Domingo 4 de Pascua
Pascua
litúrgica, un modo de mantenerse en la vivencia del Jesús Resucitado, por parte
de la Iglesia.Quien dice Jesús Resucitado, piensa en su glorificación personal,
de su causa, de su don que es el Espíritu Santo, del avance del Reinado de Dios
Padre en el Mundo.
Esta
buena noticia, contrasta con las manifestaciones por doquier, mediáticas,
globalizadas, de un malestar generalizado: violencias, corrupción, guerras y
conflictos, pobreza de grandes proporciones, escándalos de los mejor
acreditados, hipocresía, política en sentido peyorativo.
Se
muestra poco el servidor anónimo, el servicio constante y silencioso, la
entrega amorosa y persistente pero no ruidosa, el sacrificio callado, la
oblación generosa pero no estridente.
Es como si
un mundo existiera dentro de otro mundo. Como la levadura silenciosa en la
masa. No es de extrañar: ya lo había anunciado Jesús como una peculiaridad del
Reinado. La levadura, la semilla pequeña, el crecimiento nocturno e
imperceptible dado por Dios.
Sólo que
los que pensamos que pertenecemos a este protocolo de crecimiento nos afligimos
eventualmente porque el otro mundo es sobrepujante y pretencioso. La imagen
que viene es la de los medios
sensacionalistas que se nutren del escándalo: meten mucho ruido, y hacen mucho
daño. Pero es un enfoque que no se limita sólo a medios, sino a una mentalidad
que se genera por doquier: cínica, superficial, diletante, poco exigente en sus
juicios, cambiante y vendida al mejor postor.
Hechos de los apóstoles 13, 14.
43-52
REFLEXIÓN
el sábado entraron en la sinagoga y tomaron asiento
La
estrategia inicial de los apóstoles, y la que Pablo aplicó, fue la de proclamar
a sus hermanos judíos la buena nueva de Jesús de Nazareth.
Era el
testimonio de un grupo de creyentes de la Palabra, que encontraron en el nombre
de Jesús la realización de la Promesa mesiánica
del
reinado de Dios.
Por eso
todos ellos acudían al templo e iban a las sinagogas, para convencer a sus
hermanos.
Pero
este enfoque teológico que leía la historia de la salvación milenaria resuelta
en este mesías, no encontró la acogida y la aceptación que esperaban. Por qué?
Habría
que tener en cuenta variables diferentes sociopolíticas, económicas,
históricas, culturales y religiosas.
La
realidad del rechazo hizo madurar la fe de estos testigos y abrirse a otro
desarrollo de la comunicación de la buena nueva.
Este
desarrollo alternativo pasó primero por la predicación a los hermanos judíos de
la diáspora y a los simpatizantes gentiles de la causa judía.
Posteriormente, y ante el fracaso definitivo ante sus hermanos de sangre y
cultura, se enfilaron a los gentiles, quienes en principio se consideraron los
menos dignos de recibir esta proclamación.
Fue toda
una revolución del pensamiento religioso y teológico cristiano.
Muchos judíos y prosélitos practicantes
La
presencia de estos prosélitos es la anticipación de los gentiles a los que se
dirigirá Pablo posteriormente. Si el judaísmo atraía a gentiles, no era extraño
que Pablo como los fariseos entendiera que para el seguimiento del Señor Jesús,
debía usar también de prosélitos gentiles y dejar de lado a los propios
hermanos judíos.
a los judíos les dio mucha envidia
Desde
antes el señalamiento de la envidia como causa del rechazo de los judíos ha
estado presente en los relatos.
La
envidia por la acogida que la gente hacía de la Palabra basada en las obras y
palabras de Jesús. De modo semejante a la envidia que perseguía a Jesús por su
aceptación entre los escuchas Galilea y Jerusalén.
Puede
tanto la envidia como motivación? Cuando se reduce a una reacción
exclusivamente moral, quizá parezca insignificante y desproporcionada para las
consecuencias que se le atribuyen.
Pero si
se relaciona con las maquinaciones del poder para deshacerse de quien se
envidia y quitarlo del medio, el impacto de la envidia traspasa esos linderos
morales y se hace criminal, fratricida, violenta, vengativa, injusta,
destructora de toda paz.
Ellos sacudieron el polvo de los pies, como protesta contra
la ciudad,
Los
apóstoles en ese momento frente a la resistencia y persecución, supieron que no
era oportuno seguir insistiendo en el mensaje. Y resolvieron partir para probar
en otro lugar.
Salmo responsorial: 99
REFLEXIÓN
Sabed que el Señor es Dios: que él nos hizo y somos suyos,
su pueblo y ovejas de su rebaño
La sabiduría
que nos dona la Palabra es un precipitado que se va dando mediante un proceso
responsable. A unos le toma más tiempo que a otros.
Apocalipsis 7, 9. 14b-17
REFLEXIÓN
de toda nación, raza, pueblo y lengua, de pie delante del
trono y del Cordero,
Nuestro
tiempo ha ido más allá en cuanto a las divisiones que deben ser superadas para
eliminar las discriminaciones que se sienten injustas.
Hoy nos
preocupan también los discapacitados, las minorías étnicas, las diferencias de
género, los adictos, etc.
La
igualdad es un dogma actual y toma tiempo verificar en la propia vida la
conducta que no viole algún derecho o reclamo.
Un
panorama complejo y a ratos crispado.
Se puede
decir que la multiplicación de divisiones que inició en la torre de babel no ha
podido ser aún solucionada con la buena nueva del reino de Dios.
Pero se
mantiene como una exigencia del ágape y la fraternidad para aquellos que
pretenden permanecer de pie ante el trono y el cordero.
los que vienen de la gran tribulación: han lavado y
blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero
Porque
ser hijos dignos y en pie de Dios en medio de tantas divisiones en poceso de
ulterior división requiere de la sangre de Jesús.
Las
vestiduras blancas no se logran adquirir sin esfuerzo y servicio a la causa de
la unidad.
el Cordero que está delante del trono será su pastor, y los
conducirá hacia fuentes de aguas vivas
Quién
pudiera anticipar que llegaría el momento de transformación de cordero a
pastor?
Así se
da en el reino la revolución del poder.
Juan 10, 27-30
REFLEXIÓN
dijo Jesús: "Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me
siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las
arrebatará de mi mano.
Mi Padre, que me las ha dado, supera a todos, y nadie puede arrebatarlas de
la mano del Padre.
Yo y el Padre somos uno."
La
unidad de Padre e Hijo cordero es única y matriz de toda unidad.
En
nuestra vida ordinaria nos viene bien profundizar la bendición de padres e
hijos, y trabajar por erradicar toda división y antagonismo. Lo cual no se hace
sin ágape.
Las
vibraciones de tal unificación se pueden reflejar en otros escenarios: laborales,
profesionales, escolares, ciudadanos, sociales y demás.
Una
motivación para los creyentes es la unidad del Padre y el Hijo lograda en el
ágape que es el Espíritu.
Otra es
nuestra experiencia temprana de unidad familiar que podemos aportar a los
demás.
La señal
de la unidad lograda es el cordero que se transforma en pastor. Porque todo el
que sirve es un líder con su testimonio.
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