sábado, 29 de junio de 2024

PALABRA COMENTADA

PALABRA COMENTADA

 

San Pedro y San Pablo apóstoles(29 de junio)

Hechos 12,1-11



REFLEXIÓN

oraba insistentemente a Dios por él

Orar insistentemente no equivale a    desconfiar de la intervención del Señor. Es una mudanza contra la propia desconfianza, para que no se                                                            apodere de. nuestra profundidad.

Mantiene despierta la esperanza. Nos ubica en el misterio de la libertad del Señor, y en la aceptación creciente de su amor salvífico, al que hemos sido llamados a servir.

Orar con insistencia, como la viuda al juez injusto, como el desesperado a quien tiene la solución. Esa insistencia e intensidad en la oración es una de las manifestaciones de la comunidad                                  fraterna operativa. Rompe su inercia, sus límites propios y confinados, y exterioriza solidaridad espiritual. El mayor bien está en expresar -los orantes- el amor transformador que caracteriza sus existencias.

se presentó el ángel del Señor, y se iluminó la celda

El ángel del Señor es el Señor que                nos ilumina como ninguno. El ángel que se disfraza de luz intenta engañarnos como si fuera el Señor.

Nuestro itinerario es caminar entre                              luces, unas del Señor y otras de su                           imitador. Si caminamos buscando el bien, el amor, la justicia, la                                fraternidad.

Ignacio de Loyola en sus ejercicios espirituales nos provee de criterios para ayudarnos a distinguir con ayuda del Espíritu la autenticidad de la iluminación del Señor.

Pedro salió detrás, creyendo que lo que hacía el ángel era una visión y no  realidad.

La intervención salvífica del Señor en nuestra historia puede ser                                        de tal magnitud que la realidad que                                             estamos acostumbrados a gestionar pierde suslímites y consistencia, y somos invitados a entrar en otra dimensión de las cosas, personas y acontecimientos.

Salmo responsorial: 33



REFLEXIÓN

Bendigo al Señor en todo momento, / su alabanza está siempre en miboca; / mi alma se gloría en el Señor: / que los humildes lo escuchen y sealegren

Los humildes son aquellos cuya actitud de fe los hace capaces deesperanza a pesar de la adversidad                                                   y vivir al límite de sus defensas.

Yo consulté al Señor, y me respondió, / me libró de todas mis ansias

La fe orante nos va calmando y serenando a su tiempo para darnosperspectivas alternas a las que nos  llevan a la desesperación. El sujetoorante se va transformando en sujeto creyente.

Un beneficio más que sicológico, una serenidad basada en su conducción, un abandono surgido del    dejarse llevar.

2Timoteo 4,6-8.17-18



REFLEXIÓN

Yo estoy a punto de ser sacrificado, y el momento de mi partida es  inminente

El último momento de cualquier circunstancia mortal es propicio para recoger nuestras débiles y últimas fuerzas en el esfuerzo de la entrega de fe y esperanza, tal como Jesús nos enseñó en el Huerto.

He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe

Es el momento de sabernos fieles en el sentido de que hemos luchado por el reino de amor y justicia que                             inició Jesús de Nazareth.

Y que deploramos no haber sido más íntegros.

Por lo que pedimos de su misericordia que nos perdone.

Mateo 16,13-19



REFLEXIÓN

Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de losprofetas.

El sondeo muestra diversidad de opiniones y expectativas. Es la mirada desde afuera y sin mayor compromiso.

"Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.

La confesión de Pedro es la expresión de un conocimiento diferente, formado al calor de la   convivencia y el Espíritu.

Se nos insta a personalizar y trascender en la confesión que hagamos en nuestra existencia sobre                                           Jesús de Nazareth.

Porque muchos pueden decir, pero    es importante que yo diga, que yoconfiese, que rubrique con mi energía vital mi adhesión a Jesús.

Con una fuerza tal que deposite en                                           ella el peso de lo absoluto, hasta donde unyo contingente es capaz.

Por lo tanto con una confesión contingente declaro mi adhesión a Jesús como un absoluto radical, un   radical trascendente.

Esa fuerza, cuando se da en la existencia, es proclamada y bendita                                        como inspirada por el amor del Espíritu de Dios en nosotros.

porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre  que está en el cielo

Más que una confesión dogmática y                                      antes de ella es una confesión de fe, que se construye desde la vivencia humana de Pedro sobre su maestro.

Si la confesión dogmática de un credo aleja sus raíces de esta convicción vivencial, se convierte en una fórmula institucional equiparable a una ley queno salva.

sobre esta piedra edificaré

En eso es líder Pedro: en la vivencia y la convivencia de la fe,que proclama en una confesión a                           Jesús como Hijo del Dios vivo.

Un verdadero Pedro es el que resiste el embate de la discrepancia contra la fe, tal como                                             es expresada.Puede no ser popular pero cuenta                                                            con la fortalezadel Señor.

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San Pedro y San Pablo apóstoles(29 de junio)

Hechos 12,1-11

El ángel que aparece en este momento crucial puede ser toda persona, animal o cosa que surge inédita y inesperadamente para aportar una salida a la encrucijada del creyente, del apóstol. Allí en eventos como éste se fundamenta nuestra esperanza de salvación oportuna e histórica, y la práctica de la oración incesante como Comunidad Eclesial que nos va transformando en creyentes auténticos.

Salmo responsorial: 33

Vivir la realidad del acompañamiento oportuno del Señor, que libra de angustias y temores, es importante para nuestra estabilidad de creyente en nuestro peregrinar por valles y llanuras.

2Timoteo 4,6-8.17-18

Cómo se puede anticipar que nos librará de todo riesgo en nuestro peregrinar? Haciendo fuerza en lo que ha sido hasta el momento su intervención en nuestra historia. Esta memoria agradecida es nuestro capital de sentido para mantenernos en marcha y vigilantes hasta el fin.

Mateo 16,13-19

El carácter único de este relato, diferente a los otros sinópticos, lo convierte en una bienaventuranza , felicidad o puesta en marcha, para la misión de la comunidad y su líder Roca, y sus líderes apóstoles de mantener en el tiempo la buena nueva de Jesús, contra cualquier poder, abriendo y cerrando con sabiduría el más allá.Pero no es cualquier revelación sino para los que se guían por Espíritu y no por carne y sangre.

DOCTORES DE LA IGLESIA

DOCTORES DE LA IGLESIA


 
De los Sermones de san Agustín, obispo
(Sermón 295, 1-2. 4. 7-8: PL 38, 1348-1352)


ESTOS MÁRTIRES, EN SU PREDICACIÓN, DABAN TESTIMONIO DE LO QUE HABÍAN VISTO

El día de hoy es para nosotros sagrado, porque en él celebramos el martirio de los santos apóstoles Pedro y Pablo. No nos referimos, ciertamente, a unos mártires desconocidos. A toda la tierra alcanza su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje. Estos mártires, en su predicación, daban testimonio de lo que habían visto y, con un desinterés absoluto, dieron a conocer la verdad hasta morir por ella.

San Pedro, el primero de los apóstoles, que amaba ardientemente a Cristo, y que llegó a oír de él estas palabras: Y yo te digo que tú eres Pedro. Él había dicho antes: Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo. Y Cristo le replicó: «Y yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Sobre esta piedra edificaré esta misma fe que profesas. Sobre esta afirmación que tú has hecho: Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo, edificaré mi Iglesia. Porque tú eres Pedro.» «Pedro» es una palabra que se deriva de «piedra», y no
al revés. «Pedro» viene de «piedra», del mismo modo que «cristiano» viene de «Cristo».

El Señor Jesús, antes de su pasión, como sabéis, eligió a sus discípulos, a los que dio el nombre de apóstoles. Entre ellos, Pedro fue el único que representó la totalidad de la Iglesia casi en todas partes. Por ello, en cuanto que él solo representaba en su persona a la totalidad de la Iglesia, pudo escuchar estas palabras: Yo te daré las llaves del reino de los cielos. Porque estas llaves las recibió no un hombre único, sino la Iglesia única. De ahí la excelencia de la persona de Pedro, en cuanto que él representaba la universalidad y la unidad de la Iglesia, cuando se le dijo: Yo te entrego, tratándose de algo que ha sido entregado a todos. Pues, para que sepáis que la Iglesia ha recibido las llaves del reino de los cielos, escuchad lo que el Señor dice en otro lugar a todos sus apóstoles: Recibid el Espíritu Santo. Y a continuación: Quedan perdonados los pecados a quienes los perdonéis; quedan retenidos a quienes los retengáis.

En este mismo sentido, el Señor, después de su resurrección, encomendó también a Pedro sus ovejas para que las apacentara. No es que él fuera el único de los discípulos que tuviera el encargo de apacentar las ovejas del Señor; es que Cristo, por el hecho de referirse a uno solo, quiso significar con ello la unidad de la Iglesia; y, si se dirige a Pedro con preferencia a los demás, es porque Pedro es el primero entre los apóstoles.

No te entristezcas, apóstol; responde una vez, responde dos, responde tres. Venza por tres veces tu profesión de amor, ya que por tres veces el temor venció tu presunción. Tres veces ha de ser desatado lo que por tres veces habías ligado. Desata por el amor lo que habías ligado por el temor.

A pesar de su debilidad, por primera, por segunda y por tercera vez encomendó el Señor sus ovejas a Pedro.

En un solo día celebramos el martirio de los dos apóstoles. Es que ambos eran en realidad una sola cosa, aunque fueran martirizados en días diversos. Primero lo fue Pedro, luego Pablo. Celebramos la fiesta del día de hoy, sagrado para nosotros, por la sangre de los apóstoles. Procuremos imitar su fe, su vida, sus trabajos, sus sufrimientos, su testimonio y su doctrina.