Gálatas
1, 6-12
REFLEXIÓN
algunos os
turban para volver del revés el Evangelio de Cristo
Quién lo dice, quién lo puede decir? Una
autoridad constituida, he ahí su misión. Mantener una lectura oficial para
evitar desvíos.
Pero padecemos de una enfermedad:
desobediencia.
Y se airea con fuerza públicamente en
nuestro tiempo, como señal de cambio y de justificación: ya no valen las
autoridades, deben ser superadas por las bases.
Ocurrió con los hoy santos como
Francisco de Asís, quien también fue objeto de desconocimiento y sufrió la
división por parte de los cofrades.
No es algo nuevo, sino que hoy se
ostenta como timbre de gloria y sanción de aprobación.
Y si se duda, si se desea precisar sobre
este movimiento, se etiqueta de derechas, de conservador, de retrógrado, hasta
de cómplice de crímenes pasados.
Hoy la historia está siendo releída,
supuestamente por los víctimas, otros victimarios de turno.
Si siguiera
todavía agradando a los hombres, no sería siervo de Cristo Si alguien os
anuncia un evangelio diferente del que recibisteis,
¡ sea maldito! el Evangelio anunciado por mí no es de origen humano; yo no lo
he recibido ni aprendido de ningún
hombre, sino por revelación de Jesucristo
Esto es crucial: en mis horas bravías,
al tomar decisiones decisivas, cuál es mi evangelio? Cuál he recibido? Cuál
expresa la buena nueva de la salvación del reino en mi existencia?
Podemos recibir tantas cosas a lo largo
de nuestra vida, pero una recepción que interese y afecte la persona total
tiene que ser memorable. En ese momento se ha de dar una conversión, un cambio
radical que se deje sentir a lo largo de la historia.
Si Pablo se queja de la volubilidad de
la comunidad de Gálatas para cambiar de mensaje y aceptar uno diferente al
anunciado por Pablo, quiere decir que su anuncio no siempre fue exitoso en
términos de conversión y recepción según la Palabra.
Por lo tanto no tenemos que extrañarnos
que tantos y tantas muestren tal volubilidad como veletas, y peregrinen en el
mundo buscando y escuchando evangelios de salvación distintos de la predicación
apostólica con el ánimo de ser salvados.
Para ellos no significa mucho, que tales
predicadores insistan en que su predicación del evangelio es Palabra de Dios,
como Pablo.
Es la cruz del profeta: afirmar hasta el
martirio que lo anunciado no es propia invención sino inspiración de Dios. Por
eso cuando alguien ofrenda su vida por lo que defiende, es digno de respeto.
Sólo la coherencia de martirio y mensaje
en el tiempo constituirá el carisma ofrecido para la construcción del Reino.
Salmo responsorial:
110
REFLEXIÓN
Doy gracias
al Señor de todo corazón
todos sus
preceptos merecen confianza
Es la lucha de cada día: la coherencia
de martirio y mensaje, don para la construcción del reino.
Envió la
redención a su pueblo, / ratificó para siempre su alianza
La Palabra expresa alabanza por su
propia fidelidad y estabilidad.
Porque la Palabra es una oferta segura:
siempre a mano para ser recibida.
Los inseguros, inestables y cambiantes
podemos ser nosotros porque no damos el paso a la conversión del corazón, de
nuestro núcleo decisorio vital.
Lucas 10,25-37
REFLEXIÓN
"Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida
eterna?"
Pregunta
como una burla, al pobre y supuestamente ignorante campesino.
El
letrado pretendía comparar versiones y verificar la novedad en la enseñanza de
Jesús
"¿Qué está escrito en la Ley?, ¿qué lees en ella?"
Pero
Jesús se apegó como Palabra encarnada a la Palabra de Dios. No se salió con una
buena nueva novedosa y agradable para el escucha.
De
fácil constatación para quien accede a la sinagoga a leer y escuchar la ley.
No
hay excusa. La pregunta sobra porque sabe leer.
Si
el pobre campesino sabe, todos deben saber.
"Amarás al Señor, tu, Dios con todo tu corazón y con
toda tu alma y con todas tus fuerzas y con todo tu ser. Y al prójimo como a ti
mismo." Él le dijo: "Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida."
¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del
que cayó en manos de los bandidos?"
No
es el principio hecho norma el que salva, más bien alerta.
La
ocasión que nos trae la vida es la que permite activarse al Espíritu de la
norma.
Ser
en la vida el prójimo del hermano que nos sale al encuentro con necesidades, a
veces de muerte, es lo que da vida eterna. Es reino en acción.
Entonces
es respetable la opción de muchos por la necesidad social de la que se hacen
prójimos, según sus talentos.
"Bien dicho. Haz esto y tendrás la vida"
Aquí
no hay nada nuevo bajo el sol.
queriendo aparecer como justo, preguntó a Jesús: "¿Y
quién es mi prójimo?"
Es
decir; como quien ya se ocupa del prójimo.
Así
algunos en su vida hacen sus prójimos exclusivamente a sus amigos de cofradía y
los miembros de su club.
Son
incapaces de romper los lazos de la costumbre y el interés.
El
letrado insistió, ahora en la aplicación de esa Ley.
Precisamente
una zona en la que es posible hacerse el confundido.
Porque
nuestro problema no es que no sepamos sino que no concordamos en hacer lo que
sabemos.
Pero un samaritano que iba de viaje, llegó a donde estaba él
y, al verlo, le dio lástima, se le acercó
El
samaritano, distante y enemistado con los judíos, se aproxima por lástima, por
compasión, por entrañas.
Paradigma
de la nueva justicia.
Sea
quien sea a quien se le muevan las entrañas por aquél necesitado que encuentre,
y se aproxime, ése es el que es próximo.
¿Cuál de estos tres te parece que se portó como prójimo del
que cayó en manos de los bandidos?"
Con todo lo que hemos recibido sobre la
buena nueva, nos hemos hecho capaces de aproximarnos a quien aproxima su
necesidad?
Cuál evangelio mostramos haber recibido
en nuestra existencia diaria?
Comportarse
como prójimo es más un enfoque proactivo de prójimo, que el sentido pasivo del
prójimo que es atendido.
"El que practicó (poieo: hacer) la misericordia con
él" Díjole Jesús: "Anda, haz tu lo mismo".
El
letrado es como figura de quien no sabe nada en realidad.
Creyó
haber descifrado el prójimo, y descubrió que él no era quien se aproximaba, no
era prójimo.
Se
desenmascaró otra falsa virtud y pose virtuosa.
Dios
Padre es el modelo y paradigma de la aproximación porque se llegó a nuestra
indigencia, tan distante de sí. Con nuestra miseria lo hicimos aproximarse.
Hemos atinado con su vulnerabilidad.
Pero no
se aproxima para curiosear, o echar un discurso. Sino para HACER: amar al
prójimo es acercarse o dejar aproximar la indigencia, para hacer la
misericordia.
https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1576910015146835968?s=20&t=L6uRc40p_LkuHZAuifiW9A