lunes, 13 de noviembre de 2023

PALABRA COMENTADA

 

LUNES 32 DE TIEMPO ORDINARIO

Año Impar

Sabiduría 1,1-7



REFLEXIÓN

Amad la justicia, los que regís la tierra, pensad correctamente del Señor y buscadlo con corazón entero.

No puede coexistir el pecado auténtico y la sabiduría, que entraña el razonamiento, el corazón: el todo íntegro.

Una pide la otra: la sabiduría pide pensar correctamente del Señor, en la historia, la cultura y la fe.

Cuando la reflexión teológica busca entender y comprender el misterio de Dios se encuentra en un proceso de justicia, porque busca entender correctamente el Señor.

En este proceso, tan valioso, como las propias reflexiones, a la luz de las experiencias, circunstancias y los entornos propios individuales y sociales, encontramos la tradición eclesial que la transmisión nos ofrece. La misma no coincide ni se identifica, siempre y necesariamente, con una tradición eclesiástica particular en tiempo o lugar.

Lo encuentran los que no exigen pruebas, y se revela a los que no desconfían

Porque la revelación se hace a los de corazón puro, a los sencillos y humildes. A los que son poca cosa para el mundo.

Salmo responsorial: 138



REFLEXIÓN

Todas mis sendas te son familiares.

Si alguien nos conoce es el Señor, Padre Nuestro.

allí me alcanzará tu izquierda, / me agarrará tu derecha

La preferencia bíblica es la diestra. Pero aquí son las dos: izquierda y derecha.

Una señal para abrir los oídos a las dos tendencias dominantes que se pelean la hegemonía del poder total humano y se descalifican mutuamente.

Lucas 17, 1-6



REFLEXIÓN

"Es inevitable que sucedan escándalos; pero ¡ay del que los provoca! Al que escandaliza a uno de estos pequeños

Otra traducción puede ser:

Es inevitable que vengan tropiezos, pero ¡ay de aquel por quien vienen!

Mejor le sería si se le colgara una piedra de molino al cuello y fuera arrojado al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeños.

El escándalo como el tropiezo, activa el mecanismo de la trampa que cae sobre una víctima incauta. Porque no es un tropiezo cualquiera, sino el que intencionalmente se pone para dañar.

Pequeño también se le llama al de poca dignidad en el mundo, quien no pesa mayor cosa a la hora de las decisiones que le pueden afectar.

Los pueblos empobrecidos son pequeños escandalizados a quienes se ha puesto tropiezo para creer en la vida como bendición de Dios, y por consiguiente tropiezan en la fe.

El escándalo o tropiezo en la fe se concreta en todo aquello que desune o tiende a desunir la comunidad de fe en la vida de Dios.

No se suele enfatizar mucho como parte de la ética neotestamentaria, la responsabilidad por la unión de la comunidad, de fraternidad, que tenemos todos los creyentes.

El escándalo no es solamente este u otro mal proceder, los cuales pueden ir tomando importancia según las circunstancias históricas, sino todo lo que abierta o sutilmente divida una comunidad de ágape.

Si tu hermano te ofende, repréndelo; si se arrepiente, perdónalo; si te ofende siete veces en un día y siete veces vuelve a decirte: "Lo siento", lo perdonarás."

El perdón restituye o regenera el tejido social y las relaciones humanas, si hay arrepentimiento y voluntad de reparación.

Supera la venganza.

Es nacer de nuevo.

"Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: "Arráncate de raíz y plántate en el mar", y os obedecería"

"Auméntanos la fe".

Lo que resta es seguir pidiendo que aumentes nuestra fe, para llegar a su perfección, como la que señala la Palabra de Jesús de Nazareth.

https://x.com/motivaciondehoy/status/1724022419474543089?s=20

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Sabiduría 1,1-7

Es mi amiga la Sabiduría de Dios, porque cuento con ella para ser de Dios y comunicarlo. Sin embargo puedo no comunicarlo si procedo en contra de ella y enseño a otros indebidamente.

Salmo responsorial: 138

Estamos tan inmersos en Dios que no hay donde me pueda esconder y me penetra hasta lo más recóndito. Tal transparencia para Ël aunque no lo quiera es hasta del propio agrado porque me debiera ayudar en reconocerlo y agradecerlo.

Lucas 17, 1-6

Parece estar en la teoría de las mismas palabras de Jesús. Implican una muy seria advertencia a un tipo de pecador que pone tropiezos a la fe de los pequeños, los niños, los carentes de valor aceptable en la sociedad. Una rueda de molino era un bien de labor muy caro por su fabricación más refinada de roca volcánica, y desperdiciarla en un castigo ejemplar da muestra de una gravedad tremenda. Además su peso en el océano, símbolo del abismo, asegura que el castigado no podrá regresar flotando. Pero aun eso se puede perdonar con arrepentimiento.

Tener fe como un pequeña semilla, por poco que se tenga existe la posibilidad de hacer cosas inimaginables como sembrar en el mar. Un extremo de absurdo.

BEATO CARLO

 

Anónimo
Homilía de un autor del siglo segundo
3,1-4,5; 7,1-6

Mirad cuán grande ha sido la misericordia del Señor para con nosotros: En primer lugar, no ha permitido que quienes teníamos la vida sacrificáramos ni adoráramos a dioses muertos, sino que quiso que, por Cristo, llegáramos al conocimiento del Padre de la verdad. ¿Qué significa conocerlo a él sino el no apostatar de aquel por quien lo hemos conocido? El mismo Cristo afirma: Si uno se pone de mi parte ante los hombres, yo también me pondré de su parte ante mi Padre. Ésta será nuestra recompensa si nos ponemos de parte de aquel que nos salvó.

¿Y cómo nos pondremos de su parte? Haciendo lo que nos dice y no desobedeciendo nunca sus mandamientos; honrándolo no solamente con nuestros labios, sino también con todo nuestro corazón y con toda nuestra mente. Dice, en efecto, Isaías: Este pueblo me glorifica con los labios, mientras su corazón está lejos de mí.

No nos contentemos, pues, con llamarlo: «Señor», pues esto solo no nos salvará. Está escrito, en efecto: No todo el que me dice: «Señor,Señor» se salvará, sino el que practica la justicia. Por tanto, hermanos,confesémoslo con nuestras obras, amándonos los unos a los otros. No seamos adúlteros, no nos calumniemos ni nos envidiemos mutuamente,antes al contrario, seamos castos, compasivos, buenos; debemos también compadecernos de las desgracias de nuestros hermanos y no buscar desmesuradamente el dinero. Mediante el ejercicio de estas obras, confesaremos al Señor, en cambio, no lo confesaremos si practicamos lo contrario a ellas. No es a los hombres a quienes debemos temer, sino a Dios. Por eso, a los que se comportan mal les dijo el Señor:Aunque vosotros estuviereis reunidos conmigo, si no cumpliereis mis mandamientos, os rechazaré y os diré: «No sé quienes sois. Alejaos de mí, malvados».

Por esto, hermanos míos, luchemos, pues sabemos que el combate ya ha comenzado y que muchos son llamados a los combates corruptibles, pero no todos son coronados, sino que el premio se reserva a quienes se han esforzado en combatir debidamente. Combatamos nosotros de tal forma que merezcamos todos ser coronados. Corramos por el camino recto, el combate incorruptible, naveguemos y combatamos en él para que podamos ser coronados; y, si no pudiéramos todos ser coronados, procuremos acercarnos lo más posible a la corona. Recordemos, sin embargo, que, si uno lucha en los combates corruptibles y es sorprendido infringiendo las leyes de la lucha, recibe azotes y es expulsado fuera del estadio

 ¿Qué os parece? ¿Cuál será el castigo de quien infringe las leyes del combate incorruptible? De los que no guardan el sello, es decir, el compromiso de su bautismo, dice la Escritura: Su gusano no muere, su fuego no se apaga y serán el horror de todos los vivientes