Año Impar
REFLEXIÓN
Eso nos recuerda la mujer
de Lot convertida en estatua de sal, o alcanzada por la lava.
REFLEXIÓN
sondea mis entrañas y mi
corazón
A pesar de nuestro miedo
el Señor nos lleva de prueba en prueba, hasta hacernos crecer en su unión.
que en su izquierda llevan infamias, / y su derecha está llena de sobornos.
Yo, en cambio, camino en la integridad;
Una lección
histórica actual es que los bandos de diferente signo ideológico, a pesar de su
discurso puritano también muestran corrupción en sus militantes.
Por eso la
integridad no es asunto de claridad cognitiva para establecer un diagnóstico y
lanzar una denuncia, sino más bien una revolución estimativa, valorativa, un
logro de la congruencia del discurso y la praxis.
Mateo 8,23-27
REFLEXIÓN
se levantó un temporal tan fuerte que la barca
desaparecía entre las olas; él dormía.
Una confianza a prueba de tormentas. Para
pensarlo en el insomnio de las noches, cuando las preocupaciones y miedos
atenazan.
La confianza es un bien donado para ser conquistado,
asumido. Hasta que descienda a los profundos lugares inconscientes de donde
salen los miedos y cobardías que nos empujan a claudicar.
"¡Señor, sálvanos, que nos hundimos!" Él
les dijo: "¡Cobardes! ¡Qué poca fe!"
Aceptar que sí lo somos, para comprometerlo a
actuar su confianza en nuestra poquedad.
Ellos se preguntaban admirados: "¿Quién es
éste? ¡Hasta el viento y el agua le obedecen!"
Ojalá la
resonancia que recoge el evangelista de la fama de Jesús entre sus
contemporáneos, nos alcanzara para despertar y avivar nuestra confianza en su
presencia en medio de nosotros. Esa fue su intención al escribir un evangelio.
https://twitter.com/motivaciondehoy/status/1676182462710398977?s=20
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Zoar es la pequeña, una huella más en el itinerario
que deja conocer Dios cuando actúa la salvación en sentido complejo. De lo
pequeño hace bendición, refugio, presencia. Y en lo pequeño se da el lugar
preciso de su Gloria.
Salmo responsorial: 25
Yo no camino en la integridad viva, aunque sea
ortodoxa, porque me encuentro cada día necesitado de la misericordia y
compasión por mi debilidad, y pequeñez. Esta me permite aguardar en esperanza
la intevención de su Espíritu.
Mateo 8,23-27
Somos
cobardes poque nuestra pequeñez en la fe, no alcanza a mantenernos calmos en la
tempestad. La pequeñez no es la que debe cambiar, sino hacer conciencia que la
fortaleza es la presencia dinámica de Jesús, si nuestra fe lo deja hacer.
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