miércoles, 20 de julio de 2022

PALABRA COMENTADA

 

Miércoles 16 de tiempo ordinario

Jeremías 1, 1. 4-10



REFLEXIÓN

"Antes de formarte en el vientre, te escogí; antes de que salieras del seno materno, te consagré: te nombré profeta de los gentiles."

Fundamento teológico bíblico para respetar la vida humana desde la concepción.

Frente a esto la opinión de que el ser humano sólo se muestra como tal dentro del útero cuando adquiere una configuración humana, porque antes es sólo un amasijo de células.

Y todavía más, que la intervención contra el embrión, en quien ya se reconoce configuración humanoide si representa algún grado de riesgo para la madre.

No les tengas miedo, que yo estoy contigo para librarte

Somos cobardes y cómodos en defender nuestra posición en puntos debatibles.

Cuando por lo menos se puede hacer pensar en otros enfoques alternativos.

Mira: yo pongo mis palabras en tu boca

Esta calidad de fe nos falta cuando debemos exponer la buena nueva del reino.

No sólo en los ámbitos clericales sino sobretodo en los laicos.

Salmo responsorial: 70



REFLEXIÓN

A ti, Señor, me acojo: / no quede yo derrotado para siempre; / tú que eres justo, líbrame y ponme a salvo

El debate por la verdad es como un juicio, que puede quedar en una mera victoria de palabras y agudezas, pero no en hacer pensar la posición alternativa contraria.

Mateo 13, 1-9



REFLEXIÓN

Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, un poco cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se lo comieron.

Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra, y, como la tierra no era profunda, brotó de seguida; pero, en cuanto salió el sol, se abrasó y por falta de raíz se secó.

Otro poco cayó entre zarzas, que crecieron y lo ahogaron.

El resto cayó en tierra buena y dio grano: unos, ciento; otros, sesenta; otros, treinta.

El que tenga oídos que oiga

No debía sembrar con más cuidado, todo en tierra buena? El sembrador hace lo que puede.

Pero el redactor parece enfocarse sobretodo en la contingencia de lo sembrado, de lo que no se puede escapar a nadie: la responsabilidad de dar fruto.

Procurar dar fruto como buena tierra, aunque no sea el cien por ciento, es una motivación para el crecimiento del reino.

A dar fruto!!!

El que tenga oídos que oiga

Conocemos del Reino por la realidad a nuestro alcance, vivida cotidianamente.Las faenas comunes nos iluminan los significados más trascendentes.

La parábola del sembrador y las clases de semillas y tierras, nos ilustra sobre la diversidad de actitudes para el reino.

Diversidad en la acogida, diversidad en el compromiso y diversidad en el resultado.

Estamos bastante lejos de una realidad única, unívoca, exclusiva. Sino más bien diversa, rica en matices y abierta a la libertad y generosidad humana.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1549715341995134977?s=20&t=uzAIszDzobNckD8xrx7WEg

BEATO CARLO



Del libro de la Imitación de Cristo (Libro 2, 1-6)

 

EL REINO DE DIOS ES PAZ Y ALEGRÍA EN EL ESPÍRITU SANTO

 

Conviértete a Dios de todo corazón, despréndete de este mundo miserable y tu alma encontrará la paz; pues el reino de Dios es paz y alegría en el Espíritu Santo. Cristo vendrá a ti y te dará a probar su consuelo, si le preparas una digna morada en tu interior.

 

Toda su gloria y hermosura está en lo interior, y allí se complace. Tiene él un frecuente trato con el hombre interior, platica dulcemente con él, lo consuela suavemente, le infunde una paz profunda y tiene con él una familiaridad admirable en extremo.

 

Ea, pues, alma fiel, prepara tu corazón a este Esposo, para que se digne venir a ti y habitar en ti. Pues él dice:

 

Si alguno me ama guardará mi palabra, y vendremos a fijar en él nuestra morada. De modo que hazle en ti lugar a Cristo. Si posees a Cristo, serás rico y con él te bastará. Él será tu proveedor y fiel procurador en todo, de manera que no tendrás necesidad de esperar en los hombres.

 

Pon en Dios toda tu confianza y sea él el objeto de tu veneración y de tu amor. Él responderá por ti y todo lo hará bien, como mejor convenga.

 

No tienes aquí ciudad permanente. Dondequiera que estuvieres serás extranjero y peregrino; jamás tendrás reposo si no te unes íntimamente a Cristo.

 

Pon tu pensamiento en el Altísimo y eleva a Cristo tu oración constantemente. Si no sabes meditar cosas sublimes y celestes, descansa en la pasión de Cristo, deleitándote en contemplar sus preciosas llagas. Sufre por Cristo y con Cristo, si quieres reinar con Cristo.

 

Si una sola vez entrases perfectamente al interior de Jesús y gustases un poco de su ardiente amor, no te preocuparías ya de tus propias ventajas o desventajas; más bien te gozarías de las humillaciones que te hiciesen, porque el amor de Jesús hace que el hombre se menosprecie a sí mismo.