domingo, 13 de septiembre de 2020

PALABRA COMENTADA

 

Domingo 24 de tiempo ordinario

Eclesiástico 27,33-28,9

30 Rencor e ira son también abominables, esa es la propiedad del pecador.
1 El que se venga, sufrirá venganza del Señor, que cuenta exacta llevará de sus pecados.
2 Perdona a tu prójimo el agravio, y, en cuanto lo pidas, te serán perdonados tus pecados.
3 Hombre que a hombre guarda ira, ¿cómo del Señor espera curación?
4 De un hombre como él piedad no tiene, ¡y pide perdón por sus propios pecados!
5 El, que sólo es carne, guarda rencor, ¿quién obtendrá el perdón de sus pecados?
6 Acuérdate de las postrimerías, y deja ya de odiar, recuerda la corrupción y la muerte, y sé fiel a los mandamientos.
7 Recuerda los mandamientos, y no tengas rencor a tu prójimo, recuerda la alianza del Altísimo, y pasa por alto la ofensa.
8 Absténte de disputas y evitarás el pecado, porque el apasionado atiza las disputas.
9 El pecador enzarza a los amigos, entre los que están en paz siembra discordia.

 


COMENTARIO

El furor y la cólera son odiosos; el pecador los posee

En la cultura globalizada actual sin embargo son emociones apreciadas. Están a la base de las protestas de los activistas. Se vienen dando muestras intensas de ellas por todas partes. Una primera ojeada parece retener la impaciencia:la gente está harta de ser victimizada por los gobiernos, por las autoridades de todo tipo, por el secreto impuesto durante generaciones, por el crimen y la violencia, por las exclusiones de diferente tipo.

Este fenómeno parece desmentir la eficacia del perdón, tolerancia, aceptación de las negatividades. Es como si los cristianos y antiguos cristianos hubieran tomado un extracto del pensamiento nitzcheano, y sintieron vergüenza de ser sufridos y pacíficos, porque eso no ha sido eficaz para erradicar el mal y el sufrimiento.

Es como una onda amplia de desesperanza que va contagiando personas y regiones. Un clamor desbordado e irritado. Un imperativo casi impuesto con exigencia, que parece haber contaminado el clamor de los pobres reconocido en 1968 por los documentos de Medellín, inspirados en el libro del Éxodo.

Será que en ese clamor global que parece voz del Espíritu, se puede colar también el mal espíritu de la decepción y la desesperanza?

Como si más importante que aguardar una solución justa, sea desahogar el malestar, aunque el problema subsista.

Del vengativo se vengará el Señor y llevará estrecha cuenta de sus culpas

Porque es un círculo infernal del que no se puede casi salir.

Perdona la ofensa a tu prójimo, y se te perdonarán los pecados cuando lo pidas.

El paradigma de oración de Jesús recoge un tema sapiencial del perdón.

No tiene compasión de su semejante, ¿y pide perdón de sus pecados?

Recuerda los mandamientos, y no te enojes con tu prójimo; la alianza del Señor, y perdona el error.

Salmo responsorial: 102

 


COMENTARIO

y no olvides su beneficios

Él perdona todas tus culpas

No está siempre acusando / ni guarda rencor perpetuo

Reconocer ante el Señor nuestra actitud intolerante en ocasiones, y persistir en nuestra murmuración y atribución de bajas motivaciones a otros.

Romanos 14,7-9

7Porque ninguno de nosotros vive para sí mismo, y ninguno muere para sí mismo. 8Pues si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos, para el Señor morimos. Por tanto, ya sea que vivamos o que muramos, del Señor somos. 9Porque para esto Cristo murió y resucitó, para ser Señor tanto de los muertos como de los vivos


COMENTARIO

en la vida y en la muerte somos del Señor

Ir cayendo en cuenta de esta posesión y pertenencia.Es como nuestro ecosistema en el que encontramos el calor, la humedad, la energía, el oxígeno para crecer.

Mateo 18,21-35

21Entonces acercándose Pedro, preguntó a Jesús: "Señor, ¿cuántas veces pecará mi hermano contra mí que yo haya de perdonarlo? ¿Hasta siete veces?" 22Jesús le contestó: "No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.
23
"Por eso, el reino de los cielos puede compararse a cierto rey que quiso ajustar cuentas con sus siervos. 24"Al comenzar a ajustarlas, le fue presentado uno que le debía 10,000 talentos (216 toneladas de plata). 25"Pero no teniendo él con qué pagar, su señor ordenó que lo vendieran, junto con su mujer e hijos y todo cuanto poseía, y así pagara la deuda. 26"Entonces el siervo cayó postrado ante él, diciendo: 'Tenga paciencia conmigo y todo se lo pagaré.' 27"Y el señor de aquel siervo tuvo compasión, lo soltó y le perdonó la deuda. 28"Pero al salir aquel siervo, encontró a uno de sus consiervos que le debía 100 denarios (salario de 100 días), y echándole mano, lo ahogaba, diciendo: 'Paga lo que debes.' 29"Entonces su consiervo, cayendo a sus pies, le suplicaba: 'Ten paciencia conmigo y te pagaré.' 30"Sin embargo, él no quiso, sino que fue y lo echó en la cárcel hasta que pagara lo que debía. 31"Así que cuando sus consiervos vieron lo que había pasado, se entristecieron mucho, y fueron y contaron a su señor todo lo que había sucedido. 32"Entonces, llamando al siervo, su señor le dijo: 'Siervo malvado, te perdoné toda aquella deuda porque me suplicaste. 33'¿No deberías tú también haberte compadecido de tu consiervo, así como yo me compadecí de ti?' 34"Y enfurecido su señor, lo entregó a los verdugos hasta que pagara todo lo que le debía. 35"Así también Mi Padre celestial hará con ustedes, si no perdonan de corazón cada uno a su hermano."

COMENTARIO

"No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.

Jesús rompe frecuentemente desde la perspectiva del Reino nuestros puntos éticos de referencia. Nuestros paradigmas y modelos lo encontramos en él:perdón sin agotamiento hasta el último suspiro.Aunque otros grupos hayan dado orientaciones, él los supera a todos en radicalidad, pero en la entrega, la fraternidad.

¿No debías tú también tener compasión de tu compañero, como yo tuve compasión de ti?"

Esperamos en el Señor que todos los casos conocidos se encuentren en estas coordenadas, para vivir el agrado del Señor.

Porque con algunos se  siente por momentos como una losa, un peso, una fatiga, que esconde y nubla el agrado y la liviandad del Señor.

Lo mismo hará con vosotros mi Padre del cielo, si cada cual no perdona de corazón a su hermano.

Perdonar de corazón a los hermanos que me agravian o parecen agraviarme, se arrepientan o no, se acojan o no a un perdón.

 

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1305110940678004737?s=20

DOCTORES DE LA IGLESIA

 

San Agustín Sermón sobre los pastores 46,1-2

 No acabáis de aprender ahora precisamente que toda nuestra esperanza radica en Cristo y que él es toda nuestra verdadera y saludable gloria, pues pertenecéis a la grey de aquel que dirige y apacienta a Israel. Pero, ya que hay pastores a quienes les gusta que les llamen pastores, pero que no quieren cumplir con su oficio, tratemos de examinar lo que se les dice por medio del profeta. Vosotros escuchad con atención, y nosotros escuchemos con temor. Me vino esta palabra del Señor: «Hijo de Adán, profetiza contra los pastores de Israel, profetiza diciéndoles». Acabamos de escuchar esta lectura; ahora podemos comentarla con vosotros. El Señor nos ayudará a decir cosas que sean verdaderas, en vez de decir cosas que sólo sean nuestras. Pues, si sólo dijésemos las nuestras, seríamos pastores que nos estaríamos apacentando a nosotros mismos, y no a las ovejas; en cambio, si lo que decimos es suyo, él es quien os apacienta, sea por medio de quien sea. Esto dice el Señor: «¡Ay de los pastores de Israel que se apacientan a sí mismos! ¿No son las ovejas lo que tienen que apacentar los pastores?» Es decir, que no tienen que apacentarse a sí mismos, sino a las ovejas.

COMENTARIO

Son reflexiones importantes para una época como la nuestra en la que se ve gran número de ministros escandalizando al rebaño, haciendo difícil su entrega de fe, alejándolos quizás definitivamente. Tanta prepotencia, tanto lujo, tanto encubrimiento de otros como cómplices, tantas víctimas a quienes solo la solidaridad de los nos ministros han llevado a denunciar abusos, violaciones, indignidades. Está siendo una hora de tinieblas, y la luz que sabemos resplandecerá, tomará su tiempo.