viernes, 18 de octubre de 2024

BEATO CARLO

San Lucas
Evangelista

Nacido de familia pagana, se convirtió a la fe y acompañó al apóstol Pablo, de cuya predicación es reflejo el evangelio que escribió. Es autor también del libro denominado Hechos de los apóstoles, en el que se narran los orígenes de la vida de la Iglesia hasta la primera prisión de Pablo en Roma.

EL SEÑOR VIENE DETRÁS DE SUS PREDICADORES
DE LAS HOMILÍAS DE SAN GREGORIO MAGNO,
PAPA, SOBRE LOS EVANGELIOS

Nuestro Señor y Salvador, hermanos muy amados, nos enseña unas veces con sus palabras, otras con sus obras. Sus hechos, en efecto, son normas de conducta, ya que con ellos nos da a entender tácitamente lo que debemos hacer.

 Manda a sus discípulos a predicar de dos en dos, ya que es doble el precepto de la caridad, a saber, el amor de Dios y el del prójimo.

El Señor envía a los discípulos a predicar de dos en dos, y con ello nos indica sin palabras que el que no tiene caridad para con los demás no puede aceptar, en modo alguno, el ministerio de la predicación.

Con razón se dice que los mandó por delante a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. En efecto, el Señor viene detrás de sus predicadores, ya que, habiendo precedido la predicación, viene entonces el Señor a la morada de nuestro interior, cuando ésta ha sido preparada por las palabras de exhortación, que han abierto nuestro espíritu a la verdad. En este sentido, dice Isaías a los predicadores: Preparadle un camino al Señor; allanad una calzada para nuestro Dios. Por esto, les dice también el salmista: Alfombrad el camino del que sube sobre el ocaso. Sobre el ocaso, en efecto, sube el Señor, ya que en el declive de su pasión fue precisamente cuando, por su resurrección, puso más plenamente de manifiesto su gloria. Sube sobre el ocaso, porque, con su resurrección, pisoteó la muerte que había sufrido. Por esto, nosotros alfombramos el camino del que sube sobre el ocaso cuando os anunciamos su gloria, para que él, viniendo a continuación, os ilumine con su presencia amorosa.

Escuchemos lo que dice el Señor a los predicadores que envía a sus campos: La mies es abundante, pero los trabajadores son pocos; rogad, pues, al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies. Por tanto, para una mies abundante son pocos los trabajadores; al escuchar esto, no podemos dejar de sentir una gran tristeza, porque hay que reconocer que, si bien hay personas que desean escuchar cosas buenas, faltan, en cambio, quienes se dediquen a anunciarlas. Mirad cómo el mundo está lleno de sacerdotes, y, sin embargo, es muy difícil encontrar un trabajador para la mies del Señor; porque hemos recibido el ministerio sacerdotal, pero no  cumplimos con los deberes de este ministerio.

Pensad, pues, amados hermanos, pensad bien en lo que dice el Evangelio: Rogad al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies.

Rogad también por nosotros, para que nuestro trabajo en bien vuestro sea fructuoso y para que nuestra voz no deje nunca de exhortaros,no sea que, después de haber recibido el ministerio de la predicación, seamos acusados ante el justo Juez por nuestro silencio.

jueves, 17 de octubre de 2024

PALABRA COMENTADA

PALABRA COMENTADA

 

Jueves 28 de tiempo ordinario

Efesio 1, 1-10



REFLEXIÓN

para que fuésemos santos e irreprochables ante él por el amor

Siempre encontrarémos un “para qué” en las comunicaciones de la Palabra, que persigue movilizarnos tras el sumo bien para todos.

dándonos a conocer el misterio de su voluntad

Tal misterio, más que misterioso y oculto, es la voluntad y el anhelo divino mas preciado para Él, que se nos comunica en la medida de nuestras capacidades.

recapitular en Cristo todas las cosas del cielo y de la tierra

Quién duda que necesitamos una síntesis, como logro de la humanidad fraterna? Esta es la promesa, la dinámica y la anticipación en Jesús de Nazareth, el Cristo.

Salmo responsorial: 97



REFLEXIÓN

se acordó de su misericordia y su fidelidad

Nuestra divinidad no es falto de memoria. Siempre se acuerda de lo prometido

Los confines de la tierra han contemplado / la victoria de nuestro Dios

Una síntesis humana en la fraternidad universal que está abierta a todos sin discriminación, sin distinción, sin acepción de personas.

Lucas 11, 47-54



REFLEXIÓN

edificáis mausoleos a los profetas

vosotros les edificáis sepulcros

Dat tertium: levantar monumentos puede tener la intención de desagravio del crimen del pasado. 

Pero no parece ser el sentido de la recriminación, sino el de complicidad. 

Porque si nos demarcamos de algo, poner ciertas medidas y quedarnos en ello, no es propiamente una conversión sino complicidad.

Así, no cualquier conversión lo es en sinceridad. 

No cualquier limosna es amor a los pobres y lucha por la justicia.

No cualquier activismo lo es tampoco.

Hay que escrutar.

La respuesta esperada era la conversión, no la construcción de sepulcros de los profetas asesinados.

a esta generación se le pedirá cuenta de la sangre de los profetas derramada desde la creación del mundo; desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías, que pereció entre el altar y el santuario

Pedir cuentas puede entenderse para la venganza. 

O para la conversión sincera y emprender otro camino más justo.

maestros de la Ley, que os habéis quedado con la llave del saber

no habéis entrado y habéis cerrado el paso a los que intentaban entrar

los escribas y fariseos empezaron a acosarlo y a tirarle de la lengua con muchas preguntas capciosas, para cogerlo con sus propias palabras

Sigue sin provocar conversión la intervención de Jesús. Mala estrategia? O con esta cerrazón no cabe ninguna otra que la denuncia del mal uso del poder?

Porque educar es un compromiso a la transferencia de un saber, que se puede obstaculizar paradójicamente cerrando lo que se tenía que abrir: la sabiduría.

https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1580518338522152960?s=20&t=-BZBTcXRSnfcdYQtQdKbdA

motivaciondehoy


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Jueves 28 de tiempo ordinario

Efesio 1, 1-10

Salmo responsorial: 97

Lucas 11, 47-54