MARTES 33 DE TIEMPO ORDINARIO
Año Impar
2Macabeos 6,18-31
REFLEXIÓN
como deben hacer los que son constantes en rechazar manjares prohibidos, aun a costa de la vida.
Pero Jesús se fija, más bien, en lo que hace impuro desde adentro, no lo de fuera, en el contexto de un formalismo religioso institucionalizado en su tiempo que, además, patrocina la discriminación de los impuros como pecadores.
En ese sentido no habría oposición con este texto pues el rechazo que se manifiesta es por su convicción de no comer cerdo, en el contexto de una profanación.
Eleazar prefiere no someterse a un sistema idolátrico e irrespetuoso de la alianza, que destrona al Señor de Israel por otras creencias.
"¡Enviadme al sepulcro! Que no es digno de mi edad ese engaño. Van a creer muchos jóvenes que Eleazar, a los noventa años, ha apostatado, y, si miento por un poco de vida que me queda, se van a extraviar con mi mal ejemplo. Eso sería manchar e infamar mi vejez
La actitud de integridad y la entrega a un testimonio edificante no tiene edad ni jubilación. Puede acaecer en cualquier tiempo.
Para la corrupción que aparece como generalizada y relativizada hoy en diferentes lugares, este testimonio es una saludable confrontación y crítica, a fin de despertar de la indiferencia que nos corroe.
Salmo responsorial: 3
REFLEXIÓN
tú mantienes alta mi cabeza.
De nuestra parte está deslizarnos y caer. El Señor es la fuerza que mantiene el testimonio hasta el final.
Parafraseando los derechos fundamentales de algunas constituciones de los estados, podemos decir que en el ámbito del martirio todos somos cobardes mientras no se demuestre lo contrario.
Lucas 19,1-10
REFLEXIÓN
Un hombre llamado Zaqueo, jefe de publicanos y rico
Un jefe de corruptos, es aún más corrupto. Un jefe de gente con el poder tras de sí para exigir pago de impuestos y contribuciones, y que se queda con una parte, es peor que sus delegados.
"Ha entrado a hospedarse en casa de un pecador."
Los de afuera juzgan por fuera. Jesús ofrece la oportunidad de conversión que es mejor aprovechada por alguien excluído de la salvación.
Por lo tanto se trata de alguien muy mal calificado entre la población, con mala fama y peor ejecutoria. De quien no se espera sino trampa, bribonada, corrupción y abuso de poder.
A esta escoria se dirige Jesús y se autoinvita a su casa.
Es como bajar al infierno para invitar al mismo diablo.
Con Jesús sucede lo que constantemente se hace: juzgar por fuera, propalar la maledicencia.
Se ignora, y no se da la oportunidad a pensar, que se puede estar efectuando un proceso de regeneración y salvación.
"Mira, la mitad de mis bienes, Señor, se la doy a los pobres; y si de alguno me he aprovechado, le restituiré cuatro veces más."
Una generosísima reparación es la señal de una conversión sincera.
Hoy nosotros llegamos muchas veces hasta el arrepentimiento, pero sin acordarnos del compromiso de reparar el daño infligido.
El efecto de la llamada es una liberación de las riquezas acumuladas mal habidas.
El efecto es transparencia en la actuación para que otros puedan demandarle si se sienten perjudicados.
Jesús le contestó: "Hoy ha sido la salvación de esta casa; también éste es hijo de Abrahán. Porque el Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido".
Hay alguna experiencia en nuestra vida que se acerque a una liberación de aquello que nos ata al perjuicio, aun implícito, de los otros.? Esa será una experiencia del reino del Padre.
Dicho en otra forma, el designio del Padre en su hijo Jesús de Nazareth, busca recuperar la pérdida de las personas, que naufragan en su pérdida de cosas.
Esta es una palabra luminosa y consoladora. Lo perdido, lo que no sirve, es a los ojos de Dios una oportunidad de recuperación y de su glorificación.
https://x.com/motivaciondehoy/status/1726911620981600438?s=20
COMPARTIR LA PALABRA
2Macabeos 6,18-31
Nos muestra esta lectura la disposición a la inmolación martirial movida por Dios cuando es preciso un testimonio sobre Él , aun cuando seamos ancianos. Nuestra vida mantiene en el horizonte la reparación redentora al mal en el mundo como vocación del creyente.
Salmo responsorial: 3
El sueño tranquilo aun a pesar de los enemigos que atentan contra mí es posible si reparo el daño de mis acciones pecaminosas. Es un sentido de justicia que se requiere para saldar la paz y el reencuentro.
Lucas 19,1-10
El evangelio muestra una cara poco subrayada del proceso de conversión: la reparación y ésta generosa. Porque la abundancia generosa del perdón y del pedir perdón, pudiera oscurece que se mantiene una deuda: la reparación del daño