jueves, 13 de octubre de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Jueves 28 de tiempo ordinario

Efesio 1, 1-10



REFLEXIÓN

para que fuésemos santos e irreprochables ante él por el amor

Siempre encontrarémos un “para qué” en las comunicaciones de la Palabra, que persigue movilizarnos tras el sumo bien para todos.

dándonos a conocer el misterio de su voluntad

Tal misterio, más que misterioso y oculto, es la voluntad y el anhelo divino mas preciado para Él, que se nos comunica en la medida de nuestras capacidades.

recapitular en Cristo todas las cosas del cielo y de la tierra

Quién duda que necesitamos una síntesis, como logro de la humanidad fraterna? Esta es la promesa, la dinámica y la anticipación en Jesús de Nazareth, el Cristo.

Salmo responsorial: 97



REFLEXIÓN

se acordó de su misericordia y su fidelidad

Nuestra divinidad no es falto de memoria. Siempre se acuerda de lo prometido

Los confines de la tierra han contemplado / la victoria de nuestro Dios

Una síntesis humana en la fraternidad universal que está abierta a todos sin discriminación, sin distinción, sin acepción de personas.

Lucas 11, 47-54



REFLEXIÓN

edificáis mausoleos a los profetas

vosotros les edificáis sepulcros

Dat tertium: levantar monumentos puede tener la intención de desagravio del crimen del pasado.

Pero no parece ser el sentido de la recriminación, sino el de complicidad.

Porque si nos demarcamos de algo, poner ciertas medidas y quedarnos en ello, no es propiamente una conversión sino complicidad.

Así, no cualquier conversión lo es en sinceridad.

No cualquier limosna es amor a los pobres y lucha por la justicia.

No cualquier activismo lo es tampoco.

Hay que escrutar.

La respuesta esperada era la conversión, no la construcción de sepulcros de los profetas asesinados.

a esta generación se le pedirá cuenta de la sangre de los profetas derramada desde la creación del mundo; desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías, que pereció entre el altar y el santuario

Pedir cuentas puede entenderse para la venganza.

O para la conversión sincera y emprender otro camino más justo.

maestros de la Ley, que os habéis quedado con la llave del saber

no habéis entrado y habéis cerrado el paso a los que intentaban entrar

los escribas y fariseos empezaron a acosarlo y a tirarle de la lengua con muchas preguntas capciosas, para cogerlo con sus propias palabras

Sigue sin provocar conversión la intervención de Jesús. Mala estrategia? O con esta cerrazón no cabe ninguna otra que la denuncia del mal uso del poder?

¡Ay de vosotros, maestros de la Ley, que os habéis quedado con la llave del saber; vosotros, que no habéis entrado y habéis cerrado el paso a los que intentaban entrar!"

Porque educar es un compromiso a la transferencia de un saber, que se puede obstaculizar paradójicamente cerrando lo que se tenía que abrir: la sabiduría.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1580518338522152960?s=20&t=-BZBTcXRSnfcdYQtQdKbdA

DOCTORES DE LA IGLESIA

 


Jueves, XXIX semana

San Agustín Carta a Proba 130,14,25-26

Quizá me preguntes aún por qué razón dijo el Apóstol que no sabemos pedir lo que nos conviene, siendo así que podemos pensar que tanto el mismo Pablo como aquellos a quienes él se dirigía conocían la oración dominical. Porque el Apóstol experimentó seguramente su incapacidad de orar como conviene, por eso quiso manifestarnos su ignorancia; en efecto, cuando, en medio de la sublimidad de sus revelaciones, le fue dado el aguijón de su carne, el ángel de Satanás que lo apaleaba, desconociendo la manera conveniente de orar, Pablo pidió tres veces al Señor que lo librara de esta aflicción. Y oyó la respuesta de Dios y el porqué no se realizaba ni era conveniente que se realizase lo que pedía un hombre tan santo: Te basta mi gracia: la fuerza se realiza en la debilidad.

REFLEXIÓN

Aun obsesiones que nos presionan por senderos aparentemente placenteros, se constituyen en una señal de nuestra debilidad, que sólo con mucha paciencia y humildad va remitiendo. Quizás por la fuerza que emerge de su Espíritu a propósito de esa debilidad, debiéramos ofrecer nuestro ser a causas buenas para que en ellas abunde como abono a las plantas, la gracia de Dios. Entonces proclamaremos con alabanza y acción de gracias: se manifiesta aquí la Gloria de Dios.