sábado, 11 de junio de 2022

PALABRA COMENTADA

 

San Bernabé apóstol

Hechos 11,21b-26;13,1-3



REFLEXIÓN

como era hombre de bien, lleno de Espíritu Santo y de fe

Un perfil que quisiéramos llenar en nuestra existencia, pero la vida y los hechos nos dan a entender nuestra pequeñez para lograrlo, por taras, por debilidad anímica o por debilidad de fe.

Volvieron a ayunar y a orar

Su consecución no viene sola como acto de magia, nos indica la Palabra.

Oración y ayuno implican ejercitarse consciente y activamente en la onda del Espíritu, ubicarse bajo su influencia, ganando una actitud de disponibilidad para que el Señor actúe por medio nuestro.

El ejercicio del ayuno y la oración entraña el desapego, la indiferencia ignaciana y no aferrarse a nada por alguna dependencia que nos ate.

Es una purificación constante.

Qué vida es esta sometida a auto-privaciones y frustraciones? Dónde está el lado amable de la salvación evangélica?

En la fuerza que se logra para convivir y compartir, cuando aceptamos cierta auto-privación y frustración.

Cuando el estilo de vida resultante es una proclamación de solidaridad, en contra de la acumulación egoísta propia y de nuestros allegados.

En la iglesia de Antioquía había profetas y maestros:

En la historia de la Palabra en Israel se dio la dimensión profética y la sapiencial.

Ambas reclamaron la inspiración de Dios y requirieron la escucha del pueblo.

La primera enfocada en la interpretación de los acontecimientos históricos desde la Alianza y la segunda en la subjetividad cotidiana desde la Sabiduría divina.

Dos carismas, dos servicios a la comunidad en contextos y coyunturas diferentes para la edificación de la comunidad de salvación.

Jesús vivió estos carismas con su sello propio de Hijo de hombre e Hijo de Dios: interpretaba los signos en base al designio de su Padre, y enseñaba a caminar cada día la senda angosta de la salvación.

Senda angosta para unos pero amplia en el compartir para los demás.

Y así se hace ligero el camino. Mejor que ningún otro.

Salmo responsorial: 97



REFLEXIÓN

porque ha hecho maravillas

Puede ser que no se note a simple vista la intervención maravillosa del Señor.

Sólo a quien le ha sido dado mira desde la fe cómo pequeños detalles, nimios quizá, desencadenan oportunidades inéditas para el encuentro con Èl.

Por caminos escondidos reconocibles por fe

da a conocer su victoria

nos da a conocer cuando ha vencido

Mateo 10, 7-13



REFLEXIÓN

"Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad demonios.

En este caso podría ser un anuncio público, un testimonio que va anticipando una buena nueva. Por eso ofrece signos de salud: curaciones, resucitaciones, exorcismos.

Esta dinámica parece alejada de nosotros por los rasgos culturales tan diferentes de nuestra vida cotidiana de ciudades actuales.

Pero si es buena nueva de la inminencia del reino debe funcionar para la salvación profunda de quien sea.

No será para ganar la lotería, ni para sostener el consumismo, ni para reforzar el individualismo egocéntrico y narcisista.

Serán signos para que hombres y mujeres de hoy promuevan un nivel de conciencia que admita valores por encima de la dominancia cultural que produce malestar y muerte.

Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis.

Sobre todo signos que no entran en el juego diabólico del mercado, no por el mercado en sí que forma parte de la relación humana, sino por su desviación y corrupción, nutrida en la acumulación egoísta de bienes con perjuicio de la fraternidad solidaria.

En nuestra aproximación al mundo, en el servicio gratuito, sin compensación buscada, ni consciente ni manipulada inconscientemente, damos testimonio de la cercanía del reino.

bien merece el obrero su sustento

no obstante podemos esperar un sustento de quienes servimos, fiados de su generosidad y no mediante exacciones impositivas o con engaño.

quedaros en su casa hasta que os vayaís.

Como un techo donde dormir, descansar y guarecerse.

si la casa se lo merece, la paz que le deseáis vendrá a ella. Si no lo merece, la paz volverá a vosotros"

La misión por el reino aporta paz a la existencia. Una paz que no entiende el Mundo, que más bien se aturde para lograr la inconciencia, simulacro de paz.

No hay que extrañarse que no guste tal paz del reino a todos. Está hecha de material muy  simple: la docilidad a la Palabra.

En nuestra cultura contemporánea propia de cibernautas globalizados, escuchar es casi imposible y obedecer más aún.

saludad,

el saludo del servidor del evangelio es otorgar la paz para el que la merece.

Podemos decir ahora que este perfil, actividad y actitud apostólica nos inspira y comunica gozo.

El Señor nos da a entender su llamado a esa paz, por la inclinación que sentimos y por su posibilidad, de la cual nos persuade con su Espíritu.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1535571801459372033?s=20&t=JSmglqVSGgoLaWoxm0Thsg

BEATO CARLO

 De los Tratados de san Cromacio, obispo, sobre el evangelio de san Mateo

(Tratado 5, 1. 3-4:CL 9. 405-407)
VOSOTROS SOIS LA LUZ DEL MUNDO


Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en lo alto del monte; ni se enciende una lámpara para meterla bajo el celemín, sino para ponerla sobre el candelero, así alumbra a todos los que están en la casa. El Señor dijo a sus discípulos que eran la sal de la tierra, porque ellos, por medio de la sabiduría celestial, condimentaron los corazones de los hombres que, por obra del demonio, habían perdido su sabor. Ahora añade también que son la luz del mundo, ya que, iluminados por él mismo, que es la luz verdadera y eterna, se convirtieron ellos también en luz que disipó las tinieblas.

Puesto que él era el sol de justicia, con razón llama a sus discípulos luz del mundo, ya que ellos fueron como los rayos a través de los cuales derramó sobre el mundo la luz de su conocimiento; ellos, en efecto, ahuyentaron del corazón de los hombres las tinieblas del error, dándoles a conocer la luz de la verdad.

También nosotros, iluminados por ellos, nos hemos convertido de tinieblas en luz, tal como dice el Apóstol: Un tiempo erais tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor. Caminad como hijos de la luz. Y también: Todos sois hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.

En este mismo sentido habla san Juan en su carta, cuando dice: Dios es luz, y el que permanece en Dios está en la luz, como él también está en la luz. Por lo tanto, ya que tenemos la dicha de haber sido liberados de las tinieblas del error, debemos caminar siempre en la luz, como hijos que somos de la luz. Por esto dice el Apóstol: Aparecéis como antorchas en el mundo, presentándole la palabra de vida.

Si así no lo hacemos, es como si, con nuestra infidelidad, pusiéramos un velo que tapa y oscurece esta luz tan útil y necesaria, en perjuicio nuestro y de los demás. Por esto también incurrió en castigo aquel siervo que prefirió esconder el talento, que había recibido para negociar un lucro celestial, antes que ponerlo en el banco, como sabemos por el Evangelio.

Así, pues, aquella lámpara resplandeciente, encendida para nuestra salvación, debe brillar siempre en nosotros. Poseemos, en efecto, la lámpara de los mandatos celestiales y de la gracia espiritual, acerca de la cual afirma el salmista: Lámpara es tu palabra para mis pasos, luz en mi sendero. De ella dice también Salomón: El consejo de la ley es lámpara.

Por consiguiente, nuestro deber es no ocultar esta lámpara de la ley y de la fe, sino ponerla siempre en alto en la Iglesia, como en un candelero, para la salvación de todos, para que así nos beneficiemos nosotros de la luz de su verdad y para que ilumine a todos los creyentes.