarcerados y encadenados ya dignos de muerte parescen delante su juez temporal. y con estos pensamientos vestirme, o con otros, según subiecta materia.

REFLEXIÓN

[74] Algo semejante es aconsejable al levantarme, para fortalecer el objetivo de la oración: aquello que busco.

[75] 3ª addición. La 3ª: un paso o dos antes del lugar donde tengo de contemplar o meditar, me pondré en pie, por espacio de un Pater noster, alzado el entendimiento arriba, considerando cómo Dios nuestro Señor me mira, etc., y hacer una reverencia o humiliación.

REFLEXIÓN

[75] El tiempo que dura la recitación de un padrenuestro ayuda a actualizar la presencia de Dios ante quien y en quien pretendo coloquiar, pensar, reflexionar, afectarme, callar…

[76] 4ª addición. La 4ª: entrar en la contemplación, quándo de rodillas, quándo prostrado en tierra, quándo supino rostro arriba, quándo asentado, quándo en pie, andando siempre a buscar lo que quiero. En dos cosas advertiremos: la primera es, que si hallo lo que quiero de rodillas, no pasaré adelante, y si prostrado, asimismo, etc.; la segunda, en el punto en el qual hallare lo que quiero, ahí me reposaré, sin tener ansia de pasar adelante, hasta que me satisfaga.

REFLEXIÓN

[76] Como hemos ido aprendiendo el lenguaje del cuerpo expresa e induce. Siempre buscando la posición, no más cómoda, sino más cónsona con el proceso de la oración que estoy viviendo. Por otro lado, detenerse allí donde siento dar con un sentido, un afecto, una comprensión, es el equivalente de escuchar sin prisas, lo que sea necesario. Así vamos entrando en la sutileza del Espíritu que se comunica.

[77] 5ª addición. La 5ª: después de acabado el exercicio, por espacio de un quarto de hora, quier asentado, quier paseándome, miraré cómo me a ido en la contemplación o meditación; y si mal, miraré la causa donde procede y, así mirada, arrepentirme, para me enmendar adelante; y si bien, dando gracias a Dios nuestro Señor; y haré otra vez de la misma manera.

REFLEXIÓN

[77] Se trata de un tiempo breve, que una vez se haya practicado sabremos aplicar, cuando examinamos que sucedió en el transcurso de la oración. Apuntarlo para algun@s ayuda, para otr@s según prefieran, lo retendrán en la memoria. Los resultados de estos exámenes nos irán ofreciendo un derrotero, un rumbo, un hilo, que posteriormente en la vida nos ayudará en la construcción de la historia de salvación propia y ajena.

[78] 6ª addición. La 6ª: no querer pensar en cosas de placer ni alegría, como de gloria, resurrección, etc.; porque para sentir pena, dolor y lágrimas por nuestros peccados impide cualquier consideración de gozo y alegría; mas tener delante de mí quererme doler y sentir pena, trayendo más en memoria la muerte, el juicio.

REFLEXIÓN

[78] La autenticidad de los afectos que se suscitan en mi durante este proceso está relacionada con la historia que estoy meditando. Así, esta materia es nuestro contexto afectivo pertinente.

[79] 7ª addición. La 7ª: privarme de toda claridad para el mismo effecto, cerrando ventanas y puertas el tiempo que estuviere en la cámera, si no fuere para rezar, leer y comer.

REFLEXIÓN

[79] En clima fresco, buscaremos algo más abrigado, y lo contrario en clima cálido. Todo ordenado para que sirva a que nos dispongamos a una oración viable.

[80] 8ª addición. La 8ª: no reír, ni decir cosa motiva a risa.

REFLEXIÓN

[80] En retiros cerrados es lo recomendable. Ejercicios en la Vida Corriente permite la flexibilidad de la vida normal, siempre cuidando de no dispersarse y perder el foco del objetivo a lograr.