PALABRA COMENTADA
VIERNES 16 DE TIEMPO ORDINARIO
Año Impar
Jeremías 3, 14-17
REFLEXIÓN
y ya no seguirán la maldad de su corazón obstinado
(heb.sherirruth1 testarudez, terquedad, tozudez, obstinación).(Strong,Vox)
(Continuar insistentemente una acción para el logro de un intento en que se halla resistencia(RAE)
La dureza de corazón es una condición humana frente a la cual el Señor, su Palabra, sus enviados no pueden hacer sino esperar que afloje. Es el privilegio de la libertad humana, y en ello estriba su dignidad de persona.
Sin embargo el Señor, su Palabra y sus enviados no cesan ni deben cesar en buscar la vuelta a la docilidad y aflojar la obstinación.
Por qué la libertad humana se obstina en posturas y actitudes que pueden resultar hasta suicidas? Por el vértigo de la libertad, según nos cuenta la literatura existencialista. Pero a la postre nadie sabe de dónde proviene ese vértigo.
Una vez que salimos del trance y alienación nos sorprendemos incluso que alguna vez hayamos persistido en el error contra nuestros propios intereses.
Interleccional: Jeremías 31
REFLEXIÓN
"Porque el Señor redimió a Jacob, / lo rescató de una mano más fuerte."
Mateo 13,18-23
REFLEXIÓN
Si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el Maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto significa lo sembrado al borde del camino.
Requerimos de la consideración constante de la Palabra a fin de entenderla antes que nos al arrebaten de nuestra atención.
Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que la escucha y la acepta en seguida con alegría; pero no tiene raíces, es inconstante, y, en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, sucumbe.
Requerimos persistir en la reflexión de la Palabra en medio de la tribulación para que eche raíces profundas en nuestro ser y existir.
Lo sembrado entre zarzas significa el que escucha la palabra; pero los afanes de la vida y la seducción de las riquezas la ahogan y se queda estéril
Requerimos un estilo de vida pobre para que nuestro corazón no se afane en la posesión y acumulación de riquezas materiales y mantener a flote su Palabra de salvación.
Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende; ése dará fruto y producirá ciento o sesenta o treinta por uno
Se trata de un proceso, éste de los mandamientos y el designio de libertad, que pasa por varias etapas: escuchar, entender y dar fruto.
En la actualidad las encuestas y sondeos no preguntan a la gente si escuchan y cuántos lo hacen. Es una introspección y autocrítica que valdría la pena.
Tampoco abrimos espacio para que los escuchas expresen cuánto y qué han entendido. Es que da tanto miedo preguntar cuando no se entiende, para evitar ser descalificado y puesto aparte.
Hay preguntas que no se quieren ni escuchar por los prejuicios que cargamos: por qué desconfiamos de los de piel negra, roja, o de un color distinto al blanco? Por qué preferimos al que paga más que al que no tiene mucho? Por qué nos repele y distancia gente con costumbres culturales diferentes a las nuestras?
Tenemos miedo a dónde iremos a parar si se permite todo. Es decir, reprimimos para no relajarnos. O nos relajamos porque no nos importa.
Y por último la etapa de dar fruto también la expresa Jesús como algo diverso y según la calidad de las tierras.
Pero en nuestro tiempo de búsqueda de excelencias, no es admisible cualquier producto o nivel de producción.
Nos satisface poco el nivel logrado por algunos y competimos para superarlo y opacarlo, no para aceptarlo.
Requerimos trabajar la tierra de nuestro corazón para que se mantenga buena y fértil y produzca frutos y así nos alejaremos de su dureza y esterilidad.
https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1684882959978131456?s=20
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Mateo 13,18-23
En los evangelios, que son obras pascuales, hay relatos que guardan espacios pre-pascuales. Así la diferenciación de tierras que reciben la semilla y producen fruto parece tener en mente cierta tipología que ya se acostumbraba en las comunidades cristianas primeras. Los malvados dirigentes judíos, la roca que falla como Pedro y los discípulos que huyeron en la hora del prendimiento, el joven ríco que termina apartandose por sus riquezas. Y posteriormente esta tipología se ha aplicado a los estados de vida: religiosos, casados, vírgenes. Aunque nada en el relato da pie para hacerlo, se entiende que como Palabra eterna está abierta a dar luz en diferentes circunstancias en el futuro