Jueves 3 de tiempo
ordinario
Año Par
2Samuel 7,18-19.24-29
REFLEXIÓN
"¿Quién soy yo, mi Señor, y qué es mi familia, para que
me hayas hecho llegar hasta aquí?
Nuestra
identidad, nuestra misión, nuestro sentido o propósito o proyecto de vida,
desde la fe es una vocación. Un llamamiento del Señor. Una potencialidad de
colaboración en el servicio a la creación.
No
está reservada a notables exclusivamente, sino que es la herencia de cada ser
humano antes, ahora y después, generación tras generación.
has hecho a la casa de tu siervo una promesa para el futuro,
mientras existan hombres, mi Señor!
Cruza
la individualidad en el aquí y ahora para proyectarse en la posteridad. Somos
responsables de las futuras generaciones de hombres y mujeres.
La
sensibilidad por la conservación de la naturaleza rescata en parte esta
responsabilidad. porque nos recuerda que la fuentes de vida no son
exclusivamente de la generación presente.
Has establecido a tu pueblo Israel como pueblo tuyo para
siempre
El
Israel de David se acercó como ninguno al sueño de la patria unida en torno a
Yavé Rey, y a su vocación-misión mesiánica.
Una
bendición para ese pueblo mientras mantuviera la orientación de siervo servidor
y no de ideología monárquica.
Ahora, mi Señor, tú eres el Dios verdadero, tus palabras son
de fiar, y has hecho esta promesa a tu siervo. Dígnate, pues, bendecir a la
casa de tu siervo, para que esté siempre en tu presencia; ya que tú, mi Señor,
lo has dicho, sea siempre bendita la casa de tu siervo
Nos tomará la existencia entera aprender a descifrar la
promesa. en nuestras circunstancias históricas concretas y conocer la presencia
permanente del Señor y su Espíritu, entre nosotros.
Salmo responsorial: 131
REFLEXIÓN
tenle en cuenta a David / todos sus afanes
Eso
anhelamos y esperamos: que se nos tengan en cuenta los afanes por el reino, y
no se nos juzgue como lo hace el mundo, por meras apariencias y circunstancias.
hasta que encuentre un lugar para el Señor
Nuestra buena voluntad deficitaria y
precaria se orienta a buscarle lugar al Señor, sin darse cuenta de la necesidad
de convertirse a encontrar la casa que el Señor ha dispuesto para nosotros.
Esta gloria le pertenece a Él.
Marcos 4,21-25
REFLEXIÓN
Si se esconde algo, es para que se descubra; si algo se hace
a ocultas, es para que salga a la luz.
Cómo
se puede descubrir lo que se hace a ocultas: solamente lo que se hace por
solidaridad, pues en su momento brillará.
No
por vanagloria sino por Espíritu de edificación.
La
buena obra del reino se puede hacer con sigilo para evitar la presunción y la
búsqueda de vanagloria, pero deja huella que acaba por darse a conocer.
No
nos damos gloria pero el Señor nos cubre con la suya.
al que tiene se le dará, y al que no tiene se le quitará
hasta lo que tiene
Tener
y no tener qué? entrega, generosidad, solidaridad.
https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1486657396399382528?s=20