martes, 13 de diciembre de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Martes 3 de Adviento

Sofonías 3,1-2.9-13



REFLEXIÓN

ciudad rebelde, manchada y opresora

Puede ser una sociedad que impone y antepone a otras su bienestar y se encierra en su egoismo, olvidando el daño que ayudó a crear, y la reparación debida.

No obedeció ni escarmentó, no aceptaba la instrucción, no confiaba en el Señor, no se acercaba a su Dios

No obedecer es desconfiar. Por eso la profundidad del daño del pecado para la relación entre el Señor y nosotros. Y entre nosotros mismos, como secuela.

Un fundamento absoluto de confianza es básico para una vida sana, gozosa y positiva. Le aporta a la fe la fortaleza necesaria para asumir la existencia constructivamente.

Confiar en el Señor obedeciendo su designio es un programa de largo alcance, porque entraña toda la existencia hasta el último suspiro.

Obedecer porque nos fiamos es un acto de fe amoroso y amigable, que refleja la actitud de quien depone la prioridad de su visión de las cosas y acepta otra mejor.

Parece imposible pero es posible: la cerrazón a todo valor por encima de sí mismo.

Entonces daré a los pueblos labios puros, para que invoquen todos el nombre del Señor

Si Jesús es el Sí de Dios, y no se puede decir su nombre sin asistencia del Espíritu, entonces Jesús es la purificación de los pueblos para invocar al único Dios Padre.

para que le sirvan unánimes

Porque si algo no existe es unanimidad de los pueblos en nada.

Desde más allá de los ríos de Etiopía, mis fieles dispersos me traerán ofrendas

El relato de los magos adivinos de oriente que visitaron a Jesús niño, es una resonancia de esta y otras profecías mesiánicas.

Dejaré en medio de ti un pueblo pobre y humilde, que confiará en el nombre del Señor

La pobreza y humildad son actitudes de la era mesiánica, propias de los que confían y obedecen más al Señor que a sus propias visiones o sueños.

Hoy es un lugar común decir que nuestra principal obligación es soñar y creer en nuestros sueños, como la mejor manera de asegurar nuestra realización. Y no tiene nada de censurable. Sólo que no se garantiza que los sueños sean siempre y en todo momento una expresión de obediencia y confianza en el Señor.

El resto puede ser un pueblo que se va haciendo en la criba de la historia, se va filtrando y depurando, hasta quedar un extracto que da sabor, color y olor a todo lo creado sobre la faz de la tierra.

Un punto de referencia que ayuda a la conversión.

Debiera ser la iglesia en su sentido primordial, como pueblo de seguidores de Jesús, del evangelio, luz de las gentes.

Salmo responsorial: 33



REFLEXIÓN

su alabanza está siempre en mi boca

Cuando se le da gracias hay un movimiento que ocurre en nuestro espíritu, en contacto con el Espíritu.

Dejamos de ser para nosotros y nuestros intereses, y nos gozamos en un horizonte más amplio y luminoso: la gloria y el reinado del Padre de Jesús.

que los humildes lo escuchen y se alegren

Son los únicos capaces: capax Dei.

Es un don que debemos favorecer: escuchar al Señor con alegría y preferirlo a nosotros mismos.

Contempladlo, y quedaréis radiantes

No se puede entrar en su presencia y volver igual. Su gloria nos trastorna.

Mateo 21,28-32



REFLEXIÓN

dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo

En que momento llegó Jesús a tener ese acceso a las más encumbradas autoridades para enfrentarlas. Como los antiguos profetas que se presentaban a reyes.

"Hijo, ve hoy a trabajar en la viña." Él le contestó: "No quiero." Pero después recapacitó y fue.

"Voy, señor." Pero no fue

Porque escuchar y obedecer es hacer la voluntad

"Os aseguro que los publicanos y las prostitutas os llevan la delantera en el camino del reino de Dios

Y no podemos juzgar a los indóciles, porque no sabemos cuándo recapaciten. Ni gloriarnos de los que hablan palabras de obediencia, porque no sabemos cuándo entrarán en rebeldía.

Y, aun después de ver esto, vosotros no recapacitasteis ni le creísteis

Recapacitar ante los que creen y hacen la voluntad de Dios. Este es el pueblo resto. Esta es la iglesia, pueblo nuevo.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1602624066615218177?s=20&t=eBVVrEJRjZtSWusjdm2R4g

DOCTORES DE LA IGLESIA



 Del Libro de san Ambrosio, obispo, Sobre la virginidad
(Cap.12, 68. 74-75; 13, 77-78: PL 16 [edición 1845], 281. 283. 285-286)
 
ILUMINAS LA GRACIA DE TU CUERPO CON EL ESPLENDOR DE TU ESPÍRITU

 

Tú, que has salido de entre el pueblo, de entre la multitud, eres ciertamente una de las vírgenes que iluminas la gracia de tu cuerpo con el esplendor de tu espíritu (por eso, con toda razón, eres comparada a la Iglesia); así pues, en las noches, cuando estés en tu habitación, piensa siempre en Cristo y espera continuamente su llegada.

 Así te desea Cristo, por eso te ha elegido. El entra cuando se le deja la puerta abierta; él, que ha prometido entrar, no puede faltar a su promesa. Abraza entonces al que has buscado, acércate a él y quedarás radiante; deténlo, pídele que no se vaya luego, suplícale que no se marche. Pues la Palabra de Dios suele pasar de prisa: si siente algún desdén, no se entrega; si no se le hace caso, se retira. Atiende con interés a lo que te diga, sigue con insistencia las huellas de sus palabras; pues suele retirarse pronto.

 ¿Qué dice la esposa del Cantar de los cantares? Lo busqué y no lo encontré, lo llamé y no respondió. Si se ha marchado muy pronto de ti aquel a quien llamaste, a quien suplicaste, a quien abriste tu puerta, no por ello pienses que le has desagradado, pues a veces quiere ponernos a prueba. ¿Qué fue lo que dijo, en el Evangelio, a las turbas que le rogaban que no se fuese? Es necesario que yo vaya a anunciar la palabra de Dios también a otras ciudades, porque ésa es mi misión. Así pues, si pareciere apartarse de ti, sal fuera y búscalo de nuevo por todas partes.

 ¿Quién más, si no es la santa Iglesia, puede enseñarte cómo retener a Cristo? Y ya te lo ha enseñado, si entiendes lo que lees: Apenas los pasé, encontré al amor de mi alma; lo abracé y ya no lo soltaré.

 Y ¿cuál es la manera de retener a Cristo? No por la fuerza, no con los nudos de una soga, sino con ataduras de amor, con correas espirituales, con el afecto del alma es como se le retiene.

 Si quieres tener a Cristo contigo, búscalo sin temor al sufrimiento; muchas veces, donde mejor se lo encuentra es en medio de los suplicios del cuerpo, entre las mismas manos de los perseguidores.

Apenas los pasé, hemos citado antes. Pasado un breve espacio de tiempo después que hayas escapado a los perseguidores, sin sucumbir a los poderes del mundo, Cristo te saldrá al encuentro y no permitirá que seas ya probada por mucho tiempo.

 La que de este modo busca a Cristo, la que lo encuentra, puede exclamar: Lo abracé y ya no lo soltaré, hasta entrarlo en la casa de mi madre, en la alcoba de la que me llevó en sus entrañas. Esta casa y alcoba de tu madre no significa otra cosa que la parte más íntima de tu ser. Conserva bien esa casa, limpia bien sus rincones más escondidos, para que así, limpia de toda mancha, se levante como una casa espiritual, hasta formar un sacerdocio santo, consolidada por la piedra angular, y que el Espíritu Santo habite en ella.

 La que de este modo busca a Cristo, la que le ruega, no queda abandonada por él; al contrario, él vuelve con frecuencia a visitarla, pues está con nosotros hasta el fin del mundo

Reflexión

Retener a Cristo Resucitado fue la intención de María Magdalena, pero el Señor le pidió lo soltara para ir al Padre. Sin embargo la envió a encontrarse y anunciarlo con los tímidos apóstoles para empezar la misión del anuncio del evangelio, en comunidad eclesial. Este modo de vivir era el nuevo modo de retenerlo, y la virginidad sería entre otros signos, un modo de expresar total dedicación sin adulteración a esa misión