Sábado 2 de Pascua
Hechos 6,1-7
REFLEXIÓN
No nos parece bien descuidar
la palabra de Dios para ocuparnos de la administración.
Hay
Papas de la Iglesia Católica Romana que han captado esta distinción con más
claridad que otros.
Pero
además, han tenido el buen juicio de emprender reformas, a lo largo de la
historia de la Iglesia, para asegurar que el carisma de la Palabra no se
sofoque bajo el peso de la administración.
Incluso
las revoluciones mejor inspiradas han perdido velocidad de marcha y contaminado
sus objetivos por la incapacidad o insuficiencia en la administración del
cambio.
Moisés
lideró al pueblo elegido por su carisma de portavoz de la liberación de Yavé,
pero enfrentó el descontento popular durante la rutina diaria del proceso de
liberación.
Esto significa
que la Palabra, el carisma, la intervención del Señor en la Historia humana es
encarnacionista. Nos asume como somos, con nuestras complejidades, y lleva
adelante su designio con nuestra potencialidad que puede oscilar de poco a
mucho, según los casos.
La palabra de Dios iba cundiendo, y en Jerusalén crecía
mucho el número de discípulos; incluso muchos sacerdotes aceptaban la fe
Estamos
acostumbrados a medir el éxito de algo por las encuestas y sondeos. Nos
satisfacen como criterios de eficiencia, y realimentación de nuestros aciertos.
Pero el
éxito de la palabra de Dios no es sencillo ni fácil de medir, ni de establecer
criterios de éxito por las expresiones favorables o no.
Ciertos
índices se pueden considerar:la afluencia a actos religiosos, sacramentales y
demás. Y los censos de pertenencia a diferentes religiones.
Pero
esto puede resultar falaz porque no toma en cuenta y no puede, el grado de
compromiso de la conciencia, aunque se hagan actos y obras en nombre de la fe.
Esta
aspiración al conocimiento exacto deberá esperar al juicio final del Señor. Y
entretanto movernos en medio de la fe y esperanza, confiando en que hacemos lo
mejor posible.
Que la
administración de la primitiva comunidad se hiciera más compleja no
necesariamente significaba una calidad de crecimiento mayor, aunque así lo
esperaba el autor de Hechos.
Igualmente
la motivación de la comida a los necesitados podía funcionar como un señuelo
para atraer y quizás no todos eran comprometidos con el evangelio del Señor
Jesús.
Incluso
cuando falta o escasea el aspecto material, se enfría la fe y seguimiento de
muchos, como la experiencia que tuvo Moisés del reclamo del pueblo airado por
el hambre.
Salmo responsorial: 32
REFLEXIÓN
Que la palabra del Señor es sincera, / y todas sus acciones
son leales
Es por
tanto afincarnos en la Palabra de Pascua del Señor, que promete y muestra
signos de liberación y salvación, a pesar de las deficiencias y limitaciones en
el proceso de historización de las mismas.
Nuestro
propio egoísmo además de nuestros límites de creaturas, tiene mucho que ver con
la torpeza aparente con la que avanza el reino de Dios.
Juan 6,16-21
REFLEXIÓN
Al oscurecer
Por qué
ese momento del día para cruzar el lago, si en la oscuridad parece más arriesgado
hacerlo?
Era ya noche cerrada, y todavía Jesús no los había alcanzado
Si no lo
es puede parecer simbólico e intencional: sin Jesús los que le siguen pasan por
periodos de oscuridad.
caminando sobre el lago, y se asustaron
Efectivamente
el relato tiene características de una visión pascual.
Qué
necesidad tiene Jesús de ir caminando sobre las aguas, si pudo originalmente
partir con ellos en la barca?
"Soy yo, no temáis."
Este
podría ser el mensaje encuadrado en el relato con visos pascuales. Hoy cuando
oscurece la fe y la noche parece cerrada, y nos gana el temor, Jesús sigue
estando con nosotros, caminando sobre aquello que nos atemoriza.Es posible que
no lo reconozcamos fácilmente, y esa es nuestra tarea de fe: reconocerlo,
experimentarlo y proclamarlo.
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