lunes, 27 de marzo de 2023

BEATO CARLO



 Del Comentario de san Juan Fisher, obispo y mártir, sobre los salmos
(Salmo 129: Opera omnia, edición 1579, p. 1610)
 
SI ALGUNO PECA, ABOGADO TENEMOS ANTE EL PADRE

 

Nuestro sumo sacerdote es Cristo Jesús y nuestro sacrificio es su cuerpo precioso, que él inmoló en el ara de la cruz por la salvación de todos los hombres.

 La sangre derramada por nuestra redención no era de terneros o de machos cabríos (como en la ley antigua), sino la del Cordero inmaculado, Cristo Jesús, nuestro salvador. El templo en que ofició nuestro sumo sacerdote no era hecho por mano de hombre, sino edificado únicamente por el poder de Dios. Y así, él derramó su sangre a la vista de todo el mundo; y el mundo es el templo construido por la sola mano de Dios.

Este templo tiene dos partes: una es esta tierra que nosotros habitamos al presente, la otra nos es aún desconocida a nosotros, mortales.

Primero, cuando sufrió la muerte dolorosísima, ofreció el sacrificio aquí en la tierra. Después, cuando revestido de la nueva inmortalidad penetró por su propia sangre en el santuario, esto es, en el cielo, presentó ante el trono del Padre aquella sangre de un valor inmenso, que había derramado abundantemente por todos los hombres, sujetos al pecado.

 Este sacrificio es tan acepto y agradable a Dios que, en el mismo instante en que lo mira, compadecido de nosotros, se ve forzado a otorgar su clemencia a todos los que se arrepienten de verdad.

 Es, además, un sacrificio eterno, ya que se ofrece no sólo cada año (como sucedía entre los judíos), sino cada día, más aún, cada hora y a cada momento, para que en él hallemos consuelo y alivio.

 Respecto de él, dice el Apóstol: Obteniendo una redención eterna, pues de este sagrado y eterno sacrificio se benefician todos aquellos que están verdaderamente contritos y arrepentidos de los pecados cometidos, los que tienen un decidido propósito de no reincidir en sus malas costumbres y perseverar con constancia en el camino de las virtudes que han emprendido.

 Lo cual expresa san Juan con estas palabras: Hijos míos, os escribo esto para que no pequéis. Si alguno peca, abogado tenemos ante el Padre, a Jesucristo, el justo. Él es propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino por los del mundo entero.

domingo, 26 de marzo de 2023

PALABRA COMENTADA

 

Domingo 5 de Cuaresma

Ezequiel 37,12-14



REFLEXIÓN

abriré vuestros sepulcros

os haré salir de vuestros sepulcros, pueblo mío

os traeré a la tierra de Israel

Impacta a la vivencia de la palabra de vida, la reciedumbre con la que los primeros seguidores de Jesús asumieron la Ley y Los profetas, y entendieron con el acontecimiento de su maestro, que se rejuvenecían las profecías antiguas, y tomaban carne y momento.

La apropiación que el Israel antiguo había venido haciendo del oráculo de Yavé, ésa los del camino se sintieron con Jesús en el derecho y el deber de apropiarlo también y entregarlo a quienes no habían sido originalmente miembros del pueblo elegido, como los gentiles.

Os infundiré mi espíritu

Esa energía, ese entendimiento, ese testimonio martirial creemos que vino de un Espíritu nuevo que manaba del Jesús crucificado, muerto y resucitado.

Salmo responsorial: 129



REFLEXIÓN

Desde lo hondo a ti grito, Señor

Desde lo hondo tu impulsas nuestro grito

de ti procede el perdón, / así infundes respeto

El temor de Yavé pasó de ser un miedo, a un asombro, por el misterio de amor que desarma a fuerza de amor, no de castigo.

mi alma aguarda al Señor

Con el paso del tiempo, sabemos que te acercas más y no sabemos cómo disponernos para tu llegada definitiva.

Romanos 8,8-11



REFLEXIÓN

Los que viven sujetos a la carne no pueden agradar a Dios.Pero vosotros no estáis sujetos a la carne, sino al espíritu, ya que el Espíritu de Dios habita en vosotros.

Más bien el sentido actual debería ser, es de suponer, que no estamos radicados en la debilidad de la carne, sino en la fortaleza del Espíritu, aunque circunstancial y eventualmente, las ataduras a la carne se manifiesten como poderosas y dominantes. Deberíamos verlas como estertores de un régimen y dominio pasados, pero cuya agonía puede durar todavía un poco.

habita en vosotros

Pero debe ser apropiado por todas las regiones del propio ser, lo cual como un proceso puede tomar su tiempo cronológico.

Juan 11,1-45



REFLEXIÓN

"Esta enfermedad no acabará en la muerte, sino que servirá para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella."

Vivimos de la esperanza que toda dolencia sea la puerta de entrada a la manifestación de la gloria de Dios.

aún ahora sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.

La fe de Marta con lo grande que es, no está preparada para un horizonte de vida nueva, diferente a la revivificación de su hermano Lázaro.

Es un horizonte, además cultural, que los milagros de Jesús no habían roto para prepararse a una realidad mayor y definitiva de vida.

¿Crees esto?"

Que no se trata de creer en el último día para la resurrección, sino de una inmediata resurrección fundamentada en la fe en Jesús.

Se trata de un enfoque que nos viene a través de Juan y responde quizás a la necesidad de fortalecer a los cristianos, para quienes el último día con la vuelta de Jesús, iba tardando demasiado.

Es el legado del último evangelio, susurrarnos con la inspiración del Espíritu de Jesús resucitado, que nuestra fe ya, aquí y ahora nos resucita para la vida nueva.

Esta convicción nos potencia durante la vida vieja de la carne corrupta, a sorber con grandes tragos el elíxir de vida plena, cuyas señales se dejan sentir en los hitos de felicidad y realización personal y fraternal del ágape.

Jesús, [viéndola llorar a ella y viendo llorar a los judíos que la acompañaban,] sollozó y, muy conmovido

Aprendió el Señor a entendernos en aquel duelo que aun cuando se nos anuncie la vida plena, la pérdida de alguien querido nos afecta y conmociona en nuestra carne, y también entristece y contamina nuestro espíritu.

Jesús aprende así el dolor humano por la pérdida del amado y amada.

"¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?"

Para enfatizar el mensaje del ahora, era importante que se acumulara la percepción de la imposibilidad de hacer algo por Lázaro, quien ya estaba descomponiéndose.

"Padre, te doy gracias porque me has escuchado; yo sé que tú me escuchas siempre; pero lo digo por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado."

Pero en otro momento constatará que ni aun así creen.

el muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y la cara envuelta en un sudario. Jesús les dijo: "Desatadlo y dejadlo andar."

Y muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él.

Pero otros no. Hiciera lo que hiciese no creerían nunca.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1639969833688154114?s=20

COMPARTIR LA PALABRA

Ezequiel 37,12-14

Una visión para el pueblo que regresa del exilio con algo de esperanza y de abatimiento, que en el judaísmo siguiente alimentará la concepción de la resurrección personal.

Salmo responsorial: 129

En el lamento y declaración de culpa se espera encontrar la misericordia del Señor que perdona

Romanos 8,8-11

La visión del Espíritu que habita según Pablo sería en la comunidad eclesial, pero ha de extenderse a los individuos participantes como en red.

Los verdaderos participantes en el espíritu de Cristo viven empoderados por él.

Juan 11,1-45

Servir a la Gloria, es servir para la muerte que lo llevará a la Gloria, porque desencadenará su pasión y muerte y resurrección. Jesús en posesión de la secuencia de hechos por venir, como quien sabe lo que hace.

Es la oportunidad para que Jesús catequice la fe tradicional de Marta, encomiable, con un crecimiento en admitir que él Jesús es para el que cree en él la vida nueva, aunque haya muerto. No más sheol.

Puntada final ya con Lázaro por resurgir, urgiendo a creer lo más radical y definitivo del evangelio de vida: ver en él la Gloria de Dios actuando la vivificación de Lázaro.

Queda pendiente la tarea de creer la vida plena en Jesús, fuente de vida, cuando haya resucitado  y con él llegue el último día